Enamorado de una cabeza hueca

Duelo (2/2)

- Ahh... ahh... que vergüenza... -Murmuraba la joven pelirrosa, jadeando al lado de las máquinas expendedoras, sosteniendo entre sus dedos, la nota que le entregó el chico del puesto de fideos.- Pensar que idearías un juego como este, no cabe duda que tu mente es maquiavélica, Ishigami.

Murmuraba mirando el papel, mientras recordaba como al estar roja hasta las orejas y rodeada de gente, tuvo que salir corriendo y gritando como una loca. Su reputación como detective se vería seriamente afectada por un suceso así (en realidad no), pero era necesario seguir adelante y resolver este acertijo. Chika desdobló el papel, el cual tenía una sensación bastante agradable en sus dedos en la cual no había caído hasta entonces; luego, comenzó a leer.

"Es probable que mi acertijo haya sido demasiado complicado para ti, pero descuida, eso es solo un aperitivo comparado con lo que tengo preparado, ¡Bwahaha~!"

- ¿Quién se cree que es...? Lo llama plan Ultra Romántico y ahora me insulta como villano de caricatura... -Murmuraba Fujiwara un tanto ofendida, aunque no lo suficiente como para dejar de leer.

"Intente encontrarme detective, ya sabe donde debe de ir, ¿no es así? Lo siento, pero ya he sido demasiado indulgente con usted dándole estas pistas... La estaré esperando, le ruego no me deje plantado.

- Mr. Warui

- Y sigue con su teatrito... ¡Ya verás cuando resuelva tu acertijo en un santiamén! -Arruga la nota para meterla dentro de su bolsa y entonces se pone en marcha a la ubicación del segundo juego. Si se trata de su lugar favorito y solo puede ser dentro de la escuela, entonces solo puede ser...

"Club de Juegos de Mesa" anunciaba el gran cartel al lado de la puerta, frente al cual, Chika se plantaba orgullosa, con boina y lupa en mano, con la determinación de quien está preparada para la batalla, tomando la perilla con autoridad y avanzando con paso firme dentro de la habitación, donde la escena la dejó helada.

- Srta. Fujiwara... me... ¡Agh! M-me mataron... -Su amiga, la presidenta del club, Kozue, se encontraba tendida en el suelo, con un cuchillo en mitad de su pecho, rodeado por una gran mancha roja. En su boca, dos hilos de un liquido espeso caen por las comisuras de sus labios, una vista inquietante, de no ser porque su boca se curvó en una sonrisa.- ¡Mr. Warui me mató!

- ¡¿EHHHHHHH?! -Sin palabras, Chika giró la cabeza por la habitación, solo para encontrarse que, pegada a la pared a la derecha de la puerta, se encontraba Terashima, integrante que restaba del club, mirándola con una sonrisa maliciosa mientras sostiene un pequeño recuadro de papel entre sus dedos.- ¡N-no me digan que ustedes...! ¡¿P-por qué ayudan a Ishigami con esto?! ¡Son unas pésimas amigas! -Chilló Fujiwara.

- No sé de qué estás hablando, nosotros solo fuimos víctimas de un malvado criminal, el cual usted tiene que capturar, detective Fujiwara -Dijo Terashima, pasando su mano por su larga cabellera castaña con un aire de dignidad.

- ¡Porque se nos hizo divertido! -Exclamó Kozue, levantándose, sacudiendo su corto cabello negro y tirando el cuchillo de goma de su pecho mientras sonríe de forma descarada.

- ¡Oye, tu vuelve a tu posición, no estropees el juego! 

- Cierto, perdón -Sin perder su sonrisa divertida, la chica volvió a tenderse sobre el suelo, con sus brazos extendidos en direcciones diferentes, dejándola en una pose exagerada mientras suelta un "blergh" para representar que había exhalado su último suspiro.