One Piece Reacciona a... [PAUSADA]

5. Sorpresa inesperada

Pantalla (P.)

"Nunca había visto un viejo tan escandaloso". - Luffy.

– Escucha, enano, nosotros formamos parte de la peor tripulación de estos mares-... ¡Hip! Si no quieres que le hagamos una visita a tu mamita, será mejor que te calles la boca y dejes de ser tan irritante, ¿me oíste, escoria? - llevaba un tiempo fanfarroneando sobre la fuerza de su capitán y sus nakamas, Luffy comía tranquilo su carne, sin levantar la cabeza para que no lo reconocieran.

En la sala de Cine (S.C.)

– ¡Mamma, mamma! No saben cerrar el hocico esos pobres desgraciados. - se burló la ex-Yonko Big Mom, los minutos pasaban y el aburrimiento le comenzaba a dar hambre de algunos bocadillos dulces y azucarados.

– Llevan así los últimos cinco minutos, ¿acaso no tienen nada más que decir? - se quejaba Nami, ver a Luffy tan tranquilo se le hacía raro, si no fuera porque de vez en cuando le daba un mordisco a su carne; juraría que se estaba quedando dormido.

(P.)

"¿Yo tengo mamá? Mmmm..." - Luffy.

(S.C.)

– ¡¿Es enserio?! Lo están amenazando y el ni se inmuta, tch. Maldito despreocupado. - Buggy se cruzó de brazos en su asiento, no comprendía aún como ese chico de goma podía estar tranquilo y que ni siquiera se lo moviera un pelo, ¿tan confiado era en su propia fuerza? Le parecía arrogante, parecido al fastidioso de Shanks; el pelirrojo.

"Mocoso insolente, por supuesto que tienes madre, cabeza hueca". - Crocodile.

Normalmente, Sabo y Ace estarían felices y contentos, inclusive riéndose aunque sea un poco de las tonterías que se le ocurren o pasan por la cabeza de su querido hermanito menor, sin embargo, ahora estaban más que preocupados, su mirada paraba de vez en cuando en dirección a la puerta donde se habían llevado a su bebé llorón, esperando que porfavor saliera todo bien con los integrantes del cuerpo médico y dentro de nada él estuviera con ellos y con su tripulación, quiénes estaban sentados a su lado.

(P.)

– Viejo, hueles a podrido, deberías revisarte eso con un médico. - Luffy le importaba cinco lo que le dijeran a él, estaba ofendido por lo que dijo sobre sus nakamas Nami y Robin, lo único que quería como mínimo, era una disculpa para reparar el pequeño daño a la fama de sus amigas adoradas.

– ¡¿Ah sí?! Pues... ¿Sabes qué? No te va a matar nuestro capitán, nosotros mismo te vamos a coser esa boca vulgar que tienes y luego te vamos a colgar muerto en la entrada de este lugar, ¿me oíste, mocoso? - Los hombres sacaron unas dagas filosas de sus bolsillos, listos para atacar a Luffy, este se limitó a rodar los ojos mientras los clientes borrachos se reían, pensando en su locura que seguro era un show planeado o algo así.

– Hablas demasiado. - dijo después de darle un mordisco a su muslo de carne recién hecho, no le agradaba como con simples palabras de mierda, podían amargarle el delicioso sabor de su comida favorita.

"Voy a patearles el trasero y me largo". - Luffy.

(S.C.)

– Vaya. Ya decía yo que se estaba demorando en armar un alboroto. - Reiju se burló, riéndose entre dientes con una suave y divina sonrisa digna de una mujer Vinsmoke. Confiaba plenamente en que ese capitán de su hermano le ganaría sin problema a esos dos hombres ebrios.

– ¡Já! Se lo merecen, ¡vamos, Luffy! Venga la dignidad de Nami-swan y Robin-chwan en mi nombre. - hecho una furia, el fuego parecía envolverse de lo enojado que estaba, Zoro resopló irritado ante su interrupción a la transmisión del vídeo.

– Deja de ser tan melodramático, cejillas. Me estás molestando los oídos con tus gritos de mierda. - sin demora, Sanji le gruñó al contrario, sin entender como no podía estar tan enojado como él por lo que dijo ese idiota en la pantalla.

– Cállate, marimo. - ahí terminó la breve conversación, nada más. Era de mayor importancia saber que iba a pasar a continuación con la decisión de Monkey D. Luffy.

– Muchas gracias, cocinero-san/Sanji-kun. - agradecieron al tiempo ambas mujeres tripulantes de los sombreros de paja, les inspiraba confianza y seguridad tener compañeros como ellos, les daba felicidad ser protegidas por tan poco, ellas harían lo mismo por sus nakamas, estaban seguras.

(P.)

– Pfff-... ¿Seguro? Pues sabes que acabo de recordar algo muy bueno para reírse, mocoso. ¡La patética muerte del segundo comandante de Barba blanca! Eso sí que es ser miserable. - Luffy al principio tenía como plan patearle el trasero a esos dos para noquearlos, así seguramente dejarían de ser tan molestos y los clientes podrían estar en paz.

– Oye sí-... Jajajajaja, ay no... Esa si fue una manera estúpida de morir la verdad, ¡¿Sacrificarse por un inútil de la "peor generación" a la que tanta fama le hacen?! Eso no fue más que puro show todo el tema alrededor de ese tal Ace. - respondió el contrario, el enojo y la peligrosidad del gomoso crecía en silencio, dejó su carne en un plato. Él no era de pensar, pero tampoco buscaba despertar a sus cansados amigos después de todo el trabajo arduo que hicieron, Brook estaba de guardia esa noche, la discreción era clave.

"¿Se creen intocables estos idiotas? Nadie se burla de Ace ni de chiste, ¡¿manera estúpida de morir-.?!, ¡yo les voy a mostrar quien se va a morir estúpidamente hoy!" - Luffy.

El gomoso apretó los dientes poco antes de salir a correr, ¿cuál era su plan? Los hombres ebrios lo siguieron nublados por la rabia, sin medir las consecuencias de sus propias palabras.

(S.C.)

La atención de todos había logrado a ser captada, Luffy no solía ser alguien grosero a menudo, muy pocas veces, mucho menos ser de una persona de pensar, su tripulación pensó que solo golpearía a los tipos y se iría corriendo, pero indagando en sus recuerdos de esa noche, ninguno se había despertado, habían dormido como bebés mejor dicho, entonces. ¿Qué se le había ocurrido hacer a su capitán ahora?

Sus hermanos jurados estaban más que curiosos, Sabo apretaba sus manos en puños tan fuertes que sus guantes negros cubrían sus nudillos blancos por la fuerza, sin embargo, Ace lo detuvo antes de decir algo, dándole unas pequeñas palmaditas en el brazo.

Él sabía porque había muerto, aprendió que no necesitaba la aprobación de alguien que no le importara, mientras a su familia le pareciera bien y honorable su sacrificio por su hermano menor, con eso era suficiente, a pesar de que también le diera rabia la actitud de esos sujetos, esperaba a saber que ocurriría ahora mismo con la extraña actitud de su hermano que él ni nadie vivo había visto.

Continuará

(Coman, hijos, coman xd, nah mentiras. Ahí me dicen que les parece el capítulo y si quieren más ya saben, solo tienen que pedirlo :3)