Noche

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(25 de Mayo)
Esta maldita cosa. El computador... Demonios. Había escrito toda mi aventura hasta aquí. Había detallado una y otra cosa de las personas a las cuales me encontré. Habían más de 10 000 palabras ahí. Mis ubicaciones recientes y actuales para que cualquier persona, quien sea, las hubiese visto. Pero no. Se tuvo que estropear todo. No pude transmitir la información a la nube. La red del sistema se cayó cuando estaba a punto de hacerlo. Pensé que podríamos pedir ayuda. Pensé que podría escapar de esto pero todo se fue a la mierda...

Pero... hay que moverse. No puede ser mi final aquí. No moriré hoy. Saldré de esto. Se los intentaré resumir. Lo más que pueda. No quiero volver a explicar todo. Todo por culpa del mal sistema de este lugar.
Apenas pudimos escapar del edificio administrativo, no había rastros de los hombres de Andrew, y tampoco había nada que nos ayudase a escapar. El Husky estaba asustado por las bestias, yo estaba sudando gotas heladas, corrí despavorido. Casi me agarran más de una vez. Ese centro era demasiado peligroso. Empezaba a anochecer. Yo seguía afuera escapando.
Encontramos (encontré, el perro no hacía nada más que asustarse, pero en esa situación, era totalmente aceptable) un pequeño escondite detrás de un gran camión de mudanzas. Allí había algunos infectados débiles en el suelo, solté por un momento al husky y maté a esos cabrones. Había una tienda al lado del lugar, pero estaba llena de esas criaturas adentro. El vidrio estaba a punto de ceder. No era un buen sitio para seguir ahí.

Cogí la canasta del perro y me dispuse a ganar fuerzas para seguir moviéndome, algunos infectados salían de un lugar, otros se levantaban del piso. Se estaba creciendo la horda de muertos. Seguí moviéndome ahora hacia el Norte, tenía que salir de esa zona en cuanto antes. Miré mi reloj, eran las 15:37 horas. Faltaba una hora y pico para que anocheciera.

Seguí corriendo, pero ya estaba cansado, pude avistar un pequeño puente lleno de carros estropeados, quizás si llegaba hasta el techo de uno de ellos podría tener una mejor vista de la zona. Me dispuse a llegar. Volví a armarme con un cuchillo ensangrentado, y empecé a medio escalar entre los autos. Aparecieron varios infectados, los maté con el cuchillo, había un bus de Somusa volteado. Me subí sobre él, pero cometí el error de no revisar su interior. Unas 15 manos o no sé cuantas aparecieron rompiendo los vidrios y me agarraron los pies. Del susto y el cansancio solté la canasta del perro que cayó sobre una camioneta al otro lado del puente. Los infectados estuvieron a punto de hacerme pedazos, por suerte caí sobre la parte de metal del bus. Estaban divididas en varias partes las ventanas, no había caído encima de una. Quisieron volver a agarrarme los pies pero me paré firme y vi algo que no había podido ver antes. Había un gran hueco entre las 2 partes del puente. Debajo había una gran cantidad de infectados esperando que alguien cayera allí. No podía cruzar esa zona. Debía saltar hacia el otro lado. No era tan alto.

Iba a tomar un respiro, quizás un impulso pero justo cuando iba asaltar un infectado rompió uno de los vidrios y me alcanzó a medio agarrar la pierna derecha, perdí el equilibrio y salté mal. Caí sobre una camioneta y me pegué fuertemente en la cabeza. Me quedé inmóvil. Mi vista se estaba oscureciendo. Podía sentir los gruñidos de las bestias saliendo del bus. Sentía que estaba perdiendo. Quedé inconsciente.

(Se rompen los vidrios)
Mierda! Tendré que seguirles contando lo que pasó en otro momento. Se acercan infectados. Corto y fuera.

La última oportunidad (The Last Stand)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora