Rumores (Terribles y Verdaderos) - Traducción

Capítulo 15

Caitlyn Kiramman y Vi Lane fueron vistas anoche en Top Shelf, muy cerca mientras comienzan a filmar la temporada 2. #caitviconfirmado

> ¿Yo y quién???

> Pensé que se odiaban, jajaja

> ¿Quién querría odiarme así?

> ¿Qué les pasa? Solo están cenando juntas, dejen de hacer todo sobre ser lesbianas.

> Están equivocados, están enamoradas. Además, ratio.

Caitlyn, reclinada en su bañera con el teléfono en mano, parpadeó nuevamente al ver el feed mientras desplazaba la pantalla. La tendencia había disminuido rápidamente en términos de números, pero seguía apareciendo con regularidad gracias a un pequeño grupo de fans que se mantenían vocales e insistentes. Cada etiqueta y tema relacionado con el programa era imposible de evitar, siempre acompañados de un puñado de fotos y especulaciones.

Habían pasado dos días desde que la tendencia comenzó, desde que los productores, su madre, insistieron en que, por el bien del boca a boca de la producción, debían jugar con la idea de una posible relación. Después de una larga y acalorada discusión, con cláusulas insistentes y detalles aportados por Vi, aceptaron que una confirmación oficial de relación no era necesaria. Caitlyn y Vi solo debían comportarse de manera sugestiva y dar la apariencia de una posible relación en las fotos.

Una tarea que sonaba mucho más sencilla de lo que era en la práctica.

A pesar de toda su experiencia como actriz, a Caitlyn le resultaba difícil encontrar la manera exacta de actuar para dar la impresión de que ella y Vi podrían estar saliendo, sin llegar a exagerarlo.

Agarrarse de las manos era demasiado íntimo como para mantener la ambigüedad, pero el lenguaje corporal habitual de Vi, con las manos en los bolsillos, resultaba demasiado casual y distante cuando estaban juntas. Las dos simplemente se sentaron en un sofá, una al lado de la otra, y Cassandra se burló de que parecían listas para salir corriendo en cualquier momento. La presión de intentar parecer una pareja podría llevarlas al límite, y Vi argumentó que cuanto más detalles intentaran mentir, más difícil sería.

Decidieron hacer una prueba; sin anuncios por adelantado, sin comentarios a las preguntas, solo asistir a un evento deportivo al que Jayce y Vi ya se habían comprometido a ir.

Con Jayce de mediador, ambas deberían ser capaces de relajarse un poco y sentirse lo suficientemente cómodas como para lucir, al menos un poco, como si sintieran algo por la otra que no fuera la molestia que Caitlyn experimentaba cada día.

Suspiró y colocó el teléfono en la pequeña mesa junto a la bañera, tomando un sorbo de su bebida. Se recostó un poco, apoyando la cabeza en el cojín de la bañera, y trató de relajarse lo mejor que pudo sin dejarse llevar por el estrés de los chismes en línea. Enfocaría sus esfuerzos en su carrera real, sometería su conciencia a un poco más de tiempo con Vi y terminaría con todo esto rápidamente.

Orquestar tus propios rumores no debería ser tan difícil.

— No puedo creer que no solo vayas a ir al béisbol, sino que ahora también con Kiramman.

El pequeño balón antiestrés giró en el aire antes de caer y ser atrapado de nuevo por la mano delgada de Jinx. Estaba recostada en el sofá blanco de la sala del departamento de Vi, lanzando y atrapando el balón distraídamente mientras hablaban.

Vi, de pie en la cocina, preparaba un batido de proteínas con piña y mango en la licuadora. Se encogió de hombros.

— Probablemente hará lo mismo que las otras chicas a las que he llevado a los partidos.

— ¿Beber de más y después irse contigo al baño antes de terminar con un tipo?

Vi soltó una risa burlona mientras presionaba el botón de la licuadora. El ruido del motor la envolvió por un momento en silencio antes de apagarlo.

— Eso fue en un concierto, no en un partido —respondió, sacando el vaso de la licuadora y levantando la tapa para comprobar la consistencia.

Jinx soltó una risa baja mientras continuaba lanzando el balón.

— Oh, mierda, no puedo creer que esté confundiendo a tus chicas, eso no es buena señal.

— Me refería a que probablemente pasará todo el partido en su teléfono —Vi bebió un trago de su batido, haciendo una mueca por el sabor—. Solo tenemos que tomar un par de selfies donde parezca que estamos disfrutando.

— Hazlo con ganas, que se vea que son la pareja feliz que no son.

— La pareja feliz que podríamos ser —corrigió Vi, tomando otro trago—. Como dije, solo algunos selfies. Ser sutiles.

Jinx exhaló con fuerza por la nariz y atrapó el balón con el brazo estirado. Se sentó en el sofá, torpemente estirando las piernas mientras se acomodaba, apartándose algunos cabellos que caían sobre su rostro.

— No puedo creer que realmente lo estés haciendo —se rió—. Poniéndote el cinturón de castidad para que los de la oficina consigan algunos likes.

Vi frunció el ceño mirando el vaso de su batido.

— Son solo dos meses, no es para tanto.

— Sí, claro —Jinx se recostó en el sofá, los brazos y piernas extendidos mientras lanzaba el balón con una mano—. Ponerle un contrato de confidencialidad a tu hermana para que yo tenga que aprobar cada foto que subamos no suena tan "no es para tanto".

— Eso fue idea de Caitlyn. Quería asegurarse de que lo tomaras en serio.

— Yo puedo tomar las cosas en serio —Jinx frunció el ceño.

Vi terminó su batido, soltando una pequeña risa, y se giró para tirar el vaso al fregadero.

— Te quiero, pero no puedes guardar un secreto ni por un segundo. Creo que tener el contrato para recordártelo puede ser útil.

Jinx arrugó la nariz y, sin decir nada, lanzó el balón a Vi, quien lo atrapó con destreza en el aire. Se recostó contra la barra de la cocina, lanzándolo hacia arriba y abajo con una sola mano mientras Jinx negaba con la cabeza.

— Es un poco ridículo que estén controlando tu vida 24/7 ¿para qué? ¿Un par de hashtags? —dijo, cruzando los brazos y puchereando en el sofá.

Vi se encogió de hombros, apretando el balón un par de veces.

— Caitlyn cree que es bueno para la imagen del show que la "pareja gay" sea amiga en todos lados —respondió distraída.

— Yo creo que solo quiere prensa positiva —dijo Jinx, con tono sarcástico.

Vi suspiró, inflando las mejillas mientras dejaba caer el brazo, todavía apretando el balón.

— Son dos meses, es bueno para el show, es bueno para nosotros como figuras públicas. Va a ser un poco difícil tener que moderarme y hacer las cosas a su ritmo, pero la mayoría del equipo está al tanto, así que no será tan malo. Todo va a estar bien.

Jinx resopló y rodó los ojos.

— Todo va a estar bien —repitió Vi, lanzándole el balón de nuevo a su hermana en el sofá.