Entrelazados (Loteo)

Capitulo 1: Empieza el viaje

La brisa de la tarde se filtraba por las ventanas del set de Margarita, moviendo suavemente las cortinas mientras el equipo empezaba a guardar las luces y el vestuario del último día de rodaje. El elenco estaba cansado, pero había una chispa de emoción en el aire, después de semanas de trabajo intenso, finalmente estaban listos para unas vacaciones.

Lola y Mateo se miraban de reojo mientras se cambiaban en camerinos separados, conscientes de cada movimiento del otro, aunque se comportaban con discreción. En las entrevistas, seguían la línea de siempre: "solo amigos", "excelente química en la pantalla", y demás respuestas ensayadas. Aunque sus compañeros sabían la verdad, el público y el equipo fuera del set creían que la relación de Lola y Mateo no era más que una buena amistad.

El bullicio aumentó cuando todos se reunieron en la sala de descanso. Refi, dio el primer grito de emoción.

— ¡San Martín de los Andes nos espera, chicos! —Exclamó con una sonrisa de oreja a oreja, mientras chocaba las manos con Toti y Pilar—No saben lo increíble que es la casa de Cris, ¡nos prestó la casa perfecta para estas vacaciones!

Toti asintió con entusiasmo.

—Y lo mejor es que vamos a estar solos —dijo, haciendo énfasis en la palabra—. Nada de prensa, ni fans, ni rumores de romance.

Mateo se rio por lo bajo y miró a Lola de reojo. Ella intentó mantenerse seria, pero no pudo evitar sonreír cuando lo vio. Al instante, Antonella, que notó el intercambio, los miró con una sonrisa traviesa.

—Mateo y Lola, siempre tan misteriosos —comentó Antonella, arqueando una ceja—. ¿Están listos para la aventura, "amigos"?

—Claramente —respondió Lola con tono despreocupado, guiñándole un ojo a Antonella mientras fingía concentrarse en guardar su guion—. Además, ustedes no podrían manejar tanto encanto junto —bromeó, sacando risas de todos.

Mora, quien estaba revisando un mapa de rutas, intervino.

—Entonces, ¿qué vamos a hacer cuando lleguemos? San Martín es ideal para trekking, lagos, y un montón de actividades al aire libre.

— ¡Y asados! —gritó Valentino desde el fondo, levantando una mano como si fuera una gran revelación.

— ¡Eso! Necesitamos un experto parrillero —dijo Pilar mientras apuntaba a Marto—. Y Marto es nuestro chef.

Lola y Mateo, mientras escuchaban a sus compañeros planear emocionados las actividades, intercambiaron una mirada cargada de complicidad. No era fácil mantener su relación en secreto, pero en esos momentos con sus amigos, se sentían más libres, rodeados de personas en quienes podían confiar.

Cuando terminó la reunión improvisada, el grupo comenzó a organizarse para el viaje. Trini, con su habilidad para la logística, empezó a tomar nota de los detalles.

—A ver, entonces, necesitamos decidir quién va en cada auto —dijo, con un tono serio mientras anotaba nombres en una libreta.

Se acercó a Mateo y a Lola y les susurró, como si fuera un secreto de estado:

— ¿Les gustaría ir juntos o prefieren seguir con la fachada de "solo amigos"?

Mateo sonrió y le respondió con tono divertido.

— Vamos juntos— Dijo Mateo mirando a Lola con una sonrisa y agarrándole la mano.

— Mate en la puerta está lleno de fans, no sé si es lo mejor que me vean subiendo a tu auto, van a sospechar— Dijo Lola.

— No Loli tranqui, además no vamos a ir solo nosotros dos en el auto.

— Bueno chicos entonces los pongo juntos — Dijo Trini emocionada.