Ecos del ayer

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Narrador

Alina no podía dormir. Después de dejar a Marco en aquel café, había vagado sin rumbo por las calles de la ciudad. Las luces difusas de los faroles y el ruido lejano de los coches le daban una sensación de irrealidad, como si estuviera atrapada en un sueño del que no podía despertar.Pero no era un sueño. Todo lo que había pasado esa noche era real: Marco estaba de vuelta, y con él, todos los sentimientos que había intentado enterrar durante meses.

Cuando finalmente llegó a su apartamento, lo primero que hizo fue quitarse los zapatos y tirarse en el sofá. Miro el techo por un momento, tratando de ordenar sus pensamientos, pero solo logró recordar su mirada, su voz, la forma en que le había besado como si en mundo fuera a terminar.

Frustrada, se incorporó y camino hacia la ventana. Desde allí podía ver la ciudad extendiéndose bajo un cielo aún  cargado de nubes. La tormenta se había aflojado, pero quedaban charcos en las calles y un aire húmedo que se pegaba a la piel. Como su relación con Marco, pensó: la tormenta podía haber pasado, pero los restos del desastre seguían ahí.

Se dejó caer nuevamente en el sofá y agarró su teléfono. Había un mensaje sin leer.

Marco:  ¿Llegaste bien?

Por un instante, pensó en ignorarlo. Pero luego, como siempre, la tentación de responder fue más fuerte.

Alina: Sí . ¿Qué esperas que cambie con esto, Marco?

No tuvo que esperar mucho.Su respuesta llegó casi al instante, como si él hubiera estado esperando frente al teléfono.

Marco: No espero cambiar nada. Solo espero que lo entiendas.

Alina bufó y dejo el teléfono sobre la mesa. Quería entender, sí, pero ¿cómo podía hacerlo cuando él había pasado meses lejos, dejando un vacío que se había sentido como un agujero negro devorándolo todo? No podía negar que verlo había removido algo profundo dentro de ella, pero eso no significaba que pudiera perdonarlo.

Cerró los ojos y dejó que su mente viajara atrás, al día en que todo se rompió.

Era una tarde soleada, cálida, el tipo de día que hacía imposible imaginar que algo malo pudiera suceder. Alina había llegado al pequeño estudio donde Marco solía trabajar sus ilustraciones, emocionada por mostrarle el diseño final de la portada que habían planeado juntos para una revista.

-¡Marco! -había llamado desde la puerta. Pero el eco de su voz fue la única respuesta que recibió.

El estudio estaba vacío.Las paredes, que solían estar cubiertas de bocetos y notas, estaban desnudas. La mesa estaba despejada, y el espacio tenía un aire inquietantemente vacío. Había algo en el ambiente que la lleno de inquietud, como si pudiera oler la ausencia.

En el centro de la mesa encontró un sobre con su nombre. Lo tomó con dedos temblorosos y lo abrió. Dentro había una nota escrita con la caligrafía descuidada de Marco.

"No puedo quedarme. Lo siento, Alina. Te explicare cuando pueda. Por favor, no me busques."

Aquellas palabras habían sido un puñal. No solo porque él se había ido sin más, sino porque había destruido todo lo que ella creía entender  sobre ellos. Hasta ese momento, pensó que lo conocía, que podían enfrentarlo todo juntos. Pero Marco se había marchado. y con el, se había llevado algo de ella que nunca había recuperado del todo.

El sonido de una notificación la arrancó de sus recuerdos. Miró el teléfono: otro mensaje de Marco.

Marco: Mañana. En el parque de siempre. A las seis.

Era una invitación, pero no una simple. Era un desafío. Alina sabía que podía ignorarlo, seguir adelante con su vida y fingir que Marco no existía más. Pero también sabía que eso no era lo que haría.

Suspirando, apagó el teléfono y se tumbó en el sofá. Aun sentía el calor de su beso en los labios y el peso de sus palabras en su corazón.

"Mañana, pensó. Quizás obtendría respuestas. O quizás, como tantas veces antes, Marco la dejaría con más preguntas.

Afuera, la ciudad se iba quedando en silencio, y Alina cerró los ojos, intentando no pensar en que, pese a todo, aún quería escuchar lo que él tenía que decir.



















NO LEE MIS HISTORIAS NADIE PEROO AQUÍ OTRO CAPÍTULO CON GANASSS QUE HOY ES VIERNES BUENO SÁBADO.

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⏰ Última actualización: Nov 23 ⏰

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Entre la rabia y el amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora