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_____ Todoroki es hija del respetado ministro de justicia, Keiji Todoroki, y de una heroína retirada conocida como Llama Estelar, famosa por su habilidad para controlar el fuego y la luz. Aunque su vida parece perfecta, llena de tranquilidad y ro...
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Estabas sentada en el sofá de la sala, el ambiente cálido de la casa envolviéndote mientras tu madre estaba en la cocina preparando galletas. Habías estado un poco inquieta, pensando en todo lo que había sucedido, pero ver la sonrisa tranquila de tu madre te daba una sensación de seguridad. La puerta principal se abrió y, al instante, la voz de tu padre resonó desde el vestíbulo.
—Aquí estamos, _____ —dijo, y tú te levantaste para ver quién estaba acompañándolo.
Aizawa entró primero, con su habitual actitud seria, y detrás de él, un All Might delgado que parecía un poco más tranquilo que cuando lo habías visto anteriormente. Ambos fueron recibidos por tus padres con una sonrisa cálida, aunque notaste que tu padre se veía ligeramente incómodo al ver la situación.
—Bienvenidos —dijo tu madre, siempre tan elegante y amable, como si todo fuera completamente natural.
Tu padre no dijo nada, pero su expresión era la de quien está pensando en todo lo que conlleva la situación.
—Creo que esto es un poco... fuera de lo común —comentó Keiji, tu padre, con una ligera sonrisa que no dejaba de mostrar incomodidad—. Vivir en los dormitorios de la escuela, ¿eh?
Aizawa no respondió inmediatamente, como si meditara sus palabras, pero fue All Might quien, con su sonrisa característica, trató de aliviar el ambiente.
—No te preocupes, Keiji. Es solo por un tiempo —dijo All Might, moviendo sus manos como si la situación fuera más sencilla de lo que parecía—. Y _____ estará en buenas manos. Ella tiene un gran potencial.
Tu madre, sin embargo, fue más directa. Estaba acostumbrada a la vida de héroe y sabía que la decisión no era fácil, pero la entendía mejor que nadie.
—Es lo mejor para ella —respondió sin dudarlo—. Sabemos lo que implica este mundo, y no podemos protegerla de todo, pero podemos asegurarnos de que esté preparada.
Tu padre hizo un gesto de resignación, pero no insistió más en el tema. Sabía que, en el fondo, tu madre tenía razón.
—Supongo que serías una buena diplomática —bromeó, sonriendo levemente mientras se sentaba con Aizawa y All Might en el comedor.
La conversación siguió por un rato, y tu madre sirvió las galletas que había preparado. El dulce aroma llenaba la habitación mientras los adultos charlaban de forma tranquila. Se sentaron a la mesa y hablaron de todo un poco, pero en el fondo, sabías que tanto Aizawa como All Might se sentían agradecidos por la hospitalidad de tus padres.
Finalmente, cuando ya se había hecho tarde y los dos adultos se levantaron para irse, decidiste detenerlos antes de que salieran por la puerta. La preocupación por Bakugou no te dejaba en paz.
—¡Un momento! —dijiste, levantándote rápidamente y acercándote a ellos—. ¿Ya han ido a la casa de los Bakugou? Quiero saber si de verdad está bien.
