STASY LEVEDEV

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Días después...

Había llegado sanos y salvos a la ciudad subterránea, nos habían recogidos dos hombres y por lo que veía era conocidos de Sebasthian, nos habían instalado y esperaba que llegara la habitación, escucho que la puerta se abre y entra un Sebasthian de mal humor, cierra la puerta y se apoya contra ella.

- No muerdo - digo y puedo ver que su expresión no cambia.

- No tenemos que compartir la cama - dice y yo aprieto los dientes fuerte, lo sabía el maldito ya se quiere alejar de mi.

- Oh.... Vaya no sabia que aquí nos separaríamos - digo y me doy media vuelta, me bajo el cierre del traje y lo bajo por mis hombros, lo dejo en mi cintura por unos segundos y lo termino de bajar por mi trasero y finalmente por mi piernas, escucho un suspiro, miro por encima de mi hombro y me doy media vuelta.

- Ups... Lo siento creí que ya te habías ido - digo e inmediatamente noto que Sebasthian se aleja de la puerta y se acerca rápidamente a mi, me agarra de la nuca y me acerca a él, sus labios se pegan a los míos y nos besamos con una necesidad absurda, su lengua entra en mi boca y gimo por la intrusión mientras que las manos de Sebasthian toma mis caderas con fuerza para al final terminar el beso.

- Que quieres de mi? - Pregunta Sebasthian enojado.

- Que me folles - pido y aprieto mis pechos contra su pecho, lo escucho gruñir para que solo me de media vuelta y me doble contra la cama, pone su mano sobre mi espalda y hace presión para que no me levante, siento como sus mano se mete entre mis piernas y se acercan a mi coño un jadeo se me escapa y me muevo para lograr su toque, entonces recibo a cambio una nalgadas que me hace saltar por la sorpresa.

- Ay! - Grito y luego su mano toca la nalga golpeada.

- No te muevas o lo volveré a hacer - dice Sebasthian y yo asiento, todos los recuerdos vuelven a mi, la vez que Sebasthian nos llevó a Jade y a mi al Club, las personas que vi, su vestuario, la mano de Sebasthian baja por mi trasero y toca cerca, pero tan cerca de mi coño que me mojo rápidamente, aprieto las piernas para tratar de tener algo de alivio.

- No cierres las piernas amor - dice esa palabra y algo dentro de mí se calienta y se vuelve lava, oh, es mi coño, no hay otra forma de que me esté derritiendo, Sebasthian mete una pierna entre las mías y me hace abrirlas.

- Por favor - pido y siento como Sebasthian se acuesta encima de mi y se acerca a mi oído, su respiración es desigual.

- Por favor que? - Susura en mi oído y hecho la cabeza hacia atrás.

- Dame algo - pido y siento como pasa su lengua por mi oído y primero lame y luego chupa.

- Ah! - Jadeo y arqueo la espalda para sacar el trasero y restregarme contra su polla dura y necesitada de atención.

- Quieres esto? - pregunta mientas mete su mano entre mis piernas y las pone sobre mi coño cálido y hambriento por él, siento como me abre con sus gruesos dedos, noto como sus deseos buscan mi entrada y entra un primer dedo y jadeo.

- Oh Dios - susurro y escucho el resoplido de Sebasthian.

- Jesucristo - Estas empapada - dice y toca un punto dentro de mí coño que me hace poner los ojos en blanco y dejo salir todo el aire de mis pulmones.

- Oh - Mira encontré como hacerte gritar - dice y me muerdo el labio inferior.

- Tu coñito agarra también mi dedo - No quiero ni imaginarme como será con mi polla dentro de ti - dice y yo chillo.

- Deja... - Deja de decirme las cosas y hazlas joder! - Por favor - suplico para al final sentir como mete otro dedo dentro de mi coño y estoy segura que si mete otro dedo podría correrme.

- Te gusta no es así - Te gusta que meta mis dedos dentro de ti y te estire - No es así? - Pregunta y dejo caer mi cabeza contra la colcha y siento como empieza a mover los dedos de forma sincrónica, adentro y afuera, gimo y levanto mi trasero, pero recibo otra nalgadas y mi coño se aprieta alrededor de los dedos de Sebasthian y gimo.

