Cierto día me encontraba en clase de calculo que por cierto no entiendo nada cada vez que el Sr. Diaz hablaba sentía que hablaba en chino
"¡que alguien me saque de este suplicio!"- pensé, pero nadie llego a mi rescate y decir que me sentía mal no era una opción para mi pues una vez que lo intente todos se pararon como si me hubiera caído al suelo y me estuviera convulsionando ¡cuando solo fingía tenia dolor de cabeza! por eso desde ese día aunque me muera del aburrimiento no fingiré nada solo para salir de clases al fin y al cabo quedan agh! cuarenta minutos para que se acabe la clase pensé que ya habían pasado como dos horas al menos ¡que horror!
- Emma Thompson, pasa a la dirección - dijo el maestro y todos voltearon a verme con interés, yo abrí los ojos como platos
- ¿P- pero que hice? - dije alzando la voz dos octavas por el susto jamas me habían enviado a la dirección siempre sigo las reglas ¡soy niña buena! por dios
- Pasa a la dirección Emma por favor - dijo una vez mas y me levante dudosa
- llévate tus cosas - dijo el y me le quede viendo con las preguntas en mi expresión el asintió con una sonrisa tranquilizadora para que tomara confianza e hiciera lo que me pedía, al final lo hice, salí del salón y mientras hacia mi recorrido sentí una oleada de pánico al imaginarme para que me querían en la dirección tal vez sea por que mi hermano murió en la guerra y me hablaron para que no pierda los nervios en la clase
-¡oh no! - jadee y me lleve las manos a la boca mientras sentía que mi corazón se detenía y después latía como si se me fuera a salir del pecho.
Camine unos pasos mas para llegar a la dirección y me detuve antes de tocar puerta, respire profundo tratando de calmarme y rezando para que no fuera eso, que fuera todo menos eso y toque espere unos segundos y salio la directora Wesley
- Hola Emma, te estaba esperando - dijo mientras salia cerrando la puerta tras ella
- Buenos días directora Wesley - dije educada
- Buenos días - respondió asintiendo - alguien te espera adentro vendré en diez minutos - dijo y la vi caminar por el pasillo mientras mi corazón latía desbocado, de nuevo levante una plegaria silenciosa y abrí la puerta
- ¡NO PUEDE SER! - grite
- ¡Hola hermosa! - dijo mi hermano abriendo los brazos hacia mi, yo no dude ni un segundo para abalanzarme hacia el y abrazarlo con todas mis fuerzas - ¡por dios! - fue lo único que pude decir por que estaba llorando de felicidad, no puedo creer que este aquí después de tres años de no verlo ¡esta aquí!
- Tranquila, tranquila Emma no llores estoy aquí - susurro mi hermano acariciándome el pelo tratando de consolarme
- Como estas, que haces aquí, cuando llegaste y por que yo no sabia que vendrías - lo ataque a preguntas cuando logre calmarme un poco y me aleje de el
- Tranquila enana contestare todas tus preguntas, pero aquí no ¿esta bien? - asentí y en ese momento entro la directora
- Muy bien veo que ya hablaron, Ema te dejare salir temprano hoy, ve con tu hermano y disfruta algunos momentos de calidad con el - dijo con una sonrisa y sonreí también
- ¡Gracias directora en serio gracias! - dije con fervor
- De nada Ema, fue un gusto verlo de nuevo señor Thompson - dijo la directora dirigiendose a mi hermano
- Lo mismo digo directora - respondió mi hermano con un asentimiento de cabeza, recogió mi mochila del suelo, que ni siquiera recuerdo haberla tirado. Salimos de la dirección y caminamos por los pasillos vacíos mientras mi hermano llevaba mi mochila colgada del hombro y con el otro brazo descansando encima de mis hombros mientras yo pasaba un brazo por su cintura
- Que te parece si para comenzar el dia vamos por un helado - dijo sonriendo
- ¡Claro, quiero uno de chispas de chocolate!
- Pues de chispas de chocolate serán - dijo mi hermano riéndose pues había parecido una niña de cinco años.
Mi hermano Daniel y yo nos encontramos en una plaza comercial comiendo helado veo con nostalgia su uniforme de soldado que trae puesto y por primera vez me doy cuenta que no trae mochila y recuerdo que tenia un montón de preguntas que hacerle.
- Oye y cuando llegaste, por que no traes mochila
- Llegue hoy princesa cuando tu ya te habías ido a la escuela, hable un rato con papa y me aconsejo que en vez de esperarte a que llegaras o llamar para que supieras que estaba aquí fuera por ti y te llevara a... hacer algo, dijo que seria lo mejor y creo que tuvo razón - dijo y sonrió me quede viendo a sus ojos verdes profundos los ojos que he querido ver desde hace tres años y la sonrisa que me hace sentir segura, que me hace saber que estaré bien y que no me pasara nada
- Emma que tienes - dijo preocupado, alargo una mano y me enjugo una lagrima no me había dado cuenta que estaba llorando
- ven aquí - susurro y me puso en su regazo y dejo que llorara un rato mas hasta que pregunto
- Y ahora por que lloras
- Es que, te extrañe tanto me has echo mucha falta hermano no sabes todas las cosas que quise compartirte - suspire el me enjugo una ultima lagrima y me sonrió con ternura.
- Ya no pienses en eso linda disfrutemos de los momentos juntos ahora que estoy aquí - susurro - Anda come de tu helado, no lo pague solo para que se derrita.
Eso me hizo sonreír, me fui a mi silla y me dispuse a comer mi helado, le dije todas las dudas que tenia y el me las contesto todas donde ha estado, como le ha ido, los pocos amigos que tiene el en ejercito, como se divertían allí, etc. cuando acabe solo quedaba una ultima pregunta y la que mas me daba miedo.
- Y... cuanto tiempo estarás aquí - dije en un susurro, el suspiro se acomodo en su silla y cruzo los brazos sobre el pecho
- Solo dos días - yo solo asentí me recargue en la silla y me puse a jugar con un mechón de cabello mientras pensaba que ya sabia que solo tendría poco tiempo con el, pero ahora que lo dijo se siente como si no fuera nada pero a la vez todo, por lo tanto tenemos que aprovechar todo el tiempo que podamos y eso es lo que haré.
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En multimedia Daniel hermano de Ema
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Un chico vampiro y yo ©
VampirosUn chico vampiro, una chica humana, un amor prohibido, secretos, profecías, peligros es todo lo que contiene la historia de amor de Christopher y Ema acompáñalos en esta trágica historia de amor. Todos los derechos reservados. Cualquier copia o...