Cortos Nazunit

Felicidad Infinita

En la habitación se podía escuchar el sonido de la alarma, eran las seis de la mañana eso significa día de escuela el fin de semana pasó demasiado rápido y la verdad no lograron descansar casi en nada ambos adultos.

Reich: maldita sea -apago la alarma de mala gana y despertó a su esposo- oye ya es hora.

URSS: cinco minutos más -se volvió a tapar con las cobijas de su cama- es muy temprano.

Reich: -se levantó de su cama y estiró sus manos- rápido que te tienes que bañar -salió de su recámara para ir a la de sus hijos- buenos días mis amores.

UN: buenos días papi -se levantó rápido de su cama y fue hasta donde estaba su papá para darle un fuerte abrazo- me voy a bañar papi.

Reich: si, ya sabes no desperdicies el agua y no se te olviden tus toallas mi vida -el infante se fue corriendo al otro baño- mi niña ha levántate ya es hora -se acercó a dónde dormía su hija- haré de desayunar wafles.

SU: -se tapó con las cobijas- no mami es temprano

Reich: lo se mi niña, pero necesitas ir a la escuela así que no hay otra opción -le quitó las cobijas a la niña- así que levántate y en cuanto se termine de bañar tu hermano vas a bañarte

SU: ya ni modo -le dio un beso a su papi y se dejó caer en la cama rendida ente la situación- Diosito ya suéltame no soy tu mejor guerrera

Reich se fue de la habitación con una sonrisa en sus labios, sus dos hijos eran todo lo contrario por eso son gemelos. Bajo a la cocina para empezar a preparar el desayuno a ambos les encantaban los wafles y a quien no pues eran deliciosos. Escucho a su esposo preguntar por una camisa que no había visto y pues ya tuvo que ir a su rescate ya saben Reich es el salvador de esa familia si dejaran solos a los gemelos y al adulto responsable URSS no sobreviven ni cinco minutos solitos ya que bueno los gemelos luego se andan peleando el soviético no es buen mediador siempre termina siendo convencido por sus hijos que no los regañen en cambio Reich siempre termina dando solución y fin a las mini peleas de sus gemelos además de que ya tenía experiencia con Alemania ese niño era tranquilo a comparación de esos dos niños que tiene ahora.

SU y UN estaban en su cuarto alistándose para ir a la escuela, regresar a clases después de vacaciones era de lo peor para ellos ya que estaban acostumbrados a levantarse tarde. Ahora su rutina de escuela había regresado ojalá las vacaciones fueran eternas, así como una pandemia mundial y que nadie saliera de su casa.

En fin, deseos de niños pequeños que bonita es la inocencia.

En cuanto terminaron los dos, tomaron sus mochilas y bajaron al comedor donde estaban sus papás preparando sus lonches, más que nada les emocionaba que su papi había hecho wafles así que tomaron un plato y se acercaron a sus papás para que les dieran un wafle porque estudies sabrán que su estatura no sirve para alcanzar la barra.

Reich: hola mis amores -tomo los platos de sus hijos y sirvió dos wafles para cada quien- no le pongan mucha miel.

UN: nop -corrió con su gemela hasta la mesa donde tomaron la miel- yo primero.

SU: bueno -vio como su hermano servía la miel sobre su desayuno- creo que es mucha.

UN: es la adecuada -le paso la botella de miel a su hermana- voy por arándanos y así nos sabe mejor nuestro desayuno -fue de nuevo a la cocina y abrió el refrigerador para buscar la fruta-.

SU: -tomo la botella y dejó caer una pequeña porción en su desayuno, cerró de nuevo la botella con miel y la colocó sobre la mesa- papis ¿pudo tener un perrito?

Ambos adultos se sorprendieron por la petición de su hija menor, pues sí SU era menor por algunos minutos en fin cosas que pasan; regresando al tema del perrito el primero en reaccionar fue Reich quien volteó a ver a su esposo ambos se dedicaron una mirada nerviosa.