Mi pais de las Maravillas

"Dilemas que llevan a dilemas"

¿A alguien le ha ocurrido que cuando quieres explicarle a un niño de cinco años sobre cómo nació, no tienes palabras para que su pequeño cerebro te entienda?

Bueno, a pocas personas les ha ocurrido eso. Todas tienen la ayuda de maestras de jardines infantiles y sus padre para explicarles. Pero como algunas personas no somos parbularias, no tenemos a nuestros padres, o simplemente no pensamos, no nos sirve ni a nosotros el ejemplo de la abejita y la flor.

Así que para que mis amigos entendieran mis palabras, tuve que hablar lenta y básicamente. Porque resulta que no solo eran adolescentes de dieciséis con vida alocada, no solo eso.

También pertenecían al sexo masculino.

Asi que las chicas ya se podrían hacer una idea de lo que me estaba pasando.

—por enésima vez, Mike— dije aburrida, todo rastro de paciencia se esfumó de mi humanidad —el equipo de soccer, entraré en el equipo de soccer, pero como soy pésima un amigo me ayudará a mejorar.

—pero el equipo de soccer de tu clase es solo de varones ¿Qué tienen que ver con el de la escuela? —preguntó Nicholas, como acto-reflejo me di un cabezazo contra el suelo. Porque estaba tirada en el piso con un brazo cubriéndome los ojos.

—tiene mucho que ver, porque cuando mejore, me aseguraré de ser la mejor, y cuando lo sea, me aceptarán en el de soccer que es mixto, y no tendré que hacer ninguna estúpida prueba— solté un suspiro exasperado.

—Si, bueno... no habría problema que entraras en el seleccionado escolar, pero... ¿el de tu clase? Los grupos de las clases son de hombres y féminas por separado ¿porqué no solo entras en el de chicas? —hice una mueca por el "féminas" de Mike.

—porque, por quinta vez, Mike, mi clase no tiene un equipo de chicas, solo de chicos.

—con mayor razón si es de chicos tienes menos posibilidad de entrar, además de que el soccer es brusco, sobre todo si es en el seleccionado escolar, en el que por cierto NO HAY NINGUNA CHICA POR LA MISMA RAZÓN.

Si pudiera blanquear los ojos lo habría hecho, pero mi brazo protector de miradas fijas que posiblemente me mandaban, me lo impedía.

—con respecto a mi clase, tengo un plan. Que debo prepararlo antes del siguiente mes, y con respecto a lo segundo... poco y nada me importaría ser la única chica entre chicos, estoy acostumbrada a estar entre hombres. Toda mi vida ha sido así, incluso hay chicas que dicen que soy como su príncipe azul... pero eso es otro tema ¿bien?

Silencio, solo eso hicieron. Guardar silencio. Hasta que la voz de George arruinó todo con el único tema que estaba evitando.

—Ali se besó con un chico de la D— lo siguiente que pasó fue extraño. Habían varias puntos que aclarar.

¡EL PRIMERO!

Que los chicos estaban todos en el piso, porque a todos los descerebrados se les ocurrió la misma idea de saltar de sus lugares para quedar más cerca de mí, ignorando el pequeño cartel amarillo con la simpática figurita negra de un hombre resbalándose que decía "piso húmedo".

¡EL SEGUNDO!

Yo, por estar en el piso (lo cual fue una pésima idea) fui una clase de amortiguador para tres de los seis idiotas que se resbalaron. Los cuales parecían pesar ene toneladas. Cada uno. Y no, no por jugar futbol americano, ser deportistas, y tener cinco músculos por cada musculo de su cuerpo, signifique que vayan a pesar tanto como sus cerebros.

¡EL TERCERO!

Aun estando aplastada podía pensar, porque pese a ser como un chico seguía siendo una chica (no estaba diciendo que era una marimacha, porque no lo era, igual era femenina), y todo el mundo sabe que las chicas pueden hacer más de una cosa a la vez. Como pensar mientras es aplastada por unos mastodontes.