—¡Papá, voy a salir a caminar! —aviso Hina, una chica adolescente quien era muy curiosa.
Hina es una chica de piel trigueña, de ojos negros y pelo corto desordenado.
Su personalidad es alegre, un poco enojona y amable. Es medio pequeña, usa un vestido que estaba por debajo de las rodillas, el color del vestido es un hermoso lila pastel, el cual combina perfectamente con sus ojos.
De repente, un fuertísimo ruido sonó como un eco y Hina salió corriendo del susto, llegando así a un castillo enorme y bastante antiguo.
Al entrar vio decoraciones lujosas y muy bellas. Un gigantesco candelabro colgaba del techo, iluminando el gran salón principal.
«Dios mío, ¿Donde estoy?», pensó la chica.
La chica seguía explorando el castillo. Subió por unas escaleras hasta llegar al segundo piso del castillo. Cuando llegó fue a una parte del castillo que estaba prohibida
"El ala oeste".
La chica se dio media vuelta, y al hacerlo su corazón se detuvo al toparse con la Bestia
La chica se asustó como nunca.
—L- lo siento —su voz tembló.
La Bestia la miro y con voz ronca y grave dijo:
—¿Que haces en mi castillo?—la Bestia estaba escondido entra las sombras por lo que su figura no era visible, la chica con miedo y nerviosismo dijo:
—S- solo exploraba el castillo. Perdón si he invadido su espacio...
Antes de que pudiese continuar la oración, la Bestia interrumpió a Hina.
—Silencio ahora. —ordenó. —Quiero que te vayas ahora mismo y no vuelvas nunca.
Pero lo que Hina no sabía, es que la Bestia solo mintió para ocultar sus sentimientos.
La chica lo miro curiosa de su figura y le pregunto
—¿Puedes mostrarte?—dijo amablemente.
La Bestia quedó congelado al escuchar las palabras de la chica.
La chica le pregunto de nuevo que si podía mostrarse. Pero la Bestia no hizo lo que la chica le pidió. Ya que la Bestia pensaba que era fea y horrible para una humana tan linda como la chica.
La Bestia lo pensó las posibilidades de que la chica se asustara y le dijera "monstruo" o algo parecido. Pero la Bestia finalmente salió de las sombras revelando su aspecto.
La luz de la luna dio en la figura de la Bestia y cuando la chica lo vio se asustó por su apariencia impotente.
La Bestia la miro con ojos fríos y le dijo
—¿Y bien? ¿Que te parezco?—dijo con su voz grave y ronca.
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"El encanto de una Bestia"
Romance"En una época medieval donde los monstruos eran comunes, una chica de 17 años que era hija de un brujo que vivían en un bosque lejos del pueblo. Hina la hija del brujo, era muy aventurera y curiosa, siempre quería explorar los secretos del" bosque d...
