Amor Verdadero O Amor Laboral

¿linda?

Christopher

—toma asiento, Hugo  —señaló la segunda silla al lado de Mateo— ¿tenías que hablarme?

—No solo eso tengo que contarte más —su tono de voz no era el mismo este era un tono más serio -eso me preocupa- —

—cuenta de una vez —suelta Mateo a lo cual Hugo asiente inmediatamente—

—Llamaron los agentes de la reunión que tuviste allá en Miami, hicieron una norma... una nueva norma en la empresa –la empresa que nos aseguraba era muy reconocida entre abogados, nosotros solo eramos un Bufete de varios Bufetes con la empresa que nos aseguraba— Quieren vernos... a ti y a mi —Se dirige Hugo hacia mi—

—¿cuál es el problema? Viajamos y ya ¿no? —El niega lentamente dando un suspiro—

—Ese no es el problema... No se como es que se enteraron, quien les contó pero creen que tu tienes esposa —abro mis ojos a tope al igual que Mateo—

—¿Que? ¿como? —Pregunta Mateo yo no podia salir del asombro al escuchar que creían que tenia esposa—

—Se enteraron de la situación que tuviste hace tiempo con la secretaria —Maldita sea, eso no era tan famoso solo lo sabían pocos—

—¿y creen que estoy casado? —Hugo asiente— ¿como?

—Bueno en realidad creen que estabas casado cuando llego esta secretaria y no saben nada más... Podemos hacerles creer que ella se quiso meter en tu relación pero no lo permitiste y la echamos del Bufete –Sugiere Hugo, no era mala idea, no sabían que estaba con Gabriela y no saben que yo estuve con Lily—

—Nos fuimos de tema... ¿por que quieren ver a Chris y a ti? ¿Y por que salio el tema de que Chris tiene esposa? — recalculaba toda la conversación Mateo—

—Que harán una reunión con los dueños de la empresa y llevarán a sus esposas, quieren que los acompañemos con nuestras "esposas" —Alzó la ceja—

—Tu también estas soltero, Hugo ¿que pasa contigo?

—Llevare a mi novia —nos deja Boquiabierta al escuchar eso—

—¿novia? ¿Tienes novia? —Hugo asiente—

—Vamos no es nuevo ¿o si? —ambos negamos— Bueno ya era hora ¿no? Ya estoy demasiado grande

—Bueno... ¿Que harán? ¿Quien es la afortunada Chris? —Bromea Mateo—

—Tenemos que elegir a Alguien que sepa de ti, que jure que esto se quede entre nosotros y que nos sea de mayor confianza para que nos ayude en esto —La mente nos volaba entre persona y persona para elegir a la indicada—

—la reunión es el otro Mes ya saben cada mes tenemos reuniones con ellos y esta que viene nos viene pisando los talones
—me pongo de pie— tenemos contados los días para escoger a mi "esposa"

—el Reloj de Hugo suena y se lleva la atención del mismo— Ya son las cinco, pensemos toda esta noche para dar opciones mañana

—Como digas, Hugo yo les ayudare —Mateo se pone de pie al igual que Hugo— me tengo que ir

—Nos vemos Chicos —se despide Hugo para poder salir de la oficina dejándonos con Mateo—

—Buscando esposa he, no me imagine nunca buscándote esposa —Bromea Mateo–

—No lo se, Mateo, esto cambio mi día en un segundo —Vuelvo a sentarme en mi silla—

/________/

—las puertas de la oficina de mi Jefe se abren y mis ojos ven al señor Hugo salir de ahí— ¿todo bien señor Hugo? ¿Necesita algo? —Hugo me ve por un momento—

—Todo bien _____, gracias —Camina hacia los ascensores, ¿que había pasado en esa oficina? ¿Por que Hugo salio algo preocupado de ahí?—

—Vamonos Chica! Que de aquí no seremos las últimas en irnos... Esto se pone de miedo a estas horas —Veo a Sally con su bolsa de piel y color beige—

—¿Ah si? —tomo mis cosas y caminamos juntas a los ascensores— ¿Han pasado cosas que destruyan a la empresa? —Sally me ve confundida—

—¿A que la pregunta? ¿Por que tan preocupada por la empresa? —Niego al instante—

—Olvídalo, solo son cosas mías —Afirme y ella seguía viéndome confundida—

—soy muy amiga de Mi Jefa y por lo que me ha contado no ha pasado, ni pasarán cosas en la empresa ni en este Bufete —Afirmó dándome una sonrisa—

—¿Muy amiga de tu jefa? ¿Enserió? —Sally iba a hablar cuando fue interrumpida por la ruidosa puerta de la oficina de Theodore– ¡no! ¡no ahorita! —busco donde meterme—

—En la oficina de Hugo —Señala, Sally, corro rápidamente para meterme en la oficina de Hugo ya que quedaba cerca de los ascensores ¡¿hasta cuando dejaré de meterme en las oficinas de los demás?!—

Escucho que llega Theodore al lado de Sally y en segundos se abren las puertas del ascensor, podía ver mi libertad pero escucho la voz de Mateo al gritar que esperaran. El ruido de las puertas cerrándose y el ruido de que estaban bajando era mi señal para salir

—Al salir Veo que no había nadie, tendría que esperar de nuevo el ascensor— ¿presiona el botón usted señorita ____ o lo hago yo? —doy un brinco al escuchar la voz de Chris atrás mía— ¿la asuste? Señorita ______

—¿yo? Yo nunca me asusto señor Vélez —se posiciona al lado mio— y déjeme presionarlo señor —doy un paso para tocar el botón con la flecha para abajo y que este se encendiera al segundo—

—Gracias no se me vaya a caer el dedo —me quedo sorprendida al escuchar eso, era justo lo que pensé cuando apareció de repente— y no me digas "señor" dime Chris el señor me hace sentir que estoy casado

—¿le teme al matrimonio? Lo supuse —digo con una sonrisa, Chris me observa por un segundo con una sonrisa fingida y las puertas del ascensor se abren—

—Después de usted Señorita ______ —Me da el paso a lo cual yo accedo -ya me quería ir a casa- —

—Gracias Chris —¿me sentí extraña diciéndole así? Si, pero el lo había pedido—

—El también entra al ascensor y las puertas de este se cierran— Temo que no nos conocemos bien... tenemos casi un minuto para conocernos — mira el reloj de su muñeca para luego verme a mi—

—¿le alcanzará un minuto? —el da una carcajada falsa—

—Bueno ya se que eres egocéntrica, mimada, rebelde, hija de papi, linda...—Los dos nos quedamos analizando lo que el había dicho en ese momento—

—¿Linda? —mi estúpido corazón tomo las riendas de mi mente haciéndome sonreír al escuchar "linda" ¡¿le parecía linda?!—

—Si _____ eres hermosa —lo admite y mi sonrisa creo que se duplicó al escuchar la nueva palabra que había dicho—

—nuestros cuerpos fueron acercándose lentamente, yo con una sonrisa y el con una cara que no pasaba de sorprendido al haber dicho tal palabra—