A Weird Love ♡ Un extraño amor

5 ~ EXPRESO DE HOGWARTS

EXPRESO DE HOGWARTS

POV George
La noche transcurrió rápido, más de lo que hubiera deseado porque sería la última noche -por un largo tiempo- en que Alex dormiriá en la misma habitación ¿por qué tienen que separar a las chicas de los chicos en los dormitorios? Antes no me molestaba pero antes no conocía a mi ángel, al amor de mi vida.

Me estiré y moví a mi hermano con el cuidado de no despertar a Alex.

— Freddie despierta.

— No Georgie, ahora no — respondió somnoliento.

— Si, ahora si. Ya levántate.

— Pero aún nos queda tiempo, no entiendo... —bostezó— porque.

— Pues no podemos cambiarnos enfrente de... —bostezé— ella.

Nos cambiamos rápido y Alex no tardó en despertar, dejamos que se cambiará para después bajar a desayunar, no sin antes felicitar a Ron por haber vuelto a enfadar a Percy.

Mamá hablaba con Ginny y Hermione sobre un filtro amoroso justo cuando Alex se sentaba, acto seguido me sente a su izquierda y Fred a la derecha.

— ¿Lista para ir a Hogwarts? —pregunto mi gemelo.

— Si aunque estoy nerviosa.

— No te preocupes, nosotros siempre estaremos a tu lado —le aseguré.

Terminado el desayuno subimos a uno de los coches proporcionados por el Ministerio, durante el viaje a King's Cross Fred y yo le hablamos de como era Hogwarts e inclusive mencionamos el quidditch que le fascinó con solo escuchar de que iba la cosa. Al llegar descargamos los baúles y nos dirigimos al espacio entre el andén 9 y 10, cuando papá y Harry cruzaron Alex abrió la boca por la sorpresa.

— Para llegar al andén 9 y 3/4 debemos hacerlo —explicó Fred y Alex se relajo.

Repetimos la acción de los demás y pronto estuvimos en el andén donde nos encontramos a Lee con una venda en la nariz.

— El expreso de Hogwarts, a que es sensacional ¿verdad Alex? —habló Lee al tiempo que llegaba a nuestro lado.

— ¡Sensacional! —exclamó ella y después dirigió su mirada a la nariz de Lee — Por Merlin, ¿aún te duele?

— ¿Qué? ¡Oh! ¿Te refieres a la nariz? —preguntó dejando de ver el tren. Alex rectificó con un movimiento de cabeza— No, ya no me duele aunque tuve que ir al hospital porque se me desvío el tabique y ahora tengo que usar esta venda. Debo decir que admiro tu fuerza.

— Deberías ir a la enfermería en cuanto lleguemos, así te libraras de la venda más pronto —sugirió Fred y el asintió.

—  Y tal vez ahora seas menos feo —dije y tanto Fred como Alex se rieron (podría jurar que su risa es la más hermosa que he oído).

Mamá nos dio bocadillos para el camino y una vez que nos despedimos subimos al tren, entramos a un compartimento vacío y Fred se sentó al lado de Alex, Lee y yo nos sentamos frente a ellos.

POV Fred
Cuando Alex nos estaba contando lo que escuchó decir a nuestros padres el tren se detuvó repentinamente. Un frío intenso se hizo presente.

— ¿Son... dementores? —preguntó Lee viendo hacia el pasillo.

Apenas terminó de formular la pregunta cuando Draco Malfoy entró, corriendo, a nuestro compartimento. Draco temblaba, era tanto su miedo que no se molesto en insultarnos, debía admitir que sentía helar mi sangre y sin pensarlo tome la mano de Alex, que abrió ligeramente su boca sin dejar de lado su expresión de angustia -seguramente por los dementores-. Cuando ya no había señal alguna de los dementores Draco se reincorporó, limpiandosé el sudor de la frente -resultado del miedo que tenía-.