Rumores (Terribles y Verdaderos) - Traducción

Capítulo 14

— Caitlyn, ahí estás —dijo Cassandra desde la puerta, con las manos entrelazadas y una ligera sonrisa que no alcanzaba a ser cálida.

Caitlyn y Mel levantaron la mirada al mismo tiempo. Se miraron por un momento antes de volver la vista a la productora, que seguía con la expresión neutra. Cassandra hizo un gesto hacia Caitlyn.

— Ven un momento —ordenó, sin esperar respuesta, y se dio la vuelta para caminar sin mirar atrás. Caitlyn, entre exasperada y algo avergonzada, saludó a Mel con un breve movimiento de la mano y empezó a seguir a Cassandra.

Ambas caminaron por el pasillo hasta llegar a unas puertas conocidas. El vestuario de Vi estaba cerrado, pero el de Jinx estaba abierto y se escuchaba el bullicio de las dos hermanas conversando dentro. Cassandra no dio tiempo a que Caitlyn preguntara nada.

— Violet —dijo Cassandra, tocando la puerta rápidamente. Jinx levantó la vista y, con un movimiento de cabeza, hizo que Vi las mirara. Vi, que estaba en su teléfono, levantó la vista con curiosidad al ver a las dos mujeres.

— ¿Podemos hablar? —preguntó Cassandra, sin más preámbulos.

Vi y Jinx intercambiaron miradas. Vi levantó la mano en señal de despedida y se levantó, metiéndose las manos en los bolsillos. Miró a Caitlyn con una mezcla de curiosidad y confusión, quien le devolvió una sonrisa algo avergonzada y negó con la cabeza.

Las tres caminaron en silencio detrás de Cassandra, subieron al ascensor y luego a la oficina de la productora. Caitlyn se sentó frente al escritorio mientras Vi se recargaba contra la pared, con los brazos cruzados y una expresión seria.

— Me imagino que ya se enteraron de lo que se dice en línea —comentó Cassandra, cerrando la puerta detrás de ellas. Caitlyn soltó una risa cargada de escepticismo.

— Son solo rumores, mamá. Una muestra más de cómo la gente distorsiona todo en internet… —

— Te pedí que vinieras aquí —la interrumpió Cassandra, clavándole una mirada que la hizo callar. Vi soltó una risita disimulada. — porque quiero hablar de cómo podemos aprovechar esto. No tenemos material promocional ni eventos importantes en los próximos meses, pero los rumores pueden ser una excelente herramienta. O al menos, podrían serlo.

— Caitlyn y yo ya hablamos de esto —dijo Vi, ajustándose los brazos y mordiendo la mejilla. Miró a Caitlyn, que también parecía algo insegura. — ¿Nos pides que mostremos buena onda en unas fotos? ¿O quieres que empecemos a salir en público para que nos saquen fotos?

— No exactamente —respondió Cassandra, cruzando los brazos y mirando a ambas con seriedad. — Lo que estoy sugiriendo es que den la impresión de estar saliendo, en público, para generar algo de interés viral.

Un tenso silencio se instaló mientras Caitlyn y Vi procesaban lo que Cassandra acababa de decir. Sus rostros se tornaron serios. Finalmente, Caitlyn fue la primera en hablar.

— ¿Quieres que… finjamos que estamos saliendo?

— Yo no salgo con nadie —interrumpió Vi, cruzándose de brazos.

— Si quieren, podemos redactar contratos, firmar acuerdos de confidencialidad para su tiempo privado y limitar lo que realmente tienen que hacer. Y, dado que esto es un proyecto promocional, podría, —dijo Cassandra, mirando a Vi— considerar esto trabajo freelance, con un pago extra.

Vi frunció el ceño, negando con la cabeza.

— No estoy buscando trabajos extra. Mi tiempo libre es mío.

— También podría argumentar que el material promocional es parte de las obligaciones contractuales —replicó Cassandra sin dudar.

Caitlyn observó cómo las dos mujeres se enfrentaban con las miradas fijas. Masticó su labio inferior mientras pensaba. Al final, se decidió a hablar.

— Creo que podría funcionar —dijo, llamando la atención de ambas. Pensó unos segundos antes de continuar. — Podemos decir que nos vemos tan seguido en el set que no sentimos la necesidad de vernos fuera del trabajo. Solo tomar unas fotos los fines de semana, en plan, diez minutos en cada casa y listo. Nadie tiene por qué saber que solo fue un par de horas. Creo que podría funcionar.

— ¿Y yo qué? No puedo estar rondando si se supone que debo ser exclusiva —Vi mordió la mejilla, claramente molesta.

— ¿Cuánto falta para las convenciones y las entrevistas? —preguntó Caitlyn, mirando a su madre. Cassandra levantó dos dedos.

— Dos meses —respondió, luego miró a Vi. — ¿Podrías esperar dos meses antes de seguir con tu costumbre de acostarte con todos los que se te crucen por el camino? Dos meses no es tanto. Es un pequeño favor para mejorar los ratings del programa y conseguirnos un contrato a largo plazo.

Vi la miró fijamente, sin decir palabra. Sus ojos recorrían entre Caitlyn y Cassandra, luego miró el suelo, golpeando sus zapatos suavemente mientras pensaba. Al final, suspiró y miró a ambas mujeres con una expresión más relajada, pero decidida.

— Está bien —dijo finalmente, con la mandíbula apretada. — Dos meses. Pero quiero todo por escrito: lo que se puede hacer y lo que no. Nada de sorpresas.

Cassandra asintió lentamente, aprobando la decisión. Vi miró a Caitlyn, esbozando una sonrisa irónica.

— Perfecto. Entonces, parece que vamos a estar saliendo, Cupcake.