Enciclopedia de Monstruos

Capítulo 12

¿Alguna vez has escuchado una voz desconocida sonando en tu cabeza? Es algo que normalmente no experimentaría, pero pude escuchar claramente una voz mecánica sutilmente mezclada. Confundido, sabiendo que no había nada en mi oído, me atreví a golpear la esquina de este con la palma de la mano. Por supuesto, no podía salir nada por el otro oído. Mientras repetía el extraño comportamiento, Aslan me miró con expresión de desconcierto.

—¿Qué ocurre?

—¿No escuchó la voz de una mujer antes... ?

—… ¿Qué?

La expresión limpia estaba distorsionada como papel fino. Aslan parece pensar que estoy loco. No, su reacción no fue inusual, ya que incluso yo, que lo dije, me sentí como un tonto. Negué con la cabeza lentamente porque pensé que solo me malinterpretaría si explicaba más.

—No, debo haberme equivocado.

Todo es porque pasé la noche pasada despierto. Estaba cansado por el monstruo que encontré en el patio trasero, e incluso escuché la voz de una mujer. Esa fue la única razón para explicar las alucinaciones. Aslan habló tranquilamente examinando su tez mientras acariciaba su sien adolorida.

—Lo he estado sintiendo desde esta mañana, pero tu tez no se ve muy bien.

—¿Quién? ¿Yo?

—¿Quién más está aquí sino tú? Debí haberte dicho que tenías mal semblante.

—Por eso me cuidé mucho al arreglarme…

Enderecé mi cintura ligeramente doblada para poder ver la ropa que Aslan me había dado. El aroma de las flores flotaba en su cuerpo, gracias al perfume mezclado con jabón, y la camisa sin arrugas parecía tan limpia como nueva. Sin embargo, parece que mi cutis moribundo no pudo ser cubierto por el aseo. Traté de poner una linda sonrisa, pero la reacción que obtuve fue muy fría.

—He visto a alguien tan pálido como tú y con círculos oscuros bajo sus ojos.

—¿Dónde?

—Desafortunadamente, dejó el mundo poco después.

Tiene una buena intuición ¿Cómo supo que ya había dejado el mundo una vez? Sonrió amargamente y acarició el área alrededor de sus ojos sin decir una palabra. Las ojeras se han usado todo el tiempo desde que fui esclavo en los tiempos modernos, así que realmente no me molesté con ellas. Sin embargo, a sus ojos, debe haber parecido similar a un paciente que estaba luchando por sobrevivir. Un largo suspiro se extendió por encima de su cabeza mientras se limpiaba suavemente sus delgadas mejillas.

—Es bueno volver ahora. Si espero un poco más, parece que vas a caer como una rama seca.

—¿Qué? No. ¡Estoy realmente bien!

—También es considerada una habilidad el poder examinar objetivamente su propia condición.

No había lugar para objeciones, así que me quedé sin palabras. Sin embargo, Aslan no se detuvo allí y amablemente se explicó una vez más.

—¿Quién crees que será responsable de cargarte si de repente te desmayas?

Oh. Suspiré por mi cuenta ante la pregunta con una respuesta clara. Supongamos que me derrumbé en una habitación cerrada con solo Aslan y yo. Si tuviera otro estudiante de posgrado bajo su mando, por supuesto otro esclavo… no. No tiene otro estudiante, por lo que ahora solo hay una persona que me llevaría.

—Profesor... Tiene razón.

Solo pensar en eso me marea. No puedo imaginar al profesor Hwang Song-han llevándome por el pasillo del campus hasta el dormitorio. En el momento en que recupere la conciencia de forma segura y me enfrente a Aslan, está claro que querré negar la realidad y caer en un coma eterno. Después, Aslan me miraría y diría: “¿Dormiste bien? ¿has dormido? Gracias a ti, tengo una nueva experiencia que nunca había tenido en mi vida”, burlándose de mí…