Good for you

Conociendo, Realidad

¿Tendré qué presentarme, no? Bueno eso pasa cuando eres el nuevo...
Mi nombre es Jonathan Sedric... y entre otras cosas, ser el nuevo es algo que define quien eres en la secundaria.
Tener 17 años, y enfrentarme al mundo donde en esta etapa te juzgan y te menos precian, es mi historia.
¿A veces no sienten que el mundo está contra suyo?, bueno yo lo siento seguido...
Estaba tan metido en esto de "que deparara mi futuro", que ahora no me interesa en absoluto. Despertarme a la mañana y que nadie esté en casa es algo relajante pero vacío en mi interior. Supongo que hoy empieza el reclusorio, ver de nuevo toda la mierda que hay y obstáculos, me hacen querer salir corriendo.
Me subí al Autobús, mire todo al mí alrededor y visualicé un asiento vacío, me senté en donde no había nadie al costado, pues como era obvio, si vienes temprano estaría solitario. Después de unos minutos se empezó a llenar de adolescente con egos altos, que en mi forma de visualizar lo que me rodea, diría que no son de mi preferencia. Nadie se sentó conmigo, era obvio, con el aspecto que tenía, a nadie le gustaría por así decirlo "sentarse con alguien que tiene una cara de mal humor."
Pero después de un momento sentí que el asiento de al lado estaba hundido, mire al piso, después empecé a ver piernas, muy lindas, por así decirlo, con unos pequeños taquitos, fui subiendo mi mirada hasta llegar a su cara, ella estaba leyendo un libro, muy concentrada. Sus facciones eran de una tez morena y algo blanca, era como un Punto medio, comparado a mi palidez. Tenía unas pestañas largas y naturales. La chica me miro de reojo, y siguió la lectura, no me percate que parecía un acosador, así volví a mirar por la ventana.
¿Porque se sentaría conmigo si tengo una mala pinta? Eso me quedaba en duda.
Me siento como un idiota por mirarla así, sin ningún escrúpulo. Pero era algo difícil no fijarse en ella y en la manera en la que no le importo cómo era mi aspecto. Pero de igual forma estaba en su libro, tal vez ni se fijó.
Después de unos minutos en ese autobús de mierda, llegamos al instituto, me baje de ultimo y al mirar al frente dije: "Este será un año largo..."

PARTE : 2

Comencé a caminar muy despacio, mirando la cantidad de personas que estaban en el campus. Unos reían, otros se abrazaban y otros se besaban. Si, como era de esperarlo, este sería un año fuerte.
Según lo que mi vieja me había escrito en una nota, tenía que ir primero a la oficina del director para que me dieran las indicaciones y todo lo que me hace un alumno de este instituto. Aburrido, eso es todo lo que tengo por decir. Al llegar a la oficina del director, la secretaria me dijo que esperara y que ya me llamaba para entrar. Así que busque un asiento, cuando de repente, vi a la chica del autobús, se acercó a la secretaria para preguntarle unas cosas. No sé qué tiene ella, pero se lleva toda mi atención. Hasta que...
-¿Por qué no dejas de mirarme? ¿Tengo monos en la cara, o qué?- dice la chica, arrugando sus cejas.
Wow, todo iba bien, ¿ahora que le digo? "No pues, solo te miraba porque estas re buena" ósea no. ¿Qué hago?
-¿Qué? ¿no hablas? Ash...- dice ella y se da la vuelta
-¿Qué te hace pensar que te estaba mirando? ¿No eres nadie importante y si lo fueras de todas formas me daría igual?- dice Jonathan, riendo
-Eres un .....un..-dice ella con cara de enfado.
-Señor Sedric, ya puede pasar- interrumpe la secretaria
-bueno fue un gusto....por cierto me llamo Jonathan- dice riendo y guiñando un ojo.
Al entrar a la oficina no me fije que cara puso la chica, pero sé que estaría tan enojada como para golpearme Hahahah. Mire el despacho del director, estaba lleno de trofeos, diplomas y muchos libros, tan común como cualquier oficina.
-Señor Sedric, bienvenido al instituto, es un placer tenerlo en nuestras instalaciones, mi nombre es Eliseo Guzman. Tome asiento, creo que nos llevara solo unos minutos explicarle un par de cosas.- dice mirando un portafolio.
....
Si solo unos minutos *sarcasmo* ya han pasado 1 hora y media, nada que termina de decirme donde es mi salón y cuáles son las reglas del instituto.
No sé ni lo primero que me ha dicho, ¿Qué no se da cuenta que odio la secundaria?
Luego de unos minutos más, salimos de la oficina hacia mi nuevo salón. Al llegar entró el de primero para llamar a mi nueva maestra de sociales, ella paro de dar su clase para que el señor Guzman me presentara. Como si fuera poco, tenía que presentarme, ¿Qué hice mal ,Dios?