Solo pago la cuenta y me levanto del asiento tan caballeroso que me estaba asustando por que era imposible que el fuera mi príncipe que me rescatara de aquél abismo profundo del que no podía salir él no podía ser, todos menos Kyan él no podía sacarme de mi mundo gris y aburrido para fingir ser el príncipe que salva a su princesa para terminar en una feliz historia una mas del montón de parejas que existen hoy en día yo no quería que él fuera uno de mis motivos por despertar cada día no él no podía ser él amor de mi vida y yo no le podía preparar su desayuno para llevárselo a la cama como lo hacen todas las esposas.
Yo no era la esposa convencional para un hombre yo era algo más, para cualquier hombre yo quería vivir para mi y solo para mi, ser yo es la máxima expresión de individualismo que puede existir nadie me puede controlar es inútil yo solo sabia ser yo nadie mas no podía ser una actriz en mi propia historia y no podía crearme esa falsa ilusión de que Kyan seria el hombre ideal para mi.
- ¿Te gustaría pasar?
Solo escuche eso cuando estaba pensando todo eso solo escuche eso y sin oponerme entre a un edificio bastante antiguo con toques barrocos en su decoración con unas escaleras de mármol de caracol tan grandes que sentía que subía al cielo no a un departamento de un universitario.
-Detente
Me dijo llegando al piso 33 con una gran puerta de madera. ¿Se supone qué tengo que estar feliz? Por llegar a lo que la mitad de las chicas anhelan llegar al departamento de Kyan aquel joven que es un desastre y que tiene unos ojos de gato, se supone que he desbloqueado un nivel mas en este juego, por que eso parece un cruel juego y el que va adelante de mi es Kyan y eso no va para nada bien.
Entre y solo vi un departamento el triple de grande que el mío con tres habitaciones un baño con tina una extensa cocina, una sala ochentera pero forrada de piel café, un comedor para ocho personas, definitivamente ser hijo de papi le trajo algo bueno, pero sin duda lo mas bonito son los grandes ventanales en los que se puede contemplar el paisaje nocturno que tiene New York y el tenía ese lujo todas las noches de observar las luces de la cuidad tal vez a él tampoco lo perdono.
Pero lo mas curioso fue que el pasillo del recibidor de su departamento en donde al final del pasillo habia una mesita redonda con un mantel rojo un teléfono negro y una caja de madera forrada con terciopelo rojo la cual estaba con candado, esa caja resaltaba del resto de su departamento era bastante grande. ¿Que podría guardar ahí?. Solo se me vino dinero o algo de valor nada interesante.
Solo me ofreció agua y me paso a sentarme al comedor definitivamente era mucho espacio para el tanto que en la lista de sus obligaciones era mucho ir por café al autoservicio y lo único que había era agua. Sin duda su departamento estaba solo mucho tiempo por que para ser Kyan estaba bastante limpio y ordenado no había ni risas, ni llantos en ese departamento pero si mucha soledad esa soledad que nos aterra que nos llega a todos en algún momento de nuestra vida.
Y yo solo le pedí un pequeño lápiz con goma y una hoja para hacer la conclusión y haber que tal le parecía. Kyan fumaba mucho bastante para mi gusto digo el cigarro es de los placeres que nos regala esta vida pero abusar era bastante malo en el tiempo que lo llevaba de conocer siempre fumaba 15 o 10 cigarros muchos para mi gusto. Solo me pidió que intentara de terminar la conclusión sin prisa por que había tiempo era jueves lo que significaba que el viernes solo teníamos 3 horas de clase y podíamos llegar tarde si queríamos así que prisa no había para nada y se marcho a la tienda por una cajetilla de cigarros Montana al autoservicio mas cercano ya que si a algo no le podía faltar a Kyan era una cajetilla de cigarros.
Se marcho pasaron 15 minutos y no llegaba de sus compras, pasaron 30 minutos y nada, hace mucho que había terminado de escribir mi parte de la conclusión.
No se que me paso esa noche por que mis principios desaparecieron y fui de metiche en toda su casa observe replicas de cuadros famosos y fotos familiares en las que solo era una madre joven un padre tal vez empresario y el hijo pequeño con sonrisa grande. entre al baño en donde tenia muchas plantas y algunas flores lo mas sorprendente es que todas esas plantas estaban verdes y floreando al parecer tiene tacto con algunas cosas que no son personas. Después me fui a su sala me senté en todos lo sillones que eran tan cómodos que no me molestaría morir en ellos algún día, luego procedí a su habitación en donde me di cuenta que vivía como quería tenía una cama tamaño matrimonial enorme y cómoda con sabanas y edredón rojo con alfombra café, con un pecera con peces dorados muy lindos pero sin duda la vista de su habitación era bestial todas las luces de New York ,toda la gente, todas las luces de los bares se podían contemplar y era maravilloso pero decidí preceder ya que si me encontraba husmeando en sus cosas no quería que me encontrara en su habitación y procedí a la cocina donde tenia cosas tan curiosas pero no interesantes para mi, al parecer algo me llamaba para que regresara al pasillo del recibidor y como lo ¨astuta que era¨ fui sin pensarlo dos veces y me pare justo frente a la mesita redonda donde se encontraba esa caja roja . La contemple por unos segundos hasta que... al parecer toda tranquiladad que existía se esfumo como un sueño, sonó el teléfono no conteste al instante pero si conteste era Kyan y me dijo que ya venía en camino que había una cola larga en el autoservicio que no tardaba mucho y colgó.
Era ahora o nunca e intente abrir la caja no me importo que estuviera con candado solo quería ver que contenía esa misteriosa caja y fue el destino no lo se pero se rompió el candado sin forzarlo mucho.
Y pude ver el contenido de la caja.
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Una Sumisa Del Monton
RomanceRose una chica ordinaria sin muchas expectativas de vida, sin ganas de nada, viviendo en un sitió donde no hay lugar para ella. De las decisiones más importantes de su vida escoge ser historiadora en un lugar que no perdona a nadie. Y es ahí donde l...