-16 de noviembre del 2007
Narra Stella
Faltaban dos semanas para el regreso a clases, esto me hubiera gustado si solo me hubiera inscrito en la carrera correcta. Desde pequeña amo la astrología sobre todo las constelaciones, de pequeña creía que los muertos subían al espacio para conectarse entre sí formando una constelación que brilla más que las otras aunque ahora sabía que solo eran inventos míos, aún me gustaba creer en algunos de esos cuentos. Nací siendo mitad pez payaso pero a partir de los 10 años tomé mis "rasgos humanos", todos los habitantes nacimos con nuestros rasgos marinos de manera marcada, esto es gracias a nuestro planeta que está conformado enteramente de agua siendo nuestros Reyes que construyeron una tierra firme a base de nuestros poderes. Retornando ello que inició todo, estaba sentada en el comedor al lado de un asiento vacío, el que se supone que era de mi hermano.
—Se supone que deberías dejar de comer, estas gorda como un cerdo.— dijo mi padre con la misma mirada fría y enojada de siempre, aunque debía admitir que me dolían sus palabras solo me calle y asentí levemente dejando mi plato de un lado —Si, señor— dije sin protestar de todos modos sería inúti, aunque solo quería ponerme a llorar como una bebé gorda cuando no tiene lo que quiere. Mi madre no ayudaba simplemente se quedaba callada mirándome con esa típica cara aburrida y despreocupada. Desearía tan solo, tener una familia que me ame de verdad.Narra Juper
Últimamente todo lo relacionado a gobernar una parte del planeta se ha complicado, aunque lo eh hecho desde mis 16 años sigo sin sentirme listo, sigo sin tener a alguien que me guíe en este camino. Aún así debo mantener mi apariencia serena para mantener a mi pueblo seguro. Era la hora del desayuno, en los hogares había un dulce aroma, me gustaba ver a las familias convivir entre ellos era como si sintiera el amor de un padre o madre que no pude tener durante mi tiempo actual de vida, normalmente salía a mi balcón para poder ver desde lejos pero había unas cuantas excepciones que podía darme, como salir al pueblo y mirar más de cerca. Me volví a mi cuarto para dejar mi máscara a la vez que ponerme otro tipo de ropa y peinado, aunque no mostraba mi cara después de la guerra sin magia no podía confiarme mucho así que me ajuste la capucha tapando mi cara por encima y manteniendo los ojos cerrados salí de mi habitación para ir hacia la planta baja, al caminar podía guiarme por la sensación de mis zapatos contra el suelo del palacio, salí por la entrada del personal caminando con la cabeza gacha y una postura jorobada que mostraba una persona deprimida en vez de mi postura normal siento recta y suave al mismo tiempo para mostrar aunque sea un poco de confianza, aunque podía guiarme de mis sentidos para caminar también tenía que tener cuidado con las personas que estaban en la calle, fui haciendo pequeñas paradas mirando por las ventanas de restaurantes y hogares mirando a las familias notando aunque sea alguna pizca de felicidad en esos lugares, seguía caminando cuando sin darme cuenta choqué con una joven de aproximadamente 16 años, pelo verde pistacho o menta, me recupere rápidamente poniéndome de pie para ofrecerle mi mano a la chica que aún no se levantaba del suelo.
—Disculpa mi error, ¿Puedo hacer algo para compensarlo?— dije mientras abría los ojos levemente para ofrecerle una sonrisa —¡Oh! No tienes que disculparte, cualquiera comete errores, no tienes que compensar nada— Dijo la joven devolviendo la sonrisa para levantarse despidiéndose amablemente para seguir caminando, era normal chocarse con alguien en la calle pero no entiendo porque me sentía tan estúpido de dar la mano ¿era demasiado viejo? Solo me sacudí la ropa y entre a una pequeña cafetería para pedir un café amargo y irme a un pequeño asiento pegado en la ventana, me quede viendo la calle algo solitaria y solo empecé a recordar lo que se había hablado en la junta con los demás reyes, un hoyo negro estaba apunto de devorar a nuestro planeta, no queríamos decir nada para no asustar a nuestros pueblos pero me sentía tan mal al ocultar algo tan importante, era mi deber informarle a la gente y ahora solo estaba ocultando información.
Solo volvi mi mirada hacia la taza de café, no tenía mucho que hacer, últimamente sentía que perdía cada vez más a mis cercanos, la reina Zap se había distanciado demasiado desde que se casó, no sabía porque exactamente pero mi corazón me ardía demasiado porque simplemente me estaba dejando por alguien más, no sé si eran celos o inseguridades incluso inventos míos pero solo sabía que me dolía perderla a ella, justo a ella. De igual manera no era el más social de los reyes, realmente con los únicos que hablaba era con mi pueblo pero ni siquiera es por voluntad propia, a mis 36 años siendo un rey soltero, sin familia y sin amigos ¿que estaba mal en mi? Sabía que no podía quejarme demasiado, varios Reyes estaban sufriendo más que yo pero simplemente no puedo dejar de sentirme tan inútil en este mundo, sentirme tan dañado, a esta edad debería de tener una decencia asegurada pero lo único que tenia seguro era mi muerte. Solo me gustaría sentir como es tener una familia y alguien que te ame con toda las fuerzas de su corazón.Gracias por leer!<3
02/12/24
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Constelaciones Unidas -
FantasyUn planeta enteramente de agua es devorado por un hoyo negro, los habitantes tienen que sobrevivir de los peligros del lugar y de sí mismos