Marido, entre tus músculos y yo, no hay distancia

Capítulo 6

A primera vista, confeccionar ropa parecía sencillo, pero cuando uno se ponía a hacerlo, resultaba todo un reto. Por suerte, el cuerpo original ya había hecho algunas labores de costura antes, por lo que no le resultaba del todo desconocido.

Lu Yao tomó la ropa vieja que se habían quitado los dos niños y la usó como plantilla para cortar primero los pantalones.

Los pantalones antiguos eran similares a los modernos, divididos en paneles delanteros y traseros. El delantero era ligeramente más estrecho, mientras que el trasero era más ancho y tenía una entrepierna. Al coser estas dos piezas se completaban los pantalones.

Ambos niños eran bastante delgados, por lo que Lu Yao logró hacer dos pares de pantalones con solo un par de adultos.

Sin bandas elásticas, Lu Yao decidió agregar cordones como los de la ropa deportiva, haciéndolos estéticamente agradables y menos propensos a caerse, lo que los hacía muy cómodos de usar.

La tarea de confeccionar la ropa era algo monótona y los dos niños pronto se cansaron y se fueron a dormir a sus camas.

Le tomó aproximadamente tres horas terminar de coser los dos pares de pantalones. Lu Yao se frotó los ojos doloridos, apagó la lámpara de aceite y se tumbó en la cama sintiéndose un poco sentimental.

Nunca pensó que viajaría en el tiempo. En una época sin dispositivos electrónicos, la vida era aburrida, pero el tiempo parecía ralentizarse. Vivían al ritmo de la naturaleza: se levantaban con el sol y se acostaban con el atardecer, lo que les permitía llevar una vida sorprendentemente plena.

De repente, Lu Yao se sintió un poco emocionado por conocer a su esposo, Zhao Beichuan. No había recuerdos claros de su rostro porque el cuerpo original había estado preocupado por pensamientos de suicidio y no le importaba cómo se veía su esposo. Solo recordaba haber visto su espalda una vez, y era muy alto, se estima que medía más de 1,8 metros.

En la antigüedad, la desnutrición había provocado que la estatura media de la gente común fuera menor. Los hombres que superaban los 1,7 metros se consideraban altos, mientras que la estatura media de las mujeres oscilaba entre 1,4 y 1,6 metros. Incluso los niños medían normalmente entre 1,6 y 1,7 metros.

Por ejemplo, Lu Yao, en su vida anterior, medía 1,75 metros, pero después de cruzar al otro lado, se había encogido al menos diez centímetros. Cuando visitó la casa de su madre hoy, su segundo hermano, Lu Lin, no era mucho más alto que él, probablemente ni siquiera llegaba a los 1,7 metros. En cuanto a sus hermanos cuarto y quinto, aunque no los había visto, sabía que no eran más altos que él, probablemente alrededor de 1,6 metros.

Entonces, la altura de Zhao Beichuan era verdaderamente sobresaliente en la antigüedad.

Además de ser alto, el recuerdo de su espalda ancha también dejó una fuerte impresión, sugiriendo un físico bien formado.

El rostro de Lu Yao se sonrojó levemente. Siempre había preferido a los hombres musculosos, pero en su vida anterior, nunca había experimentado el amor. Ahora, no solo era legal casarse con un hombre, sino que también le habían dado un esposo alto y fuerte de forma gratuita. ¡No pudo evitar sentirse eufórico!

Hablando de la identidad de un "ge'er", en esta dinastía, los ge'ers eran considerados un género entre hombres y mujeres. Poseían órganos masculinos, pero también tenían la capacidad de tener hijos.

El día de su llegada, Lu Yao había revisado su cuerpo en el baño. Todos los órganos necesarios estaban allí, pero su "hermano menor" se había encogido junto con su altura. Además, debido a razones hormonales, este cuerpo no tenía pelo, ni siquiera una sola hebra, lo que parecía un tanto extraño...