- Oh mira - A tu coño le gusta cuando te castigo y te follo al mismo tiempo - canturrea y yo niego, siento que mete otro dedo y chillo porque me estira de una forma placentera, me gusta lo que me hace sentir.

- Por Dios Sebasthian - digo y noto que deja los dedos quietos, siento que se aleja de mi sin sacar sus dedos de mi coño y siento una pequeña brisa en mi clítoris levanto la cabeza y noto que la cara de Sebasthian tiene su rostro entre mis piernas, esta soplando directamente el clítoris y eso causa un hormigueo desesperante.

- Me quiero correr - digo y siento como saca sus dedos, chillos porque el vacío que deja, intento levantarme pero me aprieta de nuevo contra la cama.

- Me torturas... - No sabes cuanto me aguante... - Cuantas ganas tenia de follarte y ya no puedo aguantar mas - dice con los dientes apretados y escucho un cierre y ropa que se mueve entonces siento el peso de su polla contra mi trasero y jadeo, abro los ojos con sorpresa, si... La polla de Sebasthian es un maldito monstruo, siento que la aleja y luego la pasa por mi coño de abajo hacia arriba, tapó mis labios con mi mano y gimo.

- Dime que necesitas mi polla como yo necesito tu coño - pide y yo asiento.

- Si - Por favor - Necesito tu polla - ahora digo y siento como la alinea con la entrada de mi coño y empieza a entrar en mi.

- Mi.... Dios - gimo y escucho una risa.

-Soy tu Dios bebe - responde y siento como se me penetra cada vez mas y mas y juro que me voy a quemar viva, pero me quemare de la mejor forma, moriría bien follada y no me importaría, gimo y siento que su polla podría tocar hasta mi vejiga.

- Dios... - Tu coño me abraza de la mejor forma - Eres mi pecado - dice y siento como su pelvis toca mi trasero y así se que entro del todo en mi, intento tragar pero es imposible, aprieto los ojos y respiro pero lo siento en todos lados en mis pulmones, en mis garganta en mi culo, Sebasthian en tóxica cada parte de mi, siento que sale lentamente y vuelve a entrar y gimo.

- Eres codiciosa - Tu coño es codicioso y les gusta mi polla gruesa - Siempre está lista para ti - No es así? - pregunta mientras sigue penetrándome una y otra vez, empieza lentamente y luego su ritmo aumenta haciendo que mis pechos se balance al ritmo de sus embestidas, pongo lo ojos en blanco y gimo fuerte.

- Oh, joder - escucho que dice Sebasthian, siento que mete una mano entre mis piernas y toca mi clítoris sin piedad haciéndome tensar.

- Vamos bebe - Correte - pide y meto mi mano entre mis piernas, quito su mano y masaje mi clítoris, siento como mis músculos se tensan hasta el dolor, como todo lo que se había estado construyendo en mi vientre estalla en mil pedazos, cierro mis ojos con fuerza y grito tan fuerte que se despertarme a media aldea.

- Mierda - gruñe Sebasthian y siento como sale de mi y se corre sobre mi espalda, ese algo que se había calentado se enfría como el maldito hielo que nos rodea, siento como por mí cuerpo pasan espasmos, mini orgasmos de lo que fue la mejor follada de toda mi vida.

Gotas de sudor caen sobre mi espalda y yo respiro, tratando de reponerme pero estaba cansada, agotada como para pelear.

- No usamos condón - Tengo que salirme - Te limpiare - susurra y yo solo alcanzo a sacudir la cabeza, no tengo palabras para decir algo, así que solo cierro los ojos y me dejó ir en un sueño profundo.

Tal vez cuando no tenga tanta mierda y pase el pos orgasmo más alucinante tenga palabras para terminar esto de una vez por todas.

SERIE LA MUÑECA DEL BRATVA - SEBASTHIAN - LIBRO 5Donde viven las historias. Descúbrelo ahora