la cortina

Anoche soñe con un mundo distinto al mio. Soñe que salia a caminar y que las personas estaban todas relajadas, sin ir de aquí para allá todas apuradas. Soñe que le pedia ayuda a una persona para saber donde podía tomarse el tren hacia su hogar, y tres hombres se me acercaban amablemente a ayudarme con muy buenas intenciones.
Anoche soñe que me había subido al tren y alli todos tenian un asiento, sin estar todos apretados como si fueramos empaquetados en latas de sardinas. En el tren de mis sueños los niños mendigando no existian, no tendria sentido que en un lugar tan perfecto apareciera alguien que genere desagrado a los demas. Lo que no cambio dentro del tren eran los artistas callejeros, lo que si cambio de ellos es que lo hacian por gusto y la pasión que tenian al soltar su arte, y no lo hacian por necesidad.
Soñe que al llegar a mi hogar me encontre con la casona inmensa que tanto estuve deseando, muy diferente al departamento, con el techo humedo y manchado que se cae a pedazos, al igual que el hogar de muchos otros.
Soñe que al dia siguiente salí de paseo, camine tanto hasta que me topé con una cortina gigantesca que parecia dividir el mundo en dos, como de unos dos mil metros de altura. Soñe que al estar varios minutos frente a esa cortina termine muerto por la curiosidad y pase debajo de la cortina. Soñe que lo primero que vi fue un mundo similar al mundo real con perros sarnosos por las calles, personas caminando por las calles y volando en un mundo magico a la vez, y entre el desastre los pobres niños que se veían afectados por ese estilo de vida y generando una cadena que seguiría con el mismo problema durante los años. Al despertarme de ese sueño que parecia magico en un principio, pero que termino siendo un sueño algo realista, sali de mi casa, dirigiéndome hasta el trabajo, hasta que me encontre nuevamente con esa cortina inmensa, solo que se presentaba en forma de una avenida larga cubriendo todas las casas de barrio a medio terminar y a esas personas que hacian desagradable la vista paronamica de los que vivían al otro lado de la avenida.