Me dirijo al supermercado donde trabajo.
Mientras voy en el transporte siento mis ojos cerrarse, pero en cuanto estoy apunto de caer dormida los recuerdos llegan como una maldita pesadilla. Me despierto de golpe, respiro agitadamente.
-¿Te encuentras bien? -una chica que iba a mi lado pregunta.
-Si, solo fue un mal sueño.
Miro hacia la ventana y al ver mi parada camino rápidamente a la puerta de salida.
Una vez en mi puesto de trabajo comienzo a atender a los clientes.
-189 dólares- digo al chico al que le estoy cobrando.
-¿189? Pero solo estoy comprando está galleta.-indica la misma.
-Ah lo siento.-me disculpo y cobro por lo que compro.
El día sigue, y quisiera decir que esa fue mi única equivocación en el día, pero no fue así. Fui llamada por la jefa y me regaño.
-¿Que te dijo?- Kevin pregunta al verme llegar.
-Me regaño y me quedaré a hacer horas extras.
- Si quieres puedo hacer tus horas extras. Deberías ir a casa y descansar. No quisiera decirte esto pero realmente te ves terrible, como si no hubieras dormido en días.- y es verdad, no he dormido, no podía hacerlo.
-No, está bien, yo puedo-digo cuando claramente me sentía muy cansada.
-Ve a descansar Melani, Kevin y yo nos haremos cargo aquí-Marlene habla.-Vamos ya vete, y duerme que se ve que lo necesitas.
No pude negarme más, tome mis cosas y salí de ahí rumbo a mi departamento.
Al llegar veo a Hunter parado en la puerta del apartamento. Su cara se torna en preocupación al verme. No quiero verlo así que me limito a caminar en su dirección, meter la llave y abrir.
-Melani, hablemos por favor. Yo te amo. Te juro que de verdad te amo Mel.
-Ya vete-digo antes de entrar y cerrar la puerta. Los sentimientos por Hunter habían desaparecido, ni siquiera sentía nada por nadie, estaba vacía de emociones.
-Llegaste- Amber habla desde la cocina, un delicioso olor a comida llega a mis cosas nasales, mi estómago está hambriento. -No fuiste con el otro psicólogo.
-No. No me siento bien.-camino en dirección a mi cuarto y siento a Amber venir atrás de mi.
-Te ves muy mal Maya -menciona suavemente.
-Lo se, pero no sé que hacer, no se que hacer para quitarme este dolor.-por primera vez dejo que el dolor de la infidelidad de Hunter me destroce- Pensé que podía ser feliz a lado de Hunter, pero no fue así, mi vida es una absoluta mierda, tal vez debería morir para dejar de estorbar.
-Maya, no digas eso. No es del todo una mierda. Estamos aquí, empezando otra vez. Y te aseguro que este dolor que sientes ahora desaparecerá, lo hará.-Me abraza y correspondo a su cálido abrazo.
-Ya no puedo más Ambar, he tratado de ser fuerte, pero ya no se que hacer. Ya no se. Ya no tengo fuerza-lloro de impotencia mientras no dejo de susurrar que ya no puedo más.
Es tan difícil creer que puedes seguir enfrentando al mundo y el torbellino de tristeza dentro de ti cuando ya todas tus fuerzas las has usado en otras batallas dolorosas.
No tengo más fuerza, ya no tengo fuerzas para levantarme más.
-Yo se que puedes Maya. Yo lo sé, y estoy aquí siempre, para ayudarte a salir de todo el dolor que sientes ahora mismo. Pero por favor, necesito que me dejes ayudarte. Por favor.- sus mejillas están empapadas de lágrimas y me siento fatal.
