Between the lines that I don't see

Entre risas y secretos 1/2

En un restaurante de hamburguesas, Gala, Krista y Emmanuel compartían una comida. Gala, con su clásica chaqueta de cuero negro y jeans desgastados, comía papas fritas en silencio mientras Krista devoraba una hamburguesa doble y Emmanuel revisaba algo en su celular.

De repente, una chica se acercó con una sonrisa nerviosa.
"Hey, solo quería decirte que tienes un estilo increíble. Me gusta cómo te queda el negro."

Gala la miró con una expresión neutral. "Gracias, es cómodo."

La chica titubeó. "¿Y siempre andas sola? O... bueno, ¿te gustaría salir algún día?"

"¿Salir?" Gala ladeó la cabeza, confundida. "No estoy sola. Estoy con ellos." Señaló a Krista y Emmanuel.

Krista soltó una carcajada contenida, mientras Emmanuel observaba la escena con diversión.
La chica intentó aclarar. "No, me refiero a... contigo. Tú y yo. Como una cita."

Gala parpadeó. "¿Tú y yo? ¿Para qué? ¿Quieres que te lleve a algún lado en mi moto?"

La chica rió incómoda y retrocedió. "No, olvídalo. Era solo una idea."

Cuando la chica volvió a su mesa, Krista no pudo contenerse más y estalló en carcajadas. Emmanuel negó con la cabeza mientras tomaba un sorbo de su refresco.
"¡Hermana! Eso era coqueteo descarado," dijo Krista, entre risas.

"¿Por qué no lo dijo directamente? Si quería algo, ¿por qué no lo explicó?"

Emmanuel sonrió. "No todo el mundo es directo, Gala. Era evidente que le gustabas. Estaba tratando de invitarte a salir."

"Pero no me conoce," insistió Gala, confundida.

Krista rodó los ojos, divertida. "No tiene que conocerte para sentir atracción. Por Dios, estás tan perdida. Necesitamos un curso intensivo para que aprendas a captar estas cosas."

Emmanuel rio mientras Gala simplemente volvía a comer sus papas, indiferente al asunto.

En la sala de estar de Fernando, un espacio elegante y acogedor, Karime, Fernando y Marie Claire estaban sentados en sofás de cuero beige. Había una botella de vino abierta sobre la mesa, y la conversación fluía con normalidad.

Karime, con un impecable vestido blanco, observaba a Marie Claire, quien parecía ausente, girando su copa de vino.
"¿Qué pasa contigo? Normalmente no paras de hablar," comentó Fernando, divertido.

Marie Claire sonrió débilmente. "No es nada. Solo estaba pensando en alguien."

Karime arqueó una ceja. "¿Alguien? Esto ya suena interesante. ¿Quién es?"

Marie Claire se encogió de hombros, sin querer dar muchos detalles. "Solo alguien diferente. Es fría, pero tiene algo que me atrae. No sé explicarlo."

Fernando soltó una carcajada. "¿Fría? Eso no suena a tu tipo. ¿Desde cuándo te gusta alguien tan distante?"

Marie Claire se rio suavemente. "Quizá sea justamente eso. No sé, tiene un estilo único. Como si no se diera cuenta de lo hermosa que es."

Karime, intrigada, cruzó las piernas. "¿Y cómo no nos la has presentado todavía? Esto suena a que necesitas ayuda."

Marie Claire se sonrojó levemente. "No estoy lista para presentarla. Además, no sé si siquiera sabe que existo."

Fernando y Karime intercambiaron miradas de complicidad mientras Marie Claire cambiaba rápidamente de tema. Aunque intentaban obtener más detalles, Marie Claire mantenía su secreto, disfrutando del pequeño misterio que guardaba solo para ella.