Reir Para No Llorar

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Me desperté toda contracturada, cortesía de la mala postura en la que dormí, dolor de cuello mínimo por 3 días. Al principio no entendía nada, es decir, me levanté en un lugar donde no es mi casa; cuando logré despertarme del todo, caí en la cuenta de la situación: William y yo nos quedamos dormidos en el sillón. Abrazados. Juntos. Mis nervios están al límite, estoy a escasos centímetros de él y estoy tan débil que no sé si sea capaz de resistirme...¡encima se puso ese perfume que me vuelve loca! Lo hizo a propósito, es obvio.
Me moví suavemente para no despertarlo pero fue en vano.

-Buen día-saludo dormido

-Lo siento, no quería despertarte-me disculpe

-No pasa nada-dijo y me miro.

Nuestras miradas hicieron contacto. Podría estar horas mirándolo a los ojos, intentando descifrar que piensa o que siente. Sin embargo, hacer esto es el primer paso para caer en la tentación, pero ¿cómo no caer en la tentación con la persona que amas?
William se acercó lentamente y beso mi frente. Más tierno imposible.

-¿Desayunamos?-preguntó y a mi me sacó del transe

-Ah, si claro-dije y me pare del sillón. Un tirón recorrió toda mi espalda y no pude evitar poner cara de dolor.

-¿Estas bien?-dijo preocupado

-Si, si-conteste aún media dura-es mi mala postura-y me acordé de como habíamos dormido

-Estira la espalda, nunca falla-dijo y se dirigió para la cocina-¿que queres? ¿Tostadas, budín, fruta, cafe, te?

-Con una manzana me alcanza-contesté ante la variedad de opciones

-Eso no es desayuno-reprochó-no estarás dejando de comer, ¿cierto?-preguntó como retandome

-No Will, nada que ver-me entregó la manzana-la verdad no tengo mucha hambre-agregué

-¿Es por lo de Lauren?-mencionó cuidadoso por mi futura reacción, ya me conoce, sabe que me puede saltar la ficha en cualquier momento

-Ni la nombres-dije. No quería acordarme para no enojarme-a todo esto, gracias-agradecí sincera

-De nada Mary-contestó de la misma manera-igual, no hace falta que lo agradezcas

-Si hace falta-contradije-siempre estás para mi...cuando las cosas me salen mal, estas ahí para escucharme y decirme que todo va a estar bien-suspire-y esa es una de las cosas que me hacen amarte-volví a suspirar tratando de tragarme el nudo en la garganta por la escena cursi que había montado.

William sólo me escuchó atento, y una vez que termine me abrazo y me susurro un "te amo". Al separarnos, iba a decir algo más, pero el sonido de mi celular lo interrumpió. Era un mensaje de Thomas.

"Ey novata, en 20 en el teatro, empieza el DWYFD"

Dios, lo había olvidado por completo. Soy tan tonta a veces.

"Okay, beso"

Luego de contestarle, suspire frustrada. Estoy buscando una excusa para no ir.

-¿Que pasó?-preguntó William por mi reacción

-Hoy es el DWYFD-conteste sin expresión alguna

-¡Cierto!-dijo alegre-creo que ya se que canción voy a bailar

-¿Estas invitado?-pregunté confundida

-Si, Bella me dijo que vaya-oh Bella, otro problema-¿porque esa cara?

-Belle esta ofendidisima conmigo porque no le quise contar lo del karaoke-ya me estaba enojando de nuevo-ayer la llamé para pedirle ayuda y me cortó el telefono-y no se que dije que provoque que William estallara en risas-no se de que te reís-dije enojada

-De vos Mary-y bue, la gente suele reírse de mis miserias-oh vamos, es patética la historia-pero yo seguía sin cambiar la cara-deberías reírte un poquito mas-y se fue a cambiar, supongo.

¿Porqué la gente cuando te enojas, se ríe? Es una duda que tengo, es decir, estoy enojada, no te rías. Aunque si lo pienso tiene razón, debería reírme, porque sino tendría que ponerme a llorar.

Dance With Me 2 [William Moseley]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora