Hoy no me siento muy bien ¿Sabes? Siento como que el corazón se me desgarra, el estómago me arde, la garganta me pesa, los ojos duelen y respirar arde. No, no me he sentido bien, ¿Y como quieres que lo esté cuando siento que no me amas? Ya no es como siempre. ¿Recuerdas que hablábamos durante horas sobre cómo nos había ido en el día, recuerdas acaso que me hablabas sobre aquella chica? Sobre tu princesa... Sé que te gusta dormir, ¿Pero recuerdas que te desvelabas con ella hasta la madrugada? Por que claro, tu amor hacia ella es inmenso y por tenerla feliz harías todo lo que puedas. Te imagino respondiéndole sus mensajes en milésimas de segundo, pienso en las veces que dijiste que jamás amarías a nadie más; y me veo ahí, como algo más, como un ente sin importancia, como algo en que ocupar tu tiempo para no pensar en la Princesa.
No eres de los que lloran, pero recuerdo que por amor a ella lloraste en la noche lamentado que tu amor no fuera correspondido ¿Recuerdas? La Princesa tenía a alguien más y tú seguías en la ventana viendo la luna con agua cristalina en los ojos, mientras que yo- siendo aún tu amiga- te consolaba.
Pero no importa, aunque me duela el corazón, lo entiendo. Aún le prefieres, todavía le dedicas tus noches, tus pensamientos, el tiempo... La vida. No importa; una se va acostumbrando al rechazo, a la soledad, a amar a alguien y que éste no te tenga en cuenta.
La envidio; ella te tiene, yo no.
Ojalá algún día me quieras.
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He decidido escribirte.
Teen FictionYo había decidido no creer más en el amor, pero era tarde, su sonrisa ya me había enamorado.
