El señor de los anillos IV , El nigromante

Dol Goldur

Telda la reina del Rhun iba camino a la comarca, cerca de 300 jinetes armados, su guardia real iban con  ella, para su proteccion, aquel era un viaje sin precedentes, ninguna reina o rey de aquellas regiones habia viajado tan lejos y solo para asistir a una boda, sus consejeros jamas habrian aprobado aquello, ella habia tomado la decision sin consultarlos, pero otros opinaban lo contrario que una reyna como telda pudiera hacer ese gran viaje sin temor y para un motivo de tan poca importancia como asistir a una boda eran señal que los tiempos cambiaban para bien y en verdad que hace mucho que no se veia esa tranquilidad en aquellas regiones, algun grupo de orcos bien armados como para un real combate, los ultimos orcos vistos por la reina eran mas bien criaturas que daban cierta lastima, delgados sin fuerza para combatir , cometiendo pequeños robos en su reino, los orcos habian dejado de ser un peligro real desde hace tiempo, en su reino habia dejado de darles caza desde hace tiempo aunque los ejercitos de gondor seguian cazandolos aun.

La reina y su comitiva ya llevaban varios dias de camino , Telda habia querido cortar algo del camino y no habia querido hacer un rodeo sobre el bosque negro, Telda habia querido cruzar por ese antiguo bosque y realmente aquella boda le habia dado el motivo que necesitaba para hacerlo.

El camino del bosque negro era una ruta que en otras edades habria sido muy temida, en el interior de aquel bosque habria morado el Nigromante se hizo construir una fortaleza que fue conocida como Dol Goldur, desde hay habia comenzado a reunir a sus leales, a sus ejercitos oscuros hasta que fue expulsado por los elfos de Lothlorien dirigidos por Galadriel y su esposo Celeborn, destruyendo Dol Goldur, las tinieblas del bosque negro se habian disipado despues de la expulsion de Sauron Y se podia cruzar sin temor alguno, pero la oscuridad de aquel lugar no desaparecio totalmente, la espesa flora de aquel lugar, los gigantescos arboles hacian que la luz del sol no pudiera entrar, la sombra provocada por Sauron habia desaparecido pero aun seguia siendo un sitio oscuro  y aun seguia siendo evitado por elfos , hombres y criaturas libres cruzar aquella ruta.   

La guardia de la reina no sintio ningun temor en recorrer aquel sitio,  el bosque todavia guardaba algo , una antigua maldad se decia,  extrañas y salvajes criaturas sin amo alguno habitaban todavia aquel bosque, criaturas que aun no tenian nombre creadas por el señor oscuro, ademas estaban los arboles, arboles tan viejos como las edades del mundo de corteza negra y alma negra . 

Para la reina aquella visita era el verdadero proposito de su viaje hay habia perdido algo muy querido por ella, al menos eso creia ella.

Despues de algunos dias de haber entrado en aquel bosque muchos de aquellos valientes guardias de la reina comenzaban a dudar de su decision de acompañar a la reina en aquella travesia, la compañia de esos raros y amenazadores arboles de corteza parda, ese estraño silbido provocado al pasar el viento entre sus ojos, la mirada constante de raras aves que se posaban sobre sus ramas y de  extrañas bestias aun salvajes sin nombre, hacian que la atmosfera de aquel bosque fuera opresiva , asfixiante.  La  angustia y un miedo creciente surgia entre los guardias, como si sobre ellos hubiera una amenaza latente, el no poder ver la luz del sol era lo que mas comenzaba a afectarles y uno de los consejeros de la reina fue a comunicarle a la reina la situacion

-Señora mia, los hombres comienzan a inquietarse , creo que comienza a afectarles el extraño embrujo de este bosque, algunos creen que los arboles les hablan y temen de las bestias que nos rodean

-lo se, amigo Tiro, pero me temo que solo podemos seguir hacia adelante, estamos segun mis calculos cerca de la salida del bosque.

-Yo he pasado por este camino mi reina y no habia sentido nunca tanta inquietud , creo que algo ha cambiado desde la ultima vez que pase por aqui me temo, me preocupa tambien  que el camino que tomamos no es el mas corto para cruzar el bosque, creo que nos lleva a la antigua fortaleza.