Estaba ensayando, el detalle de la nota fué única, mi estómago dió un brinco fuerte, y la emoción aún en mi piel se sentia a delirar, el recordar como me habia besado, fue una promesa de lo que noa esperaba, sólo queria estar con él, hacerle el amor, conocerlo y ¿porque no? Estar en su vida y él en la nuestra para siempre.
- "Mi pequeña fiera te veo al rato"
Mi mente me estaba jugando raro...
Terminamos de ensayar y nos fuimos a acomodar, me encontraba terminandome de acomodar cuando escuche un ruido extraño, me acerque lentamente a la puerta y vi a una mujer muy hermosa, una que diria yo la tipica mujer que gritaba lujos y como decimos nosotros los venezolanos, "plastico por todos lados", de lo operada que estaba, no hanai ningún lado de su cuerpo que no gritara "operada", estaba entrando en la habitacion de Alec con otro hombre y llevaban algo en sus manos, no supe que era, pero me pareció demasiado extraño que esa mujer entrara alli.
Armandome de valor me fuí tras de ellos y al entrar, ellos estaban buscando algo y al verme se sorprendieron.
- ¿Quienes son ustedes?
- Eso no es problema tuyo, ¿Qué haces aquí tú? ¿Con qué derecho te crees para entrar a la habitación de mi novio?
- ¿No... Novia?
- ¡Si! Está es la habitación de mi novio, o es ¿Qué no sabes quién soy yo?
- Sinceramente no sé quien eres, ni me importa, sólo se que entraron a la habitación de Alec sin él estar aquí, están entrepitiando sus cosas, y se que sin permiso, o me vas a decir que si sabe que estás aquí, y de paseo con otro hombre.
Al decir esto señale al hombre con quién ella estaba y lo mire de arriba hacia abajo con desprecio, el hombre muchísimo más grande que yo y ella también, no me importaba, estaban dentro de la habitación del hombre que me tiene cautivada, y algo me suena que no es cierto nada de lo que ella dice, aunque de momento flaquee, y si la duda se clavo en mi corazón. El hombre se acercó para intimidarme con su tamaño, lo que él no sabe es que se necesita más que un tamaño grande para intimidarme.
- Mira, te vas por las buenas o por las malas, tu decides.
- Si no me voy, ¿Qué?, le dirás a tú títere que me saque?
Mi sarcasmo desestabilizó al hombre y su mirada de duda fue aún mayor, porque mientras lo tenía en frente de mí, ella hablando mi mirada era fría, en ese momento ella avanzo a mí y levanto su mano, fui más rápida que ella en detenerle la cachetada, sencillamente esa perra barata " bueno cara porque esas operaciones costaban bastante" no me iba a poner una sola mano encima.
- ¡Tocame, y te lo juro que será lo último que toques en tu vida!
En esa escuchamos una voz que ninguno espero escuchar y menos presenciar todo el espectáculo, su voz fría, dura y muy pero muy autoritaria me hizo temblar en el lugar, ¿En qué momento entro Alec en su cuarto? ¿Ese hombre tiene complejo de felino?
No estaba sólo, estaba con Alejandro y con su mano derecha, Leonador creo que se llama, y Emily si no mal recuerdo.
- ¿Que mierda está pasando aquí?
La mujer salió corriendo a los brazos de Alec y se le guindo, intento darle un beso en la boca pero el la esquivo.
- Alec está mujer entro en tu habitación, y no quería salir.
- ¡¡¡De paso de zorra cara, porque hay que reconocer que toda esa operaciones que tienes costaron un ojo de la cara mentirosa!!!
Todos se quedaron asombrados la calma con la que respondía, la ironía con la que hablaba y de paso señalando la con desprecio con las manos de arriba hacia abajo, ella quiso avanzar hasta mi de nuevo para intentar golpearme y yo avance también, "Ay perra cara, no sabes con quién te estás metiendo"
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Tu... Mi Rame....
RandomMi mirada viajó rápidamente a sus ojos y recordé cómo fue verlo después de tanto tiempo. ¡Cómo brillaron al observarme mientras recorría mis labios! Mi corazón y mi piel reaccionaron a ese instante. Aunque tenerlo de frente era sentir que no estaba...