Un pequeño niño se escondía detrás de una bardo y otro pequeño detrás de un instructor.
El de pelo negro extendio su mano al de ojos morados, -. Hola, Soy venti, soy vocalista y tú? .- El índigo lo miro con desconfianza pero correspondip el apretón de manos.
-. Soy scaramuche y soy un guitarrista .-
Desde ese pequeño encuentro los dos niños empezaron a convivir muy seguido, hablaban de sus intereses musicales o de otras cosas en las que sorprendentemente coincidían, aún por fuera fueran bastante diferente, los dos compartian los mismos gustos y intereses.
Edad: 14
E
l de pelo negro se encontraba a punto de subir las escaleras hacia la puerta de la habitación de su amigo, en el profundo silencio pudo escuchar algunos sollozos Y lamentos desde la habitación del índigo.
En un ataque de curiosidad y preocupación abrió la puerta con toda su fuerza para poder ver que su amigo se encontrará bien.
Al entrar miro vendas tirados por el suelo, unas cuantas cuchillas de sacapuntas y algunos botes de pastillas tiradas, en la cama se encontraba en joven índigo con los brazos desangrados y lágrimas en los ojos.
-. Scarita... .-
Se sento en la cama en dónde se encontraba reposando su amigo.
-. Vete! No quiero ver a nadie! .-
El de puntas azules lo abrazo aun sin importarle que su ropa se manchara de la sangre de su amigo.
-. ¿Quieres hablar? .-
El índigo empezó a llorar mas fuerte y desconsoladamente mientras abraza a venti.
-. Venti... Me odio, odio a todos.-
El más bajito acaricio con delicadeza y cuidando a quien en ese momento ma solo necesitaba.
-. ¿Lo volvió a hacer? .- scara asintió mientras seguía abrazando a su mejor amigo.
-. Venti... Eres la única persona con la que puedo estar cómodo, eres a quien más quiero, por favor no me dejes .- pronunció antes de quedarse dormido junto a su amigo.
Esa tarde paso tranquila, cuando scara se despertaba venti lo tranquilizaba y lo acariciaba.
Scara no hace mucho tuvo una ruptura y venti sabía lo mucho que le afectaba a su amigo, cuando eso pasaba scaramuche se sentía insuficiente, por más inteligente que fuera el siempre tenía defectos a los ojos de el mismo, venti era un alama relajada y lista para escuchar a su amigo cuando esté se encontraba en sus peores momentos.
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