nueve

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- Son las 7 de la mañana, que verga quieres? - dije apenas contesté el celular que llevaba varias veces vibrando.

- Entonces le confirmo a Peso o no? - escuché a Nata decirme.

- Es que con él nada es tranqui wey y apenas si dormí - me quejé.

- Con quien cogiste o que? - rio.

- No mames no, me puse bien pedo solito aquí en la casa.

- Qué pedo, por qué?

- Ayer nos encontramos a María y a sus amigas en el restaurante de sushi.

- No mames y hablaron? - negué.

- No me vio, pero fue raro y solo llegué a casa a vaciar la botella.

- Vamos al rato y me cuentas, ándale! Ya tiene un vergo que no pisteamos juntos.

- Está bien, pero que tu chofer me regrese a casa temprano que los míos tienen el día libre porque no pensaba salir.

- Simón wey, ahora duérmete de nuevo que te quiero completo en la noche.

Colgué y volví a meterme entre las cobijas, necesitaba seguir durmiendo porque sentía que la cabeza iba a estallarme en cualquier momento por la resaca que tenía.

Después de un rato escuché a Carmen entrar a mi habitación con el desayuno, dejó la charola en el mueble enfrente de mí y abrió las cortinas para dejar entrar un poco de luz.

En su paso recogía todo el desmadre de anoche mientras negaba con la cabeza.

- Perdón por preocuparla, no tomé mucho - dije.

- Órale almuerza en lo que voy a la cocina por un suero porque mírate nada más esa carita - contestó acercándome la charola.

Tal como lo dijo, minutos más tarde volvió a subir con mi antídoto a todo lo que tomé.

Prendí mi celular y como era costumbre tecleé su nombre en el buscador de Instagram y esta vez corrí con suerte. Desbloqueado y con su perfil público, ¿qué más podía pedir?

Estuve dudoso en si seguirla o esperar un poco más, tampoco quería hacerme el interesante porque no es el plan y no quería parecer un intenso de primera.

- Ya síguela mamon!

- Y si vuelve a bloquearme wey?

- Ya deja de sobre pensar y hazlo - contestó Pantera - O a ver pásame esa madre.

Me arrebató el celular e hizo lo que tanto había pensado desde hace casi una hora.

- Ten - extendí mi mano mirándolo un poco molesto - No cabron, ni te enojes.

- Lo quería hacer yo!

- Dentro de una semana o qué? - le levanté el dedo de en medio - Mejor agradéceme.

- Si me bloquea de nuevo va a ser tu culpa.

- Si si, ya a la chingada! Mejor apúrate y vamos al estudio que ya todos andan allá - alcé una ceja, no recuerdo haber hecho planes para hoy.

- Qué hacen ahí? - contesté confuso.

- No mames Antonio ya no tomes que nunca te acuerdas de nada - dijo burlándose - Anoche nos llamaste diciendo que ya tenías una canción.

Entonces recordé lo que escribí en notas y todos los borradores que hice para conseguir otra canción triste.

- Si recordaba, nada más te ando calando. Solo me baño rápido y nos vamos, ve eligiendo el coche.

ENTRE NOSOTROS / JUNIOR HDonde viven las historias. Descúbrelo ahora