Iris
La cabaña estaba cubierta por un leve resplandor azul. Afuera, la luz del sol apenas llegaba a ese rincón del universo, pero dentro, la calidez entre Iris y la Tierra era suficiente para iluminar todo.
En la cama, Iris tenía a la Tierra entre sus brazos, rodeándolo con posesividad y devoción. Su cabeza reposaba en el pecho de su amado, escuchando el suave latido que tanto adoraba. Sus dedos acariciaban distraídamente la espalda de la Tierra, marcando su piel con pequeñas caricias.
Iris — (en voz baja) Hoy es un día especial, ¿sabes?
La Tierra, con una sonrisa tranquila, lo miró con curiosidad.
La Tierra — (dulcemente) ¿Por qué lo dices?
Iris levantó la cabeza, su expresión embobada de amor.
Iris — Es San Valentín, mi bebé hermoso… un día perfecto para recordarte que eres solo mío.
Antes de que la Tierra pudiera responder, Iris lo empujó suavemente sobre la cama, quedando encima de él. Su mirada estaba llena de adoración mientras sus manos acariciaban su rostro con ternura.
Iris — (con una sonrisa juguetona) No quiero que pienses en nadie más hoy. Solo en mí… en cuánto te amo.
La Tierra rió suavemente, disfrutando de la devoción en los ojos de Iris. Sabía que su amor era intenso, casi abrumador, pero eso solo lo hacía más especial.
La Tierra — (con ternura) Siempre eres lo único en lo que pienso, Iris.
Al escuchar eso, Iris sintió que su corazón se aceleraba. Sin poder contenerse, comenzó a dejar pequeños besos por todo el rostro de la Tierra, deteniéndose en su frente, sus mejillas, su nariz y finalmente en sus labios.
Iris — (murmurando entre besos) No sabes cuánto te amo… cuánto significas para mí…
La Tierra, sonriendo, lo abrazó con fuerza, acariciando sus cabellos con suavidad.
La Tierra — (susurrando) Y tú para mí, Iris.
Iris se quedó en silencio por un momento, disfrutando del calor de su amado. Después, con una sonrisa traviesa, sacó algo de debajo de la almohada: un pequeño obsequio envuelto en una tela azul brillante.
Iris — (emocionado) Te hice algo.
La Tierra se incorporó un poco, intrigado. Tomó el regalo con cuidado y, al desenvolverlo, encontró una pulsera tejida a mano con hilos de colores que representaban los océanos y los bosques de la Tierra.
La Tierra — (conmovido) Iris… ¿tú hiciste esto?
Iris asintió, algo sonrojado.
Iris — (murmurando) Quería darte algo que puedas llevar siempre contigo… algo que te recuerde que soy tuyo y tú eres mío.
La Tierra sintió un calor indescriptible en su pecho. Tomó la pulsera y la ató en su muñeca con una sonrisa radiante.
La Tierra — (con dulzura) Es perfecto. Gracias, Iris.
Iris, embelesado por su expresión, no pudo evitar abrazarlo con más fuerza.
Iris — (susurrando contra su cuello) Feliz San Valentín, mi amor.
La Tierra, con el corazón latiendo rápido, lo abrazó de vuelta, dejando un beso en su cabello.
La Tierra — Feliz San Valentín, Iris.
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𝐎𝐛𝐬𝐞𝐬𝐢ó𝐧 (Iris x Tierra)
FanficTrata sobre la Tierra, el único planeta con vida, y al parecer, cierto 'planeta' se obsesiona con la belleza de la Tierra.