Charlie
El camino hacia mi habitación sería sencillo si no estuviéramos tropezando con cada objeto que hay por el medio.
Nuestros labios no se despegan, se besan y se devoran hambrientos uno del otro, mis manos recorren su cuerpo por encima de la ropa.
Quito botón por botón desesperado por poner mi boca en su pecho, sus perfectos abdominales, una vez que está fuera del camino, mis labios inician su camino de besos húmedos por su piel.
Choca con la puerta de mi habitación, espero que nadie esté en este momento en la casa porque sus gemidos pueden despertar a quien sea, quiero sacarle más de esos ricos sonidos.
― ¿Que más puedes hacer con esa boca?. ― su voz agitada completamente excitada me hace poner mis ojos en el, mientras sigo bajando mis besos por su cuerpo.― Cielos santo.
― Puedo hacerte muchas cosas con ella. ― humedezco mis labios de una forma muy provocativa, Nick se muerde los suyos con una sonrisa en el medio.― ¿Quieres probar?.
― Sí, sí quiero, pero ven aquí primero. Necesito besarte otra vez.
Su boca impacta con la mía, entramos cómo podemos al cuarto, la ropa se va al suelo, sus manos me manosean a su gusto, deja de besarme para irse a mi cuello.
Ruedo mis caderas y ese roce de nuestras pollas goteando nos arranca graves jadeos antes de caer en el colchón.
― ¿Tienes condones? ― pregunté sin despegar mis labios de su boca.
Se aleja solo para buscar en el bolsillo de su pantalón, un pequeño tubo de lubricante con una tira de condones.
Una de mis cejas se sube con una sonrisa traviesa al ver ese pequeño detalle.
― Me lo dió Scott, no preguntes.
Lo tomé por la nuca acercándolo a mi otra vez, seguimos besándonos y acariciándonos mientras sentimos como se deslizan su polla sobre la mía, abro la boca en medio del beso dejando que mis gemidos salgan con fuerza.
― Ah, dame más, Nick.―
Mete una mano entre nuestros cuerpos deslizando un dedo por mi pliegue, atrapa mi boca en otro beso, mete mi labio inferior en sus dientes.
Me hace desearlo más.
― ¿Quieres que mi dedo este dentro de ti? Maldición, quiero tenerte Charlie.
Las palmas de mis manos se apoderan de sus nalgas, firmes y suaves, gime en mi boca cuando las aprieto.
Apoyo los codos en la cama y me acerco a su oído mordiendo el lóbulo de su oreja.― No quiero uno, quiero que tus dedos esten dentro de mi, por favor.
Vuelvo a gemir cuando siento que me acaricia la entrada suavemente, ahora su lengua se pasea por mi oreja, besando y mordiendo.
Siento la presión de su dedo está dentro de mi, lo deja quieto unos segundos, me besa de nuevo, con calma, y con algo parecido al amor.
― Respira mi amor, ¿Estás bien?.
Asentí correspondiendo su beso, empieza a moverlo despacio, se asegura que me acostumbre, esa extraña sensación que no es la primera vez que la siento pero con el, joder.
Todo lo que se refiere a Nick es diferente, cálido, perfecto.
Sonríe y mi cuerpo cae de nuevo a la cama sometido a sus movimientos, acelera cuando le pido que quiero más. Mas de él, que me consuma con todo su ser.
Un segundo dedo entra en acción, siguiendo el ritmo, rápido pero sin lastimarme, mi polla roza con su abdomen cuando empieza a besarme el pecho o juguetear con su lengua en los pezones.

ESTÁS LEYENDO
Sin Querer Dejé De Odiarte [NICK & CHARLIE]
RomanceNick y Charlie son diferentes en esta historia, dos chicos que desde el primer día que sus vidas se cruzaron, no pudieron llevarse bien. Dos personalidades diferentes chocan desatando una ola de peleas, odio y miradas asesinas cada vez que se cruzan...