I'm need to Liam

En una noche en la que muchos deberían estar contentos, demasiado felices a lado de sus familiares, festejando riendo, comiendo tarta, abriendo regalos entre bromas. Los padres de Liam Payne miraban con mucha tristeza aquel tétrico salón; el cual habían rentado para el cumpleaños de su hijo, habían invitado a todos los chicos del curso de Liam, sin siquiera importar que no tomaran las mismas clases que él, ya había pasado dos horas después de la acordada en las invitaciones y no había nadie en aquel salón, mas que Liam y su familia.

Liam estaba cohibido, le había agradado el gesto de sus padres, pero él no era precisamente un chico popular, o con por lo menos amigos, veía tras la ventana para no hacer contacto con la mirada de su madre y echarse a llorar, pero todo aquello era difícil. Era su cumpleaños joder. Habían invitado a media escuela. Nadie había asistido.

El reloj del salón marcaba las diez con cuarenta y cinco minutos, nadie llegaba. Liam volteo la vista a la mesa del pastel y vio el enorme pastel que su madre había hecho, junto a tres regalos -que por supuesto eran de su familia- suspiro para que sus ojos no le dieran una mala jugada.

"Mama, ¿y si comemos pastel?" al castaño le dolía hablar con aquel nudo en la garganta "Tengo mucha hambre" mintió para que su madre no se preocupara, pero su madre ya lo estaba.

"Claro pero traeré las velas" musitó apenas levantandose de su lugar para comenzar a preparar el pastel.

Las velas ya estaban en el pastel de muchacho, sus padres estaban a su alrededor para cantarle el 'Feliz cumpleaños' y a Liam se le hacia difícil retener las lagrimas. Justo cuando la primera gota salada corrió deliberadamente por la mejilla izquierda del castaño, se escucho un ruido en la puerta, los pocos presentes –incluyendo Liam- voltearon alarmados enseguida '¿un asalto? Lo que me faltaba para el mejor cumpleaños' pensó el castaño.

Gracias a miles de tropezones un chico de estatura baja y de cabellera teñida, logro pasar la puerta del salón, regresándose porque había tirado algo, al momento que volteo la mirada al salón, el chico rubio se sorprendió. No había nadie. ¿tan tarde era? ¿pero por que todo estaba tan limpio?. El chico rubio trago en seco y sus mejillas se sonrojaron. La madre del festejado corrió hacia él casi eufórica, para abrazarlo.

"Que alegría que hallas podido asistir a la fiesta Liam mi querido..." se pauso un instante al ver que no sabia el nombre del pequeño rubio.

"Niall" contestó con una sonrisa tímida ante el recibimiento de la señora Payne

"Claro, claro. Niall" la mujer hizo un gesto con su mano restandole importancia a su pequeño tropezón al no saber su nombre "¿tienes hambre?"

"Por supuesto" contesto. Y no mentía, Louis lo había dejado, no había querido pasar por él solo por que tendría que pasar por Harry después de haber pasado por Zayn, para ir a la fiesta de Payne, si los cuatro había decidido asistir -aunque el único que conociera al castaño era Niall- así que Niall se había tenido que venir en autobús y lo había dejado muy lejos del lugar de la fiesta.

Liam no se lo creía en lo absoluto. Alguien estaba en su fiesta. Alguien había llegado joder. Pero no era nadie cualquiera. Era Niall Horan, el rubio que siempre jugaba con los maestros en las cuatro clases que compartían –Literatura, química, historia y biología- no lo creía, como era que Niall había querido asistir a su fiesta. Como era que alguien como el estaba ahí con el saludando a sus padres como si fueran los mejores amigos de toda la vida.

El rubio, con mejillas sonrojadas y calor corporal al máximo, camino hacia el castaño con una bolsa de regalo en la mano.

"¡Feliz cumpleaños, Liam!" dijo lleno de entusiasmo mientras que se lanzaba al cuerpo del chico contrario y le abrazaba con fuerza.

"Sabes mi nombre" susurró sorprendido en el oído del rubio.

"¿Pero como no iba saberlo?" pregunto sonriendo "Si vamos juntos en Literatura, química, historia y biología." el castaño lo vio sorprendido, si es que mas se podía.

"Aquí esta Niall" hablo la madre de Payne colocando la comida frente al invitado de cierta forma inesperado "espero te guste, los dejo para que se diviertan" dijo la mujer muy agradecida.

Niall asintió y comenzó a comer a lado de Liam. Si de Liam payne, el chico por el cual había pasado el peor primer año de secundaria, no entendiendo por que le atraía mas un chico que todas las chicas juntas del instituto. Se había dado cuenta después de un tiempo –gracias a una platica con Zayn, Louis y Harry- se había dado cuenta que no era homosexual, pero estaba enamorado del castaño Payne y había sido lo bastante astuto como para ocultar aquellos sentimientos.

"Perdón por llegar tan tarde..."

"No." el castaño interrumpió al ojiazul "Yo debería darte las gracias por asistir a mi cumpleaños, como puedes ver, no ha venido nadie" murmuro avergonzado, mientras rascaba su nuca distraidamente, con la mirada hacia el piso.

¡No había venido nadie!. Pero que estupido, no había tomado eso como una opción, el pensaba que alguien tan bello como Liam debería de rebozar de amigos. Estaba equivocado. Los dos chicos se quedaron en un silencio totalmente incomodo.

"¿Esto lo ha cocinado tu madre?, dios esta delicioso." hablo el rubio tratando de acabar con aquel feo silencio y abandonar el tema tan decepcionante.

"Que bueno que te guste" murmuro el castaño "Tal vez tengas que llevarte bastante a casa" sonrió con un poco de molestia, al recordar lo entusiasmada que habia estado su madre con todo.

"Me encantaría" murmuro un fascinado Niall

Liam lo miro, y vio que no mentía, él estaba feliz por estar en su cumpleaños, comiendo lo que su madre había preparado. Niall saco un cajita de plástico que traía consigo en un maletín, llevándose el dedo índice a su boca mientras veía a Liam, para que este ultimo no dijera nada.

"¿Quieres?" murmuro el rubio, con una cajita de gomitas de colores en sus manos

"Claro." Liam lo miraba anonadado. ¿a caso podía existir cosa mas tierna que este chico? "Pero. ¿Por que murmuramos?"

"Supongo que todas las mamás son iguales." se encogió de hombros "Y a mi mama no le gusta que coma gomitas, si no he acabado mi comida."

Definitivamente no había nada mas tierno que Niall, y todo el sufrir que había pasado en el segundo año de secundaria -por ser descubierto, por un 'amigo' que amaba a Niall- había valido la pena por completo. Afortunadamente sus padres le habían aceptado tal como era.

Ahí estaban dos chicos sumamente enamorados el uno del otro, pero ninguno de los dos estaba percatado del sentimiento del otro.

"Ese chico, Niall, ¿es?"

"Si." contesto rápidamente la mujer a su esposo "Aunque solo estén ellos dos te puedo asegurar que es el mejor cumpleaños de Liam."

"No necesitas ni decírmelo, se le ve en el rostro, a mí pequeño muchacho."

Los dos chicos platicaban de cosas escolares en aquella mesa, a Niall le hubiese encantado llegar mas temprano, para poder estar mas tiempo con Liam, era tan agradable, tan lindo, era él, el chico perfecto. El celular del rubio sonó y este se levantó rápidamente a contestar disculpándose con Liam.

"¿Bueno', ¿Louis por que no han llegado?" pregunto al contestar