La voz del Alcohol

Carta

Mi amor

Hoy, más que nunca, siento cómo mi ritmo cardíaco se acelera, hay un cosquilleo cerca de mi estómago y tengo la mente en blanco. Es una sensación que me gusta, y la razón eres tú. Es exactamente medianoche mientras escribo, hace mucho frío y no puedo dormir. Ahora busco las palabras apropiadas para redactar lo mejor posible todo lo que quiero decirte, aunque no creo que estos párrafos representen en su totalidad lo que siento por ti.

Una de las cosas que quería decirte es gracias, mi amor, por todos los momentos de alegría que me regalas y los recuerdos que estamos creando. Gracias por enseñarme a amar y por permitirme soñar nuevamente, pensar en un futuro que no sea la soledad que esperaba.

Mucho tiempo sentí muy poco amor o cariño de las personas que me rodeaban, lo que me llevó a cerrarme completamente; nadie merecía que me mostrara tal cual soy, hasta que llegaste tú. Diría que eres como la luz que vino a terminar con mi oscuridad. Has llegado a ser la razón por la cual ahora puedo dormir en paz y despertarme sonriendo.

Mis sueños pasaron de ser cosas extrañas a sueños hermosos, donde nos veo juntos cumpliendo las cosas que nos propusimos: nuestra casita, nuestros hijos, nuestra vida futura, incluso nuestro matrimonio. Son cosas que en ningún momento de mi vida me habría planteado hasta que llegaste tú. La verdad, siempre creí que el amor no existía y que solamente eran cosas que decía la gente cursi, y fue hermoso cómo lo fui conociendo poco a poco contigo.

Toda la vida fui obligado a ser fuerte, a no mostrarme vulnerable y mucho menos sensible, pero ahora estoy totalmente seguro al decirte que tú eres la dueña de todos esos sentimientos. Quiero que lo sepas todo de mí, quiero ser el amor de tu vida por siempre, y que un día, cuando recordemos todo esto, podamos decir que valió la pena cada segundo que estuvimos juntos.

Siento que te amé en muchas vidas pasadas y te seguiré amando en muchas vidas futuras. He llegado al punto en el que no puedo imaginar una realidad en donde no estés tú. Realmente quiero mostrarte de muchas maneras lo mucho que te amo y que nunca sientas inseguridad sobre eso.

Te amo y quiero compartir la vida que me queda contigo mi amor, hasta que de viejitos un día nos despidamos para volvernos a encontrar en la siguiente vida.

Te amo.