En tiempos de Crisis, No ¡Bachaqueo!

2. Soy muy PRO

Esta verga, uno ya tiene hasta que alquilar el puesto donde poner la colchoneta, porque si, como se abran dado cuenta, o no, mi hermosa madre me ha obligado a venir a hacer cola por dejarme robar del pendejo ese.

Ahora estoy aquí, a la una de la mañana a las afueras de Farmalotodo, y de pasapalo hay lista, ¡Y QUEDE DE 133!, uno pa' sali de primero tendrá que ser mafioso o pistolero, alguna vaina rara que te haga tene' bastante rial. Si no, tas' jodio mi amigo. Así como yo.

Cuando encontré por fin un campito donde poner mi colchoneta, me tropiezo con un atravesao, ni le miro la cara, ¿para qué? ¿Pero y si es la copia de Wisin y Yandel? Ah no, a sí, sí miro.

Pero a que no se lo imaginaban, pues yo tampoco lo creí en un principio; creo que hasta me empezaron a salir gusanos de los ojos. Era el mismo tarupudito ese de Yordan, tratando de robarme mi puesto para la colchoneta... ¡pero que se joda!

- ¡Chamo deja de perseguirme!-le grite exasperada, ya que mi temperamento con sueño era terrible, así como cuando Mamá se entera de que habían muestras gratis y ella ni pendiente; se vuelve una furia, ¡Que furia!, mejor dicho, es como cuando tienes hambre de mil demonios y vez un manjar a tus pies, pero alguien se te adelanta... y pa' rematar que ese alguien sea Yordan. Ufs, yo no aguanto, me suicido. Aunque antes lo mato a él, y después como el manjar yo, y como ya tengo la panza llena, no me suicido.

-Mami tu sabes que a mí me persiguen, yo no suplico a nadie-después de escuchar su mariquita voz, el vomito era lo que a mi garganta llegó, es que acaso ¿qué? ¿Se creía Brad Pitt? Es que ni a los talones de una Cucaracha llega.

-Te perseguirán las ratas, porque pana, con ese olor que te gastas. Ojala que vendan cloro, pa' que te eches una bañadita.

Deberían darme un millón de bolívares por el chinazo que me he gastado, que les puedo decir, soy muy Pro... pero pensándolo mejor, y me pagan en dólares, porque en los riales de acá no me alcanza pa' na.

Cuando ya la guerra había terminado con el bachaquero mariposita, pude ver su rostro de derrota; que bien se siente. Pero vi algo inusual en su rostro, y eran los morados que tenía en todos lados, incluso en los brazos morenos del mariposo ese.

-Menol... -reflexione bien mis palabras, si algo Mamá si me enseño en la vida, es a ser amable y colaboradora, bueno siempre y cuando no me roben harina pan y la mantequilla, y el jabón Ace, ni el de platos, y mucho menos la leche en polvo, ¡Ah! Ni tampoco la harina leudante ¡Chamo, esa broma ni se consigue!... Pero volviendo al tema, esos hematomas eran indicios de maltrato, tenía que hablarle con delicadeza-. Yordan... ¿Abusan de ti?

- ¿¡Qué?!-gritó sorprendido el tipo.

-Entonces si no abusan de ti... Eres de esos tipos... Ay, ¿cómo se llamaban?... Masoquista, sí, eso.

- ¿Masoquista? ¿Tas' loca mujer?

-Sí de esos que se dejan hacer lo que sea, o que les peguen, así como el empresario ese que le pegaba a la caraja con látigos y nalga...

- ¡Fue tu madre!-me interrumpió. Y de inmediato quede en Shock... ¿Mi mamá dándole latigazos al mariposito ese? Pero, ¿Mi mamá? ¿Por qué le tendría que haber golpeado? Si ella estaba molesta es por el robo de... Ah ya. Mamá encapuchada, bate de beisbol, odio hacia Yordan, robo de jabón... sabía que tenía que haberla detenido. ¡¿CÓMO SE ATREVE A IR SIN MÍ?! Yo lo hubiese grabado y subido a Youtube, sería más famosa que la chapa que vibra.

-Y ahora ella esta presa.

- ¿¡QUÉ!?

-La demandé, por abuso a menores de edad-quise abalanzarme y terminar lo que mi mamá había comenzado, pero aun no era tiempo de ir a la cárcel, soy muy joven.

- ¡SI TU ERES UN BEJORRO! ¡MÁS VIEJO QUE LA INMORTALIDAD DEL PAJARITO ESE!

De inmediato revise mi perol, sí, ese teléfono que ya cuesta un rialero y ni cámara tiene. Así de grave estamos pana. Pero aún sueño con ese príncipe millonario cantante de reggue, que me compre uno de esos que no tienen teclas y tienen cámara ¡SIN NECESIDAD DE ROLLO MENOL! Chiamo mándenme uno de esos.

Cuando vi la pantalla, ya eran pasadas las cuatro de la madrugada, y tenía diecisiete llamadas pérdidas de Mamá ¡RESENLE A LOS ESPIRITUS POR MÍ!