NARRA SARA
Me encuentro en el aeropuerto de Ezeiza, pasando por el control de seguridad. Ha pasado un año desde que me fui y volví a Argentina, pero ahora estoy por regresar, no por Joe ni por Nick, sino por Kevin y Danielle. Voy a visitarlos, para ponerme al día sobre todo lo que ha pasado este año. Ellos necesitan saber qué ocurrió.
Nick volvió con Priyanka, algo que no me sorprende, la verdad. La verdad es que siempre supe que no podía competir con ella, aunque me duele aceptarlo. Joe, por su parte, lanzó una nueva canción, Ela Taubert, una cantante colombiana. De hecho, esta canción es un remix. Desde que salió, no paro de escucharla, siento que esa canción representa todo lo que me pasó con Nick. Me ha acompañado en mis momentos de confusión y soledad. Cambiando de tema, hasta donde sé, Joe no está saliendo con nadie, aunque hay rumores de que está con Ela. Pero ella tiene novio, así que no me hago ilusiones. En cuanto a mi vida, he estado con mi familia y terminé mis estudios. No tengo novio, aunque conocí a algunas personas, pero ninguna de ellas ha sido lo suficientemente especial para sentar cabeza.
—¿Hija, estás lista? —me preguntó mi mamá mientras nos dirigíamos hacia la puerta de embarque. Por cierto, ellos vienen conmigo a visitar a Kevin.
—Sí, tengo todo —le dije, sonriéndole.
—No me refiero a eso, Sarita. Me refiero a si estás lista para volver a verlos a ellos —dijo, acariciándome el hombro. De inmediato, la sonrisa se me borró. Sabía a qué se refería.
—Mamá, no sé... pasó un año y sigo pensando en ellos, pero tenemos que seguir adelante con nuestras vidas, como lo hizo Nick y como Joe lo está haciendo con su música —respondí, con la voz un poco quebrada. No quería pensar en ellos en ese momento, pero era inevitable. Mi corazón aún seguía dividido.
Mi mamá me sonrió apenada. Ella fue mi mayor apoyo en todo este tiempo. No sé qué habría hecho sin ella. Siempre estuvo ahí, ayudándome a mantener la cabeza firme, a pesar de la tormenta interna que sentía.
—Bueno, hija, vas a ver que vas a encontrar tu camino también, tu felicidad, y nosotros te vamos a apoyar pase lo que pase —dijo, abrazándome con fuerza. Fue un abrazo reconfortante, pero también triste. Algo en mi corazón me decía que aún no había cerrado esa parte de mi vida.
—Hay que tomar el avión —dijo mi papá, llegando donde estábamos con mi hermano. Nos subimos al avión y partimos hacia Los Ángeles. A medida que el avión ascendía, sentí una mezcla de emociones. Aunque mi cabeza me decía que debía seguir adelante, mi corazón aún estaba atado a todo lo que había dejado atrás.
El avión tocó tierra en Los Ángeles, y aunque mi cuerpo estaba físicamente allí, mi mente seguía en otro lugar. Las semanas previas al viaje se habían convertido en una montaña rusa de emociones, pero lo que me esperaba en esta ciudad era algo que ni yo misma podía prever.
-Ma, voy a ir a ver a Kevin y Dani- dije para saludarlos y tomar un taxi.
Cuando llegue a la casa de Kevin, me sentí una mezcla de nostalgia y alivio. El ambiente cálido y relajado me hizo sentir en casa, pero también sabía que algo importante debía suceder.
Kevin abrió la puerta con una gran sonrisa, pero algo en sus ojos denotaba que no estaba tan tranquilo como quería aparentar.
—¡Sara! —gritó al verme, abriendo los brazos para darme un abrazo—. ¡Cuánto te hemos extrañado!
Danielle apareció a su lado, su rostro suavizado por una sonrisa genuina.
—Sara, qué bueno verte de nuevo —dijo, abrazándome también. Sentí su apoyo en ese gesto, como si supiera todo lo que había estado cargando en mi corazón.
Me senté en el sofá mientras Kevin y Danielle se acomodaban a mi alrededor, con la casa perfectamente decorada para recibirnos. El ambiente era acogedor, pero también había una cierta tensión en el aire, como si todos estuviéramos esperando que yo dijera algo, algo que rompiera el hielo.
—Bueno, cuéntanos, ¿cómo te ha ido? —preguntó Danielle, con una mirada cálida.
Yo tomé un respiro profundo, buscando las palabras correctas. No podía simplemente dejar que el tiempo pasara sin hablar de todo lo que había estado guardando para mí misma. No con ellos.
—He estado bien, la verdad. Pasaron tantas cosas que no sé por dónde empezar. La vida en Buenos Aires me parecía tan distinta a la que viví aquí, pero algo en mi interior me decía que necesitaba volver a verlos a ustedes. —Pausa. —¿Sabían que Nick volvió con Priyanka?
Ambos asintieron, sin sorpresa. Danielle tomó mi mano, y Kevin se recostó un poco más hacia adelante, como si quisiera que siguiera.
—Sí, lo supimos. Nick nos lo contó hace un tiempo. Y te juro que fue un alivio para él poder aclarar las cosas, aunque entiendo que para ti no fue fácil.
Me dolía escuchar eso, pero también sentía que era hora de sacar esa espina.
—No fue fácil. —Suspiré. —Nunca fue fácil, pero estoy intentando seguir adelante. Es difícil, pero no quiero seguir aferrándome a lo que fue.
Danielle asintió, mirando a Kevin como si estuvieran de acuerdo en algo que no necesitaba ser dicho en voz alta.
—Lo sé, Sara. Y entiendo lo que sientes. No es fácil soltar, especialmente cuando se ha sido parte de algo que parece perfecto —dijo Danielle, con una suavidad que me calmó por un momento.
Kevin se inclinó hacia mí, su rostro serio pero lleno de empatía.
—Lo importante es que estás aquí. Este es el primer paso, y quiero que sepas que siempre serás parte de esta familia. Siempre estaremos aquí para ti, pase lo que pase.
Las palabras de Kevin fueron un bálsamo para mi alma, pero también sabía que había algo que debía abordar antes de sentirme completamente en paz.
—¿Y ustedes? —les pregunté, mientras un nudo se formaba en mi garganta. —¿Cómo están? ¿Cómo va la vida después de todo?
Danielle me sonrió con sinceridad.
—Creo que finalmente hemos encontrado nuestra paz. Kevin y yo hemos hablado mucho sobre eso. La vida nos ha enseñado lecciones difíciles, pero también nos ha dado lo que necesitábamos.
Kevin asintió, su rostro suavizándose mientras miraba a Danielle con una mirada llena de cariño.
—Y siempre hemos tenido algo claro: la familia es lo primero. No importa lo que pase, siempre nos apoyaremos mutuamente.
Esas palabras, las mismas que siempre había deseado escuchar, me hicieron sentir una calidez que no esperaba. Quizá no todas las respuestas estaban claras aún, pero estaba en el lugar adecuado. Con ellos, sentía que por fin podría empezar a sanar
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El dia que enamore a mi idolo
FanfictionEsta es una historia pedida por ustedes con Joe Jonas, es basadan a partir del primer concierto en el movistar arena y va a ser continuada desde ahi, en tik tok van a tener contenido con adelantos y toda la info