El último Juego {Just a Game}

Cap.27 Papá ha vuelto

{[~Shawn~]}

-Amigo, hace mucho que no hablamos sobre la apuesta y ya ha pasado un mes des de que la apuesta comenzó. Solo has conseguido cumplir con uno de tus objetivos. ¿Todo va bien?- preguntó Alex sentado delante de mí en la mesa de la cafetería.

Me puse nervioso al instante. No podían saber que Rebeca me descubrió y que me estaba ayudando a cambio de que yo también la ayudara. Eso pondría en riesgo mi preciada dignidad y popularidad.

-Sí, todo va sobre ruedas, es más, tenemos otra cita este sábado y me pidió salir ella- en verdad es mentira, pero se me acaba el tiempo, debo hablar con ella.

-Pues ya sabes, te estaremos vigilando de lejos para comprobar que es cierto.- Alex es muy agudo y me conoce bien, así que tiene que ser muy creíble.

-Claro,- afirmé ocultando mis nervios- si quieres te vuelvo a mandar fotos y todo.

-No estaría mal- dijo Lester.

-Bueno, tengo que irme para ensayar esa obra.- dije excusándome de ellos.

-Sigo sin creérmelo.- dijo Alex burlón.

-Todo para subir nota- siguió Lester- ¿Crees que si participamos también nos subirá la nota?

-No sé, no vale la pena.

Me largaba mientras les oía conversar sobre el asunto. Suerte que tuve algo que explicarles cuando me preguntaron porqué acepté participar en la obra.

Fui al teatro de la escuela que es donde ensayábamos y ahí estaban todos preparados.
Ensayamos algunas escenas y luego, al terminar, me llevé a Rebeca conmigo en la parte trasera donde nadie pudiera oírnos conversar.

-Oye Shawn, - dijo cruzándose de brazos con el ceño fruncido- tienes que dejar de cogerme por la muñeca y arrastrarme por donde te plazca, que me está empezando a doler las articulaciones de mi muñeca- dijo ejercitándolo.

-Lo siento.- era lo único que se me ocurrió.

-¿Por qué querías hablar conmigo?

-¡Cierto!- tuve un pequeño lapsus- Este sábado, se supone que me has pedido salir, Alex y Lester nos seguirán de manera discreta para comprobar que es cierto, así que es tu turno preparar nuestra segunda cita. No me defraudes.

-Todavía no me has ayudado a mí a completar ninguno de mis objetivos...- se quejó.

-Sí, pero a mí solo me quedan dos meses o un mes y medio.- dije a la defensiva- No te preocupes, aunque hayan pasado ya los tres meses y haya ganado la apuesta, te seguiré ayudando con tus objetivos.

-¿Lo prometes?- dijo como una niña pequeña

-Lo juro- afirmé.

-Entonces, si eso es todo, tengo que irme.

{[~Rebeca~]}

Me despedí de el y fui corriendo a la sala de profesores donde no sé por qué me habrán dicho que vaya después del ensayo, mí tutor, el profesor de matemáticas el Sr. Molé dijo que quería hablar conmigo.