Korra x Asami

Bajo la misma aurora 

Bajo la misma aurora.

El cielo estaba pintado de un gris claro, el aire aunque frío era soportable a bordo del pequeño barco que se movía rumbo al polo sur, Korra se encontraba apoyada en la barandilla cubierta de un grueso abrigo observando las ondas que se dibujaban en las aguas heladas, centros su mirada al horizonte donde podía percibir los primeros bloques de hielo señal de qué estaba apunto de llegar a la tribu Agua del sur, se encontraba intranquila ya que era la primera vez en bastante tiempo que regresaba a su hogar y no lo hacía sola ya que ahora estaba acompañada de la mujer de la que estaba enamorada, Naga su perro oso polar la observaba sintiendo su intranquilidad, apoyo su cabeza sobre el regazo de su ama para tratar de reconfortarla y esta por respuesta poso su mano derecha sobre el blanco pelaje de su animal guia.

—Si amiga mía regresamos a casa después de bastante tiempo. ¿Cómo te sientes? Tú siempre estás calientita estés donde estés eso es algo que me agrada de ti.— decía sintiendo el pelaje sedoso de la perro oso polar, por respuesta esta le dio un lametón en la mano con la que la acariciaba.

—¡Ay  Naga me haces cosquillas!— A espaldas de ella escuchó unos pasos que se acercaban con cautela, volteo la mirada para mirar a Asami la cual también llevaba un abrigo grueso color rojo, su larga cabellera cayéndole por la espalda y hombros y entre sus brazos llevaba a gatibolo su gato blanco con negro envuelto en una gruesa manta para abrigarlo del frío, se recargo sobre la barandilla junto a ella regalándole una tierna sonrisa.

—¿Como te encuentras cariño? Hace ya bastante tiempo desde que estuviste aquí, si no mal recuerdo desde que te recuperaste de las lesiones después de lo de Zahir, te he notado pensativa desde que iniciamos el viaje en barco.— Korra volvió a mirar al horizonte observando los primeros indicios de la tribu Agua del sur, suspiro profundamente aferrando sus manos a la barandilla del barco.

—Tienes razón hace ya bastante tiempo desde la última vez que estuve aquí, todo esto me trae muchos recuerdos, de todas las cosas que he superado desde la última vez de mi visita al polo sur y en especial desde la última vez que vi a mis padres...— Asami noto cómo bajaba el tono de voz al referirse a sus progenitores casi en un susurro, ahora caí en cuenta que Korra no había mencionado a sus padres desde que habían iniciado su relación.

—¿Que hay con tus padres? ¿Hay algo que te preocupa en especial con ellos?— Cuestionó al tiempo que acariciaba el suave pelaje de la cabeza de su gato el cual ronroneaba, Korra volteo a mirarla con cierta preocupación en su rostro.

—¿Que pasa si no lo aceptan? Me refiero a lo tuyo y lo mío, siempre e pensado que mi madre es un poco más abierta demente en cuanto a diferentes temas, pero Papá siempre fue más rígido, siempre me dio la impresión de qué esperaba cosas diferentes de mí.— ambas quedaron en un silencio largo que no era incómodo, pero si cargado de pensamientos no dichos, Korra volteo la mirada al mar bajando la mirada pudiendo observar su reflejo en el agua distorsionado por las ondas qué generaba el movimiento del barco.

—Entiendo lo difícil que es para ti decirle esto a tus padres, pero no está sola, yo estoy contigo pase lo que pase, somos un equipo. ¿Lo recuerdas? Yo siempre voy a estar para apoyarte pase lo que pase.— decía al tiempo que se abrazaba a su brazo izquierdo haciendo que gatibolo maullara despertándose y saltara desde sus brazos al piso del barco estirándose y desperezándose.

Desde el otro lado del barco Kya se acercaba a ellas envolviéndose en su abrigo de piel con su porte elegante y mirada segura, Naga observaba a gatibolo con cierta fascinación escuchando como sonaba el cascabel que llevaba en su collar.

—¿Te preocupa que tus padres no se vayan a tomar a bien su relación?— preguntó la madura Maestra Agua intuyendo la respuesta colocándose junto a ellas en la barandilla del barco.