Capitulo 1

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En la calle de Gotham siempre ha habido una pregunta bastante curiosa, es la ciudad con más criminalidad del mundo... así que siempre se han preguntado:

¿Una persona puede ser perdonada por sus pecados? ¿Por matar a cientos? ¿Tal vez miles? ¿O debería pagar por sus pecados con sangre?

Gotham/6/nov/9:56

La lluvia caía esa noche en Gotham, golpeando el suelo con fuerza. Caía al suelo la lluvia mientras Jason saltaba por los edificios de Gotham. Llendo al único lugar al que por fin podría expiar sus pecados, o al menos dejarlos atras.

Mientras saltaba la lluvia caía sobre su cabello, el tenía la vista en un objetivo específico, un edificio en llamas, un edificio en llamas que sabía que no se había quemado por casualidad, de este edificio salía humo a montones y las ventanas rebozaban de fuego saliendo de ellas, era un mismísimo infierno para los que estuvieran adentro, aunque conociendo a quien provoco el incendio, para el era diversión pura.

Apenas llegue al edifico del incendio me pare al frente de el edificio, esperando a que salga quien estaba esperando. Ese edificio era más grande de lo que se veía de lejos, 16 pisos llenos de llamas y muchas personas seguramente quemándose y muriéndose adentro, sin duda una obra maestra para el.

—Cuando será que vas a salir, Luciérnaga —Aunque Mi padre había logrado atraparlo hace una semana, había escapado de prisión fácilmente, parece que lo único que tuvo que hacer es matar a el jefe de los bomberos para que tuvieran que pasarlo a otra celda, pero antes de que se lo llevaran a esa celda logro soltarse de los policías para agarrar su traje de fuego y escapar quemando la estación de policía, asesinando a miles de policías y reclusos y dejando escapar a los prisioneros que no tuvo tiempo de matar.

—Sin duda te volviste loco... las quemaduras sin duda destrozan el cerebro

Enseguida al decir eso salió Luciérnaga del fuego, su traje tenía unas actualizaciones raras con las que podía ir más rápido, unas alas amarillas bastante extravagantes a mi gusto y un lanzallamas más grande y mas potente... esa arma si que llamaba la atención...

pero no fue difícil atraer su atención,.Ver a un enmascarado enfrente tuyo o más exactamente abajo tuyo no es muy difícil

—¿Quien eres un Batman rojo? —Me dijo Luciérnaga con un filtro de voz un poco raro con el que ridículamente parecía que su voz fuera más aguda que una luciérnaga

—Vamos Garfield, no necesitas ser tan formal —Lo que Luciérnaga no esperaba es que yo ya sabia toda la información de el, no era muy difícil saberlo después de ser el ayudante del dichoso caballero de la noche

—Seamos directos, tú eres de la legión del mal y yo quiero hablar con tu jefe —Le dije a Luciérnaga mientras preparaba mi batarang mejorado por mi y convertido en un redrang

Sin decir una sola palabra Luciérnaga intento huir, a lo que le lanzó un batarang al propulsor de sus alas y se calló en medio de la carretera con la lluvia cayendo en su casco y su lanzallamas terminó yéndose a volar al otro lado de la calle

—Okey idiota de la pirotecnia. Te daré dos opciones, me llevas con tu jefe o te vuelo esa maldita cabeza —có una pistola y me acerco a el que aún está tirado en el suelo y con mi pierna apretó su pecho contra el suelo para que no se pueda mover

—E-esta bien, te llevaré a donde Lex, solo no dispares—Me dijo mientras intentaba quitar mi pierna de su pecho con sus brazos

—¿Tan fácil es persuadir a un tipo tan fuerte como tú? Bah, los rumores son todos mentiras —suelto su pecho y lo agarro del cuello para levantarlo lanzarlo a una pared cercana

Enseguida me acerqué a él y hice que apuntara exactamente la dirección de donde estaba Lex en ese momento en un mapa, sin dudarlo dos veces lo hizo y para darle lar gracias por el gran favor que me hizo con el arma que tenía en la mano le explote la jodida cabeza

—Dije que iba a destruir mis demonios, ¿pero ese tipo? Tenía más demonios que yo, le hice un favor al mundo

Ahora que tenía la dirección donde estaba Lex tenía que ir allá, era el momento perfecto para ir por el, ya que estaba en Gotham por primera vez en años... supongo que la muerte de mi padre hizo famosa la ciudad, sea como sea debo ir por el.

—Está a media hora caminando, pero si voy por encima de los edificios duraré menos

Después de durar un tiempo saltando sobre edificios llegue

—nunca supe que Lex tenía un edificio en Gotham, eso es algo nuevo... sin duda no van a dejar que entre sin oponer resistencia, pero si entro desde el piso de Lex directamente... —decidí entrar sigilosamente a el piso de Lex... o no tan sigilosamente más bien

Me tire hacia el piso donde estaba la puerta del cuarto de Lex, como era obvio estaba protegida por varios guardias pero ninguno armado ni muy grande, parece que sin Batman se están empezando a confiar ¿eh?

—Bueno les dejare elegir, ¿quieren que esto sea rápido o los acabo ahora? —parece que ese comentario no les gusto mucho a los guardias que sin pensárselo dos veces se lanzaron a atacarme, parecían marionetas atacando sin decir una sola palabra

—Supongo que tendré que divertirme un poco —saque mis pistolas de mi cinturón y empecé a machacar a cada uno de ellos

Eran solo 4, ninguno destacaba por su físico pero no me tenía que confiar por que puede que sepan pelear, aunque no fue muy difícil acabar con los primeros dos con unos simples disparos en el pecho

—¿No van a oponer más resistencia? Vamos es el magnate mas grande actualmente

Los otros dos lo único que hicieron fue cagarse en los pantalones y cuando los hiba a atacar se fueron corriendo por las escaleras

—Actualmente nadie quiere divertirse con Todd ¿no?

Entre bruscamente a la habitación pateando la puerta y esperando que Lex tuviera algo bajo la manga, tal vez más guardias o algo... pero lo único que vi fue a Lex mirando la ventana, apenas entrar empezó a hablarme como si fuera su mejor amigo, aún inmóvil en la ventana

—Oh ya llegaste Jason, esperaba que vinieras... lo esperaba con ansias... —Me dijo sin mover la cabeza de la ventana, yo no dejaba de apuntarlo con ambas armas a la cabeza, por si acaso hacía un movimiento en falso

—Ay vamos Jason, ¿para que quisieras dispararme? Tú y yo sabemos que quieres algo, ya dímelo —en ese momento despegó su cara de el reflejo de la ventana para verme a mi mismo con sus ojos, unos ojos que no recordaba tan penetrantes, sentía como su mirada estaba en mi, pero yo también estaba en el

—Quiero un equipo, quiero que busques a Harley Queen y a Slade Wilson, necesito salir de la ciudad pero antes voy a hacer mi último pecado, y va a ser en grupo...

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Eso es todo por hoy, si les gusto le agradecería un voto y que me digan en la cajita de comentarios si les gusto el capítulo

Sombras de Redención: La Odisea del Caballero de ArkhamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora