¿Cómo olvidarla?

Desenvolviendo Verdades (parte 2)

Michael
Desde hace mucho tiempo le pedí a mi mejor amigo Charlie, quien se especializaba en la alquimia y cosas increíbles, que me haga un favor pues suponía que la maldición se pasara a su hijo, quien amaba tanto. Una maldición que era hereditaria. Michael podía ver personas muertas.
De pequeño miraba gente que estaba en su cuarto, acosándolo por las noches, y lo peor de todo, se miraban sus heridas, no lo soportaba, sin embargo su padre, quien también podía verlo, se encargaba de correrlos, sin embargo en cada lugar que iban, no faltaba un desgraciado viéndolo fijamente. Para él, fue una maldición, y debido a eso se inclinó al alcoholismo. Él no quería que su hijo pasara por lo mismo y es por ello que Charlie trabajó duro para aprenderse la técnica y acabar con la maldición, sin embargo le llevó tiempo, y muchas personas ya lo tomaban por loco...
Por lo visto Charlie lo logró, pero al parecer Richard, se molestó conmigo y se enteró de todo, incluso decía sobre una chica llamada Helena y que nadie le creía...
"Yo sí le creí, pero sin la maldición ya nunca volvería ver fantasmas, y por eso acepté el hecho de contratar un psicólogo para que no lo tomaran como loco y su vida no se convierta en miseria. Sin embargo, creo que me equivoqué, debí explicarle antes... Justo ese día le iba a decir que me acompañara a ver a su madre, pero, se encerró en su cuarto y, no supe qué hacer"
Cuando terminó el psicólogo con Richard lo miré muy serio, parecía convencido de que Helena sólo fue un producto de su imaginación. Todo se acabó. No hay que explicar nada.
-Papá, Helena no existe. ¿verdad?
-¿Tú qué crees?
-Ella sólo existió en mi imaginación, y nada más.
-Está bien hijo.
Pasó el tiempo, y noté que Richard había cambiado... Parecía tener una vida normal, no pudo hacerse amigo de nadie pues ya iba a terminar la preparatoria.
-Hijo ¿Ya decidiste la carrera que llevarás?
Pasaron unos segundos de silencio y finalmente dijo:
-Seré psicólogo...