Supongo que ya lo sabía,
yo no te importaba...
Mi experiencia lo decía,
incluso cuando yo no la escuchaba.
Ahí estaba decidida,
a avisarme sin descanso.
Hay cosas que se saben,
pero que fingimos no saber.
Por darnos un capricho
Y pensar...
que esta vez no podemos perder.
Es triste, ya lo sé,
el inventarnos nuestros sueños.
Para luego no poder cumplirlos
ya que sometidos estamos
a esta realidad umbrosa
que nos comprende si nos da cobijo,
que no cobija si de ella depende.