Me encontraba tirado en la cama de mi cuarto buscando algo bueno en la televisión, pasando canales que no tenían ni en lo más mínimo algo que llegase a interesarme.
Apagué el televisor rindiendome de haber podido encontrar algo de mi agrado en ese estúpido aparato. Me sentía aburrido y abandonodo ya que mis mejores amigos, Louis y Harry salieron a algún lugar desconocido para mi, lo más probable es que haya sido un motel para que pudieran coger.
Despojé mi musculosa negra del cuerpo y mi pantalón, del mismo color, quedando con tan solo unos boxers blancos.
Estaba solo en casa así que decidí hacerme una paja de igual manera nadie podría verme. Introduje mi mano en el boxer acariciando mi pene para poder masturbarme puesto que hace tiempo que no follaba con alguien.
Al principio mis movimientos eran lentos y poco placenteros así que me pusé a imaginar cosas que pudieran ponerme caliente.
Y lo primero que pude imaginar fue: Zayn Malik, un morocho sexy amigo de Louis y ¡joder! Esto se sentía la gloria pues el líquido pre-seminal comenzaba a salir desde la punta de mi pene.
Pero una voz me interrumpio antes de correrme.
-¿Necesitas ayuda con eso? -era Zayn, mierda ¿de dónde coño habia salido?
El morocho acercó su mano a mi erección (sin imaginar que existia gracias a él) y comenzo a bajar su mano sobre mi pene de una manera lenta y érotica.
-Z-zayn. -gemí desde lo más profundo de mi garganta.
-Shh Niall, este será nuestro secreto. -una vez acabado se frase se colocó encima de mi aún frotando sus manos contra mi creciente erección.
De una manera rápida se despojó de su camisa y su pantalón de mezclilla quedando frente a frente a mi.
Me miraba de una manera penetrante, tanto así que hasta asustaba.
Comenzó atacando mis labios de una manera salvaje y necesitada, pidiendo acceso para poder entrar en mi cavidad bucal, algo que no tarde mucho en permitir. Con su lengua exploraba cada parte de mi boca, algo que hacía que me derritiera pues no voy a negar que a este morocho ya le tenía ganas desde la primera vez que Louis lo trajó a mi casa.
Sus manos viajaban desde mi abdomen hasta mis engarrotados muslos.
Antes de separarse de mis labios mordió mi labio inferior haciendome jadear y gemir como toda una putita.
Ahora estaba completamente desnudo ante su merced mientras el yacia encima mio con solo unos boxer rojos cubriendo su notoria erección.
Sus labios empezaron a atacar en mi cuello dejando pequeñas mordidas que me hacian retorcerme de placer en el colchón de mi cama, sus besos húmedos siguieron un sendero desde mi cuello hasta mi hombro y ahí se dirigió a mi pezón izquierdo mordiendolo levemente, mientras con sus manos acariciaba levemente mi pene haciendome arder en deseo.
Cuando acabó con mi pezón dirigió esa lengua, que ahora me estaba derritiendo, a mi ombligo donde dejo varios besos para así posar su mirada en mi pene que necesita atención. ¡Ya!
Y como si mis plegarias hubieran sido escuchadas por los dioses del cielo Zayn comenzó a dar pequeños besos en mi pene lo cual peodujo cada vez más jadeos y gemidos por mi parte haciendolo sonreír de lado a lado.
Dio pequeñas lenguetadas en mi amigo más intimo lo que hiciera que yo quisiera casi estallar de placer. Introdujo mi pene en su boca, chupandolo, dandole pequeñas mordidas y llenandome de placer. Jesús, esa boquita que poseé el morocho es mágica.
-M-me v-voy a co-correr Zayn...-dijé con mi respiración agitada y sintiendo como el orgasmo llegaba a mi. Pero a Zayn le valió madres lo que le dije y no se detuvo, al contrario empezo a moverse de una manera más exitante haciendome correr dentro de su boca, y que el morocho se tragara aquel líquido blanquecino que provenía de mi.
A horcajadas se subió arriba de mi mientras se quitaba sus boxers y volvia a atacar mis labios haciendome probar como sabía yo mismo.
-Uno...- dijó con voz ronca mientras introducia uno de sus dedos en mi entrada y yo gemía desde lo más profundo de mi garganta, si seguía así me hará tener otro orgasmo cuando recien me estoy recuperando de uno. -Dos...- habló de nuevo con voz áspera metiendo otro dedo y deslizandolos a ambos por toda mi entrada.
Sacó sus dedos y posiciono su polla en el lugar donde estaban ellos, pero yo no quería que el entrara en mi, aún por lo que con un movimiento brusco hice que él quedara abajo de mi y empeze a lamer y succionar su pene como el lo habia hecho conmigo.
Sus gemidos eran como música para mis oídos y eso hacia que me prendiera más.
-B-basta N-niall no quiero correr-me en tu b-boca.- y cuando me percaté en lo que pasaba el habia hecho el mismo movimiento que yo anteriormente penetrandome fuerte y corriendose dentro de mi en lo que yo no paraba de gemir y maldecir por lo bien que se sentía que el estuviera dentro de mi y soltara sus líquidos en mi cuerpo.
Comenzó a dar embestidas más fuertes y con su mano masturbaba mi pene haciendome sentir en el cielo.
Al acercarse a mi clavicula y mordela yo le susurré:
-Deberíamos secretos así más seguido.