Hidden Secrets

Prólogo

Antes de comenzar el prólogo quería decirles que esta historia estará escrita de manera muy diferente, he escuchado todos los consejos y los voy a aplicar. No habrá tantos narradores como la anterior para no hacer un lío jajajaja tengo muchas ganas de empezarla pero lo haré cuando termine la de "Special Girl".

Ojalá les guste y digan su opinión <3

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Amanda... Amanda... Era lo único que escuchaba. 

Abrí los ojos despacio y ví a mi hermana saltando sobre mí gritando que me despertara. La empujé hacia un lado para que se quitara de encima y miré de reojo la hora. Eran las 12 de la mañana, había dormido demasiado.

Hoy era un gran día, mis padres celebraban una fiesta pero no una fiesta cualquiera si no la inauguración del museo de mi familia.

Mis padres eran millonarios y era un dinero que se habían ganado ellos con su esfuerzo. No nos hablabamos con el resto de la familia porque pensaban que tanto dinero tenía que provenir de algún oscuro pasado. Por eso decidimos mudarnos a California, donde eramos muy conocidos y queridos.

-¡Tienes que probarte el vestido ya!.

-Luego más tarde, la fiesta es esta noche -susurré hundiendo mi cara en la almohada-.

Mi hermana era adorable, era mayor que yo pero solo por 2 años y estabamos siempre juntas. A veces podía ser un poco extraña ya que desde hace un par de años tiene un sueño que la atormenta todas las noches y se levanta gritando. Jamás pregunté que soñaba, no sé porque sentía respeto por ese sueño que no la dejaba dormir.

Decidí hacerle caso a mi hermana y me probé el vestido, era un precioso vestido largo amarillo con un escote bastante pronunciado. No tenía mucho pecho pero aquel vestido me realzaba bastante mi cuerpo, era precioso.

El de Irina, mi hermana, era un vestido negro largo pero que a un lado de la cintura dejaba al descubierto una de sus piernas. Tenía un bonito escote ya que mi hermana tenía más pecho que yo.

Los vestidos los había diseñado nuestra madre, tenía mucho glamour y era una gran diseñadora. Para ella era un orgullo que los lucieramos nosotras ya que formarían parte de la nueva colección.

Irina y yo pasamos toda la tarde ayudando para que la fiesta fuera perfecta y por fin llegó la hora.

Corrimos a vestirnos porque ya teníamos ganas de lucir aquellos preciosos vestidos.

Bajamos las escaleras emocionadas, realmente iba a ser una noche maravillosa.

Estaban todos nuestros amigos pero llegó un momento en el que Irina y yo nos aburrimos y decidimos ir a la playa a darnos un baño. Así lo hicimos, nos estuvimos bañando casi toda la noche con unos chicos bastante guapos que habíamos conocido en la fiesta. 

Cuando miramos la hora vimos que era bastante tarde y decidimos volver ya que no habría ningún invitado en casa y así fue.

Después de despedirnos de los chicos volvimos pero no había nadie, ni si quiera estaban las señoras de la limpieza. La casa estaba hecha un desastre pero apenas se oían ruidos.

-¿Mamá? ¿Papá?.

Gritamos durante media hora pero nadie contestaba, decidimos entrar a su habitación y OH DIOS MIO.

No podía creer lo que mis ojos estaban viendo, eso era un baño de sangre. Entré en la habitación y ví a mi madre tirada a un lado de la cama toda llena de sangre y a mi padre a su lado. No podía ser, mis lágrimas no paraban de salir de mis ojos. Miré por la habitación y justo vimos al asesino salir por la ventana, se giró mirándonos y nos sonrió. Lo único que pude ver es que tenía un tatuaje en el cuello, era una serpiente. Aquello tenía que ser una pesadilla, tal vez la pesadilla de la que tanto hablaba Irina.

El miedo me recorrió por el cuerpo y en ese momento me desmayé, no recuerdo que fue lo que sucedió después conmigo e Irina.