-Y tú ¿¡Quién eres zorra!?- dije al momento que tomaba la mano de Julia que amenazaba con golpearme una vez más – ¿¡Quién te dio el derecho de golpearme o de insultar a mi amigo!?- dije arrastrando a Julia para que quedara frente a mí.
-¡No te atrevas a insultarme pedazo de porquería!- dijo Julia mirándome a los ojos.
Sus ojos eran completamente enigmáticos, bastante lindos, bueno hasta enojada tiene ojos lindos, pero eso no importa ahora.
-¡Oh! Pero si eres la zorra que se acuesta con su "primo"- enfaticé lo último sonriendo de manera malvada - ¡Mira! y ¿Cómo van las cosas con los amantes?- dije en tono burlón.
-Yo quiero explicarte eso- dijo Julia al momento que bajaba la mirada – ¡FUE ÉL QUIEN ME BESO, YO NO PUDE HACER NADA!- gritó.
-Bueno, eso es lo que menos importa - dije en tono despreocupado soltándola mientras caminaba hacia donde Anthony estaba parado –Lo nuestro terminó, ¡Bye, bye!- dije mientras tomaba la mano de Anthony despidiéndome con la otra mano y empecé a caminar las 4 calles que faltaban para llegar a nuestro destino.
El camino se hizo bastante corto, eso debido a que iba casi corriendo, aunque en el transcurso de éste ninguno de los dos dijo nada, sólo nos mantuvimos tomados de la mano caminando esas cuatro calles hasta llegar a una pequeña plaza donde haríamos las compras programadas y para nuestra fortuna donde encontraríamos a Alfredo una vez más.
-¡Pero que pareja más linda hacen ustedes dos!- al parecer Alfredo sería nuestro tormento el día de hoy. –Pero qué malo eres, prometiste que si salías con un chico sería el primero en enterarme- dijo haciéndose el ofendido –y ahora que te veo más de cerca ¿Qué te paso en la cara?, no me digas que a este niño le gusta lo salvaje- dijo mientras tapaba su boca con la mano simulando asombro –la juventud de hoy en día es muy precoz, ¿no te parece amor?- dijo dirigiéndose a su novio.
-Lo dice quien tuvo relaciones en un baño público- dije en un tono acusador señalando a mi amigo quien moría de vergüenza y miraba con cara de perrito regañado a su novio –y estoy así porque me agarré a golpes con el novio de mi ¡a-mi-go!- dije lo último con énfasis para que Alfredo no tejiera una historia de amor como siempre lo hace.
- Exnovio- murmuro Anthony
-Bueno, ya son muchas explicaciones ¿no?- dije rápidamente para cambiar de tema, pero ahora que lo pienso, puedo empezar preguntándole por su novio o exnovio o lo que quiera que sea y así ganarme su confianza –creo que deberíamos ir primero por mi celular –dije dirigiéndome a Anthony que estaba parado mirando un puesto de helados – ¿quieres un helado?- le pregunté, me miró como un niño de 5 años al cual le preguntas o regalas algo, con una sonrisa enorme en el rostro, apenas había terminado de preguntar y él ya me había arrastrado al local de los helados.
Llegamos al aparador de la heladería que estaba inaugurando el día de hoy, por lo que había una excelente promoción, dos por uno en helados grandes, promoción que obviamente aprovechamos, aun no decidíamos que sabor elegir pues habíamos llegado al "valle del helado", había tantos sabores que era difícil elegir uno, por suerte podías combinarlos, yo elegí chocolate, fresa, cappuccino, y menta mientras que Anthony eligió zarzamora, café y aguacate. De verdad que este chico es raro.
Habíamos empezado a comer los helados en una mesa dentro de la plaza cuando la parejita que hace unos momentos habíamos dejado atrás, llegó.
-Bueno patito orange- apodo que Alfredo me decía cada que quería hacerme enojar -¿No vas a presentarnos a tu a-mi-go?- dijo la última palabra de la misma forma que lo había hecho yo.

ESTÁS LEYENDO
"LOS OJOS DE LA VERDAD"
RomanceEn todas las historias que he leído se empieza con un "erase una vez", aunque ese argumento es mi cliché, debería empezar contándoles algo sobre mí, y sobre el día que conocí a esa persona tan especial, pero me estoy adelantando, primero debo hacer...