Capitulo XVIII

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Narra Felix.

Tenía la costumbre de levantarme temprano para ir a la repostería, hornear y cocinar para ese día o el siguiente. Aquel día el frío se hacía notar, así que esta vez decidí hacer algunos postres calientitos como lo que son los muffins, panqués y brownies. 

Mientras los panqués se doraban en el horno por unos minutos, me serví una taza de café caliente, aproveché para limpiar el mostrador, organizar un poco y finalmente abrir la tienda para que empiecen a llegar algunos clientes a comprar su café o algún desayuno dulce.

La campanita que se sostenía arriba de la puerta sonó por el lugar, y volteé la mirada hacia Gunil, quién mantenía una sonrisa coqueta en su rostro mientras se acercaba al mostrados con pasos despreocupados.

—Buenos días... Sr. Lee. —Su tono humorístico hizo que le devolviera la misma sonrisa. 

—Buenos días, Sr. Goo. —Respondí en el mismo tono.

—Lo de siempre, por favor. —Dijo con naturalidad, apoyándose en el mostrador.

Salté un poco, emocionado como siempre de atenderlo, y empecé a servir los brownies recién horneados en una caja. Eran los mismos que su jefe le pedía comprarme cada semana. Mi especialidad, al parecer.

—Aquí tienes. —Extendí la caja hacia él con una sonrisa, mientras él sacaba su billetera y me pagaba.

Cuando le devolví el cambio, Gunil me sorprendió al deslizar un sobre blanco hacia mí. Era elegante, con mi nombre escrito en caligrafía impecable en la parte trasera.

—¿Qué es esto? —Pregunté, mi curiosidad evidente.

—Ábrelo. —Respondió con un guiño.

Mis dedos temblaban ligeramente mientras rasgaba el sobre y sacaba el contenido. Dentro había una hoja que desdoblé con cuidado. La leí en voz baja, sintiendo cómo mi pecho se apretaba más con cada palabra.

"Seúl, Corea del Sur

Presente

Estimado Sr. Lee:

Reciba un cordial saludo de parte del equipo de Hotel's Hwang. Hemos tenido el honor de recibir excelentes recomendaciones sobre su talento en la repostería, en particular sobre sus exquisitos brownies, los cuales han dejado una impresión imborrable en quienes los han degustado.

Es por ello que nos complace invitarlo a una reunión personal con el Director General del Hotel, quien desea discutir la posibilidad de que forme parte de nuestro equipo. Valoramos enormemente la calidad y dedicación que reflejan su trabajo, cualidades que encajan con los estándares de excelencia de nuestra institución.

La cita está programada para el día 11 de Noviembre a las 2:00PM, en la oficina principal del Hotel's Hwang, Seúl. Por favor, confirme su asistencia respondiendo a este mensaje.

Sin más por el momento, quedamos atentos a su pronta respuesta."

Mis ojos recorrieron la última línea, procesando todo.

—¿Hotel's Hwang? —Susurré para mi mismo frunciendo el ceño al terminar de leer la carta. —Mierda... —Claro. Gunil trabajaba en el hotel de la familia de Hwang, donde el Director General... ¡Es Hyunjin!

Por Dios, ¿Por qué ahora? ¿Por qué el? ¿Tenía que ir? ¡No iré! ¡Definitivamente no! 

—¿Y? ¿Qué dices? —Gunil rompió mi caos mental.

—Ahh... Ehh. —¡No podía decirle que no a Gunil! —Ehh... Sí, yo iré. —Logré responder, aunque mi voz tembló ligeramente. 

Que acabas de hacer Lee Felix.

Together / HYUNLIXDonde viven las historias. Descúbrelo ahora