Lo que antes no pudo ser, ahora pudo florecer
Al fin llegó el momento de sentirnos piel a piel.
Lo entreverado de aquel ayer que impidió que nos viéramos aquella vez,
Lo olvidé, pero al recordarlo, me cuestionaba si aún quedaba chispa por encender,
Que nos conectó en un instante que selló lo dulce de un tiempo que, a lo lejos, supimos beber.
Cada momento que pasó mantuvo una constante que de nuevo nos encontró, como si del destino se tratase.
En su casa, la música sonaba a rock argentino,
Bebimos la dulzura de un buen vino tinto,
Que fue testigo de los besos desvestidos, que nos envolvieron en la melodía de un armonioso ritmo.
Ver al fin de frente lo que por fotos aceleraba la adrenalina de ahora tener que hacer lo que antes se decía,
Hablar un poco de la vida y sus caminos nos distraía,
Mientras de fondo había una película que se desvanecía porque, de nuevo, las ganas nos vencían.
Hasta que la cama nos invitó a entre sábanas retrasar el sueño,
Sudando colores muy intensos,
Hasta despertar del desvanecimiento por agotar las energías a cero.
Y sin pensarlo, comenzamos el día con desenfreno,
Agitados al extremo, volviendo a sentirnos como adictos que consumen sin miedo.
Hasta que el sueño llegó, recuperándonos tras derrochar tanta pasión,
Para al fin despedirnos de una noche nos empapó como un torrencial que fugazmente se terminó.
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Mil Gracias!
JONH FREDETTA
@JonadeBarrosdeMello
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LA BELLEZA DE LA PALABRA: un oleaje de versos
PoetryEn una espera de apariencia interminable que va yendo hacia ninguna parte, mientras el sol vacilante irradia un calor amigable anunciando que el tiempo se detuvo por un instante. Las experiencias que se recuerdan con sonrisas y lágrimas enfurecidas...
