Un par de semanas antes de la guerra.
— De acuerdo, ya está entregado el paquete de los Kang, solo ocupo tomar una foto de evidencia...— señaló el joven médico mientras jalaba la manga de su chaqueta oscura y apuntaba el pequeño aparato de su muñeca hacia la residencia a la que había entregado el paquete.
— Pedido #24356 entregado. Muchas gracias.— comentó una voz femenina realizada con Inteligencia Artificial.
Jungkook asintió como si ésta pudiera verlo y se arregló la gorra que llevaba puesta para después darse la media vuelta y dirigirse a su motocicleta donde Calico lo esperaba con otro paquete en las manos. El pequeño animal también llevaba su propia gorrita, claramente en un tamaño diminuto.
— ¿A dónde tenemos que ir ahora, Calico?— preguntó el pelinegro una vez que llegó hacia la mascotita.
— Mmm— Calico llevó su pequeña manita hacia su barbilla, pensativo.— ¡Buri buri! Buri, buri, buri, buri.— explicó señalando la siguiente calle con la cabeza.
El pelinegro solo se limitó a asentir con la cabeza.— No te entendí ni mierda pero vamos para allá, Calico.
Tal vez muchos de ustedes se preguntarán el por qué Jungkook se encontraba realizando trabajos de entrega a domicilio, bueno... la respuesta es muy sencilla: por Jimin.
La pareja estaba por cumplir un mes más desde que se volvieron novios y Jungkook quería hacer algo realmente especial, quería invitarlo al restaurant más lujoso de Busan para celebrar su amor ya que Jimin merecía estar en un lugar digno de él, no precisamente porque pertenecía a una monarquía sino también por el simple hecho de ser él, la persona que Jungkook tanto ama.
Y debido a que el bolsillo del pelinegro no se encontraba en su mejor momento, este optó por conseguir un trabajo por horas para poder ahorrar lo necesario y poder llevar a su novio a cenar.
Esa misma tarde que terminó de repartir lo requerido, Jungkook se dirigió a su casa con un Calico somnoliento entre sus brazos; estacionó la motocicleta para después bajarse y comenzar a caminar y adentrarse a su casa donde su padre lo estaba esperando sentado en la silla junto a la mesa de la cocina.
El azabache dejó a la mascota de su novio recostado en el sofá para poder unirse a su progenitor y comer los alimentos que el señor Juwon había preparado para comer, por supuesto, el mayor de los Jeon no tardó en comenzar a realizar un montón de preguntas sobre el nuevo y temporal trabajo de su hijo.
Con toda la ilusión de su corazón, Jungkook comenzó a platicar de los planes de llevar a Jimin a un lugar lujoso, por consecuente, preguntas referentes a su futuro no se hicieron esperar provocando un par de sonrisitas y risas nerviosas por parte del pelinegro.
¿Qué era lo que él quería para su futuro?
¿Hasta dónde buscaba llegar con Jimin?
Las respuestas fueron cortas y concretas.
Jungkook lo quería todo.
— Estoy tan enamorado de él, papá. Siento que... siento que somos él uno para el otro.— sonrió dejando el pedazo de sándwich de jamón que había mordido segundos antes sobre la mesa.— Y te juro que a veces creo que ya nos conocíamos desde antes... que, que ya nos habíamos amado... ¿Me explico?
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Gliese - Kookmin (+18)
FantasyEscapando de su hogar por culpa de una guerra, el príncipe Jimin y su gente llegan a un planeta completamente desconocido llamado Tierra. El pelirosa se promete a sí mismo no tener ningún tipo de relación con nadie en aquel lugar, sin embargo, el pr...