CERN. Parte uno

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"Esto es una verdadera locura."

Bufó un científico del centro de investigación conocido como el CERN.

El proyecto fue apoyado por otros, por la cual su palabra era vana...

Frustrado, quería demostrar su hipótesis...aquella que avala que la creación del PROYECTO ERA PELIGROSA Y ABSURDA.

De nuevo, el hombre jugaba a ser Dios, pero este era un riesgo muy alto.

El agujero negro ya tenía fecha de reproducción.

Era un evento de suma importancia a nivel mundial...que coincidía con el mundial de futbol del año 2014. Sin duda, el futbol tendría más audiencia que este momento que pasaría a la historia...

Los cálculos matemáticos no podían mentir, aseguraba un científico ya algo mayor.

El aseguraba que con una pequeña porción de esta fuerza, sometida, eran capaces de controlarlo. Pero su colega y mejor amigo, decía que no. Él afirmaba que podía ser tan potente, incluso más. Si basta ver lo poderoso que era una bomba atómica, con el solo choque de los átomos. ¿Qué pasaría entonces, con la destrucción de estos en un acelerador de partículas? Ocurria el agujero negro a escala.

¿Serían capaces de cerrarlo? La supercomputadora decía que si. Había una forma. Él no se lo creía.El agujero negro es un cuerpo nacido de una estrella muerta que absorbe y destruye todo a su paso, incluso a la luz. Era el todo contra la nada. Fuerzas contrarias atraídas y llevadas al limite de cada una. La materia contra la antimateria causaba destrucción pura. No era muy ferviente a Dios ni apegado a la Biblia. Pero para él, el apocalipsis estaba por ocurrir.

Era conocido como Jean Goultier, de origen francés de 40 años, tenía un porte rudo, su semblante era un poco despectivo y mostraba un carácter rigido. No había sido escuchado...

Lo peor, le aconsejaron "mejor ve a ver el partido..."

Lo excluyeron. Y a traición por su mejor amigo.

Claro, él estaba loco por querer evitar el fin del mundo...que triste. La gente no está interesada por la ciencia. O eso era lo que pensaba al estar frente al monitor, molesto, pasando de un canal al otro.aun no comenzaba la transmisión del evento llevado a cabo en el CERN. Su casa era acomodada, no tenia de que quejarse. Sólo le inquietaba "eso"

Estaba ya con una pijama, no tenia planes de salir. Por ese día, lo habían echado.

Escuchaba a las personas eufóricas dado al gol de su equipo...

Je, en cambio Francia iba perdiendo...¿Ver el partido? Si,¿Por qué no? ¿Por qué no?

Alegrarse con lo poco que el sistema nos vende, con aquello que nos tilma. Ese modo de control para calmar a las masas inquietas y que puedan causar problemas como individuos.

Los vuelven un solo ser maleable...un ser colectivo que se cree libre y que goza de ver un partido de fútbol que el evento que causaría su muerte; creyéndose rebeldes.

Tal vez si uno fuera a morir, lo mejor es gozar de un buen partido de fútbol...

¿Buen partido? Francia estaba siendo madreada, literalmente...1 a 3... en el primer tiempo.

Ni eso podía alegrarle un poco el día. De pronto,algo llamo profundamente su atención, un reportaje sacado de último momento...

Había pasado una pequeña falla y ahora no podían proceder...¿una falla? Pero si todo estaba listo. Decidió no cambiar de canal-de todas formas, Francia estaba más que jodida en el partido.-un señor apareció de golpe en la pantalla, de la nada, fue filmado.

-¡no lo hagan!-exclamaba el personaje...-¡será nuestro fin!-y desaparece tal y como apareció...

Eso era algo realmente nuevo. ¿Habrá venido del futuro para impedir el fin del mundo? Pero...si eso iba a pasar hoy ¿de que futuro habla este sujeto?

¿Entonces no será este el fin del mundo? ¿Sobreviviremos...?

Todo eso era absurdo, debió haber sido un actor, un efecto creado por la televisora...Einstein apareció en su mente.

Estaba tan sumido en sus pensamientos, recordando los conceptos de la relatividad, que cuando giró a ver su cocina se sorprendió, no tenía nada de comida. ¿Tan poco tiempo pasaba en su casa?.

La transmisión anuncia que el proyecto está siendo retrasado, pero que se empezará en esa noche. A las 11 pm...

11 pm...faltaban 6 horas.

Decidió ver el partido, tal vez Francia si se recuperaba.


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