Confesión

I love you

Marlon

Con la hija de lindo en mis brazos me siento confundido. Por varias razones: Primero, ¿Que hace mi hermana aquí?

¿Porque lloro tan desconsoladamente?

¿Arturo y yo ya no tendremos cita?

¿Porque él a actuado tan raro?

Espera. ¿De verdad me dijo cariño?

Quisiera saltar de felicidad por un jardín, no es posible sin embargo, no importa.
Concéntrate Marlon la hija de tu amado acaba de llorar.

Ella mueve su cabeza abriendo con pesades sus ojos.

-Hey.

-¿Marlon?

-Si- sus cejas se juntan levantandose y separándose de mi, mira a mi hermanita.

-¿Donde esta mi papá?

-Arriba/Cambiándose.
Ulisa y yo al momento.

Asiente lento, expectantes Elisa solo sonríe.

-Voy con el.

-No cariño, tienes que descansar, toma agua te deshidrataste.- dice Ulisa

-Entonces voy por el.

-Nada, hay vengo.- interrumpe saliendo de la habitación.

-¿Crees que baje rápido?- me pregunta Elisa.

-Seguro.

Ella se sienta en su cama jugando con sus dedos.

Entonces... ¿Ahora que digo? Muerdo mi labio inferior, toco mi frente y volteo a la puerta.

Sip, nose. Mi hermana regresa acercándose a Elisa.

-Ten.

-Gracias.

Se toma su agüita y me estoy empezando a sentir incomodo, no con ellas si no con la situación. Pregunto de nuevo ¿Que digo?

-Princesa.

-Papi.- Elisa deja de tomar por el apretón de brazos de mi esposo digo novio, casi novio, ¿Amigo? Eso.

Bueno que tiene de malo decirlo si de todos modos nos vamos a casar.

Se secretean, analizo sus movimientos, Eli sentadita en sus piernas hablando a la oreja de su padre cubriéndose con su mano y luego mi casi novio-esposo haciendo lo mismo.

Ulisa y yo nos miramos encogiendo nuestros hombros al final.

-Mar, ven.- me levanto deprisa siguiendo a mi lindo. Salto mentalmente, amo decirle mi lindo.

-No quiero ser grosero cariño pero- mar...- cubre su cara. Sonrio.

-Lo siento, ¿Te diste cuenta que me has dicho cariño dos veces? Estoy muy feliz.- vuelvo a besarlo de pico. Niega.

-Tienes que irte.- me imagino dos puntos y el inicio de un paréntesis. Ponte serio Marlon.

-A- Arturo- insisto. Me niega y ríe.

-Mi hija se siente mal.

Si, Marlon, recuérdalo.

-Si, perdón, estaba ansioso por salir, saldremos luego, ¿De acuerdo? También me dices que paso con la chama.

Sus labios se aprietan, se inclina para besarme, sostengo sus mejillas acomodandonos en el beso.

-Oigan.- nos separamos.

-¿Es enserio?- frunzo el ceño hacia mi hermana.

-Perdón pero eli quiere estar a solas con su padre y Arturo, te está llamando.- él asiente.