Capítulo 10

102 23 10
                                    

Una mueca se formó en el rostro de Itachi. Su ceño fruncido y el movimiento constante de sus ojos que trataban de observar las oscuras pupilas de su hermano menor, indicaban claramente que no comprendía a qué se refería Sasuke con sus palabras.

—¿Qué fue lo que te dijo, Sasuke? ¿Estás seguro de que no has escuchado mal?

No importaba si su hermano lo veía con molestia, porque para Itachi estaba claro que aquel sentimiento no era real.
No podía serlo cuando Sasuke se aferraba a su brazo con fuerza mientras que sus lágrimas caían como si sus ojos fueran dos cascadas. Mucho menos podía serlo cuando permitió que su voz saliera con fuerza por el llanto.

—Él lo dijo.—Habló entonces. — Nos van a dejar.—Sus voz se oía rota y se notaba el esfuerzo que hacía porque el nudo de su garganta desapareciera.

La puerta de la habitación se abrió con rapidez, permitiéndole a Itachi ver a Minato de pie con una mueca que demostraba su preocupación.

>>Ambos nos abandonarán.

El doncel no esperó más tiempo. Se acercó con velocidad a su hijo, apretándolo en un abrazo para acunarlo contra su pecho, aún cuando se notaba el esfuerzo de Sasuke por alejarse de aquellos que lo iban a lastimar con su partida.

—Dime que ocurre.—Demandó observando al mayor de los hermanos.

—Mi padre le dijo que nos iremos.—Respondió con sus dientes apretados. Inhaló profundamente para tranquilizar su enojo y acarició con suavidad la cabeza de su hermano menor.— Sasu, te prometo que no nos iremos a ningún lado.

Sasuke lo miró por un segundo con su vista empañada por las lágrimas. Los incontrolables espasmos de su cuerpo continuaban con cada respiración obstaculizada que daba y apenas era consciente de la sonrisa que su hermano mayor le dedicaba.

—Pero él lo dijo.—Respondió con voz temblorosa.— Papá nos dejó una vez y dijo que... Que se irían pronto y... Y me dejarían.

Minato besó una y otra vez una de las mejillas húmedas de su hijo, sin ser consciente de la mirada fija de Itachi en su persona.

¿Minato ya había intentado alejarse? ¿En qué momento? ¿Cómo nunca supo de esa situación si era quien lo protegía dentro de la organización?
Nunca se había enterado de nada que tenga que ver con la huida de Minato, mucho menos tenía el conocimiento del momento en que decidió alejarse de su familia.

—Te prometí que no me volvería a ir.—Aseguró el rubio en voz baja.

—¿Es por qué papá volverá a gol...?

—Es porque te amo.—Interrumpió Minato con velocidad.— No te dejaré nunca, lo prometo.

Sasuke suspiró, ya más tranquilo y sintiendo que el alivio por fin lo dejaba descansar de la angustia que había sentido durante tantos días.

No había querido tratar mal a ninguno de los dos mayores, pero había sido la única solución a la que su inocente mente había llegado en su momento. No quería sufrir la partida de ambos, por lo que le había parecido una buena idea dejar de experimentar el amor que su hermano y su padre le ofrecían para luego privarlo de ello.

—¿Y tú, Itachi?

El mayor le dedicó una sonrisa forzada y bien trabajada que les impedía notar a los demás las emociones reales que sentía.

—Si me voy, será solo cuando comience con las misiones de la aldea.—Aseguró.— Pero prometo que no volveré a alejarme de ti durante tanto tiempo y siempre volveré.

Sasuke asintió confiando en las palabras de ambos. No podía comprender aún la razón por la que su padre le había dicho que ambos se marcharían, solo le dijo que debía estar preparado para su partida y ya.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 10 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Ángel (ItaMina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora