Desperté esa mañana con la sensación de que algo pesado me aplastaba el pecho. La niebla en mi cabeza era densa, como si no hubiera dormido nada. Cada palabra de la conversación de Zac de anoche seguía retumbando en mi mente. "Alejado de su familia", "actores", "amarrarlo y amenazar". No podía sacarlas de mi cabeza, como una música repetitiva que no dejaba espacio para otro pensamiento. Me costó abrir los ojos y, cuando lo hice, la luz de la mañana me golpeó con fuerza. El dolor de cabeza era insoportable, y mi cuerpo se sentía tan agotado que ni siquiera sabía si había descansado durante la noche. Todo parecía un sueño extraño y distorsionado.
Zac... El Zac que yo creía conocer no podía ser esa persona de la llamada. Pero... ¿y si siempre lo fue? ¿Qué tan poco conocía a la persona con la que convivia y confiaba hace meses ? Mi mente no dejaba de dar vueltas, pero sabía que tenía que levantarme y empezar el día. Suspirándolo profundamente, me levanté de la cama, intentando sacudir esos pensamientos antes de que me consumieran. Tenía que seguir adelante, seguir con mi vida, aunque todo dentro de mí me gritara que algo no estaba bien.
Me vestí rápidamente, pero el reflejo en el espejo me devolvía una imagen que no me gustaba. Ojeras profundas, mirada perdida, y una mueca que no lograba parecer una sonrisa. No podía permitirme ser débil, no podía dejar que Zac supiera lo que había escuchado. No debía. Lo miré un momento más, viéndome allí, intentando encontrar la fuerza para actuar como si nada hubiera pasado. Como si todo estuviera bien, como si fuera un día normal. Me lo repetí mentalmente mientras me dirigía hacia el comedor.
Allí estaba él. Zac, con su sonrisa impecable, sentado frente a un plato de tostadas y una taza de café, como si fuera el inicio de un día cualquiera. Sonreí en respuesta, aunque mi gesto era forzado, y me senté frente a él. Intenté disimular mi ansiedad mientras tomaba el vaso de jugo que él ya había puesto frente a mí.
—Buenos días, dormilón —me saludó alegremente, levantando su taza en un gesto despreocupado—. ¿Listo para ir a clases?
¿Cómo podía estar tan tranquilo? ¿Cómo podía mostrar esa cara de normalidad después de lo que había dicho anoche? Yo lo miraba con más atención ahora, buscando algún indicio de que, tal vez, la persona que yo conocía seguía allí. Pero su mirada no era la misma. Había algo oculto detrás de esos ojos brillantes, algo que no podía identificar y que me inquietaba aún más.
—Sí... Solo estoy un poco cansado —respondí, tratando de sonar casual, aunque no pude evitar que mi voz sonara algo tensa.
—Es normal, las primeras semanas suelen ser así. Te acostumbrarás. —Me guiñó un ojo mientras se levantaba para buscar algo más en la cocina.
Lo observé desde la mesa, mi mente llena de preguntas que no sabía cómo formular. ¿Qué tan bien conocía a Zac realmente? Él había sido mi salvavidas, mi apoyo desde que llego aqui, pero ahora... ahora todo se sentía diferente. Todo parecía más oscuro, más inquietante. La dualidad en su comportamiento comenzaba a darme escalofríos. Una parte de él era el Zac amable y preocupado, y la otra era algo completamente distinto, algo que no podía identificar.
Al llegar a la universidad, nuestras clases no coincidían ese día, por lo que me vi solo durante la mayor parte de la jornada. Agradecíque ese dia nuestras clases no coincidirían . Al menos, no tendría que interactuar con Zac por un rato, y eso me dio un respiro, aunque mi mente seguía llena de preguntas que no sabía cómo responder. ¿Por qué yo? ¿Por qué Zac quería que estuviera aquí, alejado de mi familia? ¿Quién era él realmente? ¿Qué me estaba ocultando?
Durante el descanso, revisé mi teléfono sin pensarlo. Un mensaje de Zac apareció en la pantalla, como si no hubiera pasado nada.
"Te recogeré al salir. No tardes mucho."
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Dentro de tres mundos
Teen FictionEn la universidad Forger de betas había un joven estudiante de 3 año llamado Demian que a simple vista parecía uno más del montón, pero él ocultaba un enorme secreto que no quería que fuese revelado nunca. Demian era un joven muy estudioso intelige